Conociendo A Mi Alfa ~ TaeJin [Omegaverse]

~06~

"Naranja: Este aroma es dulce y cítrico, así como los omegas que lo portan son independientes y autosuficientes pero amigables a la vez" —

<Guía de Aromas del Omegaverse>

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El calor era abrazador, envolviendo todo su cuerpo, quemándolo y humedeciendo su piel con sudor; sin embargo, se sentía tan bien. No entendía qué le ocurría, ni porqué estaba así de febril, por lo que, cuando consiguió abrir los ojos, respiró agitado, encontrándose en la soledad de su cuarto. Taehyung pasó su mano por la frente, mientras los pensamientos se ordenaban en su cabeza. ¿Habría tenido alguna especie de sueño especial?

Alzó las mantas, descubriendo que, si bien, no había humedad en su pijama, éste se alzaba considerablemente.

- Ugh... - dejó caer su cabeza – Aún no es tiempo – se dijo a sí mismo, poniéndose en pie, para revisar rápidamente el calendario pegado a su pared. Le restaban, por lo menos, cuatro meses para que su celo llegara, por lo que no podía ser ese el motivo. El pensamiento de que no se tratara de él, si no, de su omega, atravesó su mente. Pero Taehyung no recordaba con exactitud la fecha del celo de Seokjin. Sólo entonces, notó que era información importante que necesitaba conocer.

Aun con la extraña sensación en su cuerpo, bajó a desayunar, vistiendo tan pulcro como siempre. En un reflejo involuntario, barrió el lugar con la mirada, en busca de su omega.

- Jinnie está esperándote en el estudio – informó con una maternal sonrisa, su tía Sunny, adivinando sus pensamientos – Dijo que habían quedado para repasar sus materias juntos.

- Sí – asintió, recordándolo al instante.

- ¿No vas a desayunar primero? – dudó la mujer, al ver como el chico daba media vuelta para salir de la cocina.

- Hmm... no tengo hambre – aunque mentía, Sunny le dejó marchar.

Sus ganas de comer podían esperar hasta la hora del almuerzo. Seokjin era su prioridad ahora más que nunca. Su cuerpo sentía una necesidad imperiosa por sentirlo cerca, tocarlo y saber que era suyo.

Seokjin alzó la mirada al sentir que la puerta del estudio se abría. Instantáneamente sonrió, pero la respuesta que obtuvo, le hizo fruncir el ceño. Taehyung olfateó el aire, y sus ojos destellearon como un par de llamas de fuego. Ese no era su primo, en absoluto, y Jin pudo notarlo de inmediato.

- Ya va un tiempo sin vernos, mi omega – habló, sonriendo coqueto, caminando como un tigre rondando su presa.

- ¿Por qué estás dominando a Taehyung? – quiso saber, poniéndose de pie y cruzando sus brazos. Seokjin era consciente del peligro que eso representaba.

- ¿Acaso no extrañas a tu alfa? – le respondió con otra pregunta, llegando más cerca de él.

- Sí, pero tú no deberías estar aquí – a pesar de querer mostrarse imperturbable, el alfa era astuto y travieso, muy diferente de la forma de ser de su parte humana, por lo que el mayor no contaba con que liberaría descaradamente su fresco aroma, aturdiéndolo y saturando la habitación con sus fuertes feromonas, sólo para desquiciarlo. Aquello era más peligroso de lo que imaginó dos segundos atrás – Madre Luna, ¿qué... qué demonios crees que haces? – se esforzó en decir, apoyando sus manos en la mesa, por el repentino ataque.

- ¿No te gusta lo que hueles? – lo tentó, llegando hasta él, paseando su nariz por el cuello cubierto de Seokjin, olisqueando, conservando aquella sonrisa de medio lado y los ojos encendidos en un par de llamas – Porque yo amo tu aroma... - aspiró profundamente, debilitándole las piernas al omega, quien pasó saliva con dificultad, sintiendo su cuerpo reaccionar involuntariamente a las acciones del otro.