Capítulo 25 "El puente de Marie"

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El puente de Marie


Cristina

Bueno, plan uno.

Hilary River debe salir de ahí, no soy tan cruel para coquetear con ella al frente. Lo que menos quería era que ella creyera que me burlaba de sus sentimientos.

Así que me arrimo a la columna que está junto a unas gradas para el segundo piso y miro a ambos. Conversan por unos minutos y cuando no hay cambio me siento en las gradas. Cabeceo un par de veces porque me estoy aburriendo de verlos, pero cuando voy a dormirme ella se levanta y se va.

¡Por fin señor!

Me levanto pero estoy tan distraída en ver como ella se aleja que no me fijo en que falta una grada más y en menos de un segundo se me sale el corazón y aterrizo en el piso. Por suerte la música suena fuerte, de lo contrario todos me hubieran regresado a ver por tremendo sonido.

Cierro los ojos tratando de aguantar el dolor en mi trasero. Auch, Auch, Auch, de todo lo que pude golpearme... ¿tuvo que ser eso? Ayy, qué dolor. Pude caer de rodillas pero no, tuve que irme hacia atrás.

¿En qué clase de malévolo mundo estaba?

-¿Estás bien?

Alzo la mirada y veo a McFly viéndome extrañado-¡Genial! Seguro ha oído el golpe-se acerca sacándose la chaqueta y se arrodilla frente a mí. Quiero preguntarle para que me la da, porque no tenía frío pero me sonrojo cuando la pone sobre mis piernas.

¡Joder! ¡Pero si me estaba viendo todo!

Consternada por eso, me sonrojo y tapo mejor mis piernas con la chaqueta-¡Qué vergüenza! En este momento de verdad creo que debí quedarme en la habitación. Tal vez incluso era una seña para no salir porque iba a pasar esto-Su mano se me es ofrecida y la tomo sin verlo.

Joder, mi dignidad ha desaparecido. Ni siquiera recuerdo que bragas traía.

Espero que hayan sido unas normales, por favor. Por mi escasa reputación que me queda, si es que me quedaba pisca alguna.

-G-gracias-murmuro cuando estamos levantados.

No alzo la mirada, no creo que pudiera volver a verlo. Además tenía que tomar nota, debía usar vestidos más largos para evitar esto.

Aunque tal vez no las vio por completo, porque el vestido se hundió y pudo haberme salvado pero al haberse subido seguro que se veía más del límite permitido de mis piernas.

Agh, la situación la viera como la viera seguía siendo bochornosa.

Mete sus manos en los bolsillos mientras yo aprieto la chaqueta con todas mis fuerzas.

-Te estaba buscando y resulta que asomas.

-Entonces ha sido por tu culpa que me he caído.

-Existen los deseos conectados, pero eso no tiene nada que ver con que seas torpe con los pies.

-No soy torpe-me cruzo de brazos-solo no vi que había una grada más.

Sonríe de lado.

-Torpe, ciega ¿qué más da?-abro la boca ofendida y él se ríe cuando le arrojo la chaqueta.

-Eres un idiota.

-¿Por ayudarte?-pregunta y gruño empezando a subir las gradas-Espera, ¿qué haces? ¿Ahora quieres rodar de más arriba?

Me sonrojo pero no dejo de subir cuando se ríe. Reverendo idiota. Y de cómo lo buscaba, ahora no quería verlo. Solo quería sentarme y quejarme del dolor. Porque sí, aún me dolía.

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