4

4.3K 334 79
                                    

La misión había fallado.

Un grupo de mortifagos, Voldemort incluido, habían interceptado el movimiento de Harry Potter desde su hogar muggle. El plan debía funcionar, los tomaron desprevenidos y entonces Voldemort atacaría a Potter.

Pero había un gran problema con eso: las varitas. Harry y Voldemort no podían batirse en duelo con sus varitas, compartían núcleos, eran hermanas, por lo cual, que una venciera a la otra era casi imposible, y cualquier otra varita que Voldemort intentaba usar, no era lo suficientemente fuerte para el golpe.

No les informaban mucho a los chicos, pero Draco y Daphne tenían más acceso a información que Blaise y Theodore , mientras que ellos sabían mucho más que su nueva integrante.

Astoria se veía, diferente, no sólo era el hecho de que físicamente estaba completamente diferente. Su cabello largo, negro y ondulado, había sido cortado, tan corto como lo tenían los chicos. Siempre solía portar mucha joyería, aretes, pulseras, collares, pero ahora no traía nada de eso, pero lo que más se notaba en ella, eran sus ojos

Astoria solía tener un brillo en sus ojos todo el tiempo, llenos de inocencia y sorpresa ante todo, como si cada día descubriera algo nuevo, pero ahora, sus ojos se veían igual de apagados que un faro en el día, incluso más apagados que los de su hermana mayor.

La llegada de Astoria les había caído como un balde agua fría a todos ellos, nadie, jamás, creyó verla cruzar esas puertas en aquellos tiempos. Tenía menos de una semana desde que la menor de las Greengrass había llegado a la mansión Malfoy, tenía años que su rostro no era visto por ahí.

Astoria había empezado a hablar públicamente en contra de los principios que los sangre pura se regían, eso había manchado la reputación de los Greengrass, quienes antes eran consideradas de las familias mágicas más prestigiosas, cuando Astoria en cierto sentido se "revelo", fue botada y negada el acceso a varios lugares, la mansión Malfoy siendo uno de ellos, tan malo era el caso que siempre se habló de algún tipo de abandono o desheredación hacia la chica.

Por ello, verla trabajar bajo órdenes de mortífagos, liderados por Lord Voldemort, ero último que Blaise, Theo, Daphne y Draco esperaban ver.

Por supuesto que no confiaban en ella del todo; de nuevo, no les explicaban mucho, pero según lo que habían escuchado, Astoria había llegado a casa de sus padres, asustada, aterrada y destruida, se había dado cuenta que Voldemort era mucho más poderoso de lo que creía y estaba aterrada de sus decisiones pasadas sin mencionar, completamente arrepentida. Sus padres creyeron que era muy convincente, por lo cual decidieron llevarla con los Malfoy, donde fue aceptada.

Se le daban trabajos simples, llevar mensajes, vigilar puertas y más que nada, mandar a llamar gente al rededor de la mansión, ni si quiera se había encontrado aún con Voldemort. Todos sabían de las lealtades pasadas de la chica, por lo cual nadie iba a entregarle secretos sólo así.

Daphne había intentado acercarse a su hermana varias veces, cuando estaban en público, actuaban como si nada, discutían de ciertas instrucciones y fuera de ello, se mantenían profesionales, pero en cuanto se quedaban solas, Daphne entraba en desesperación y le rogaba a su hermana que le diera explicaciones.  

Astoria hacia dos cosas, o simplemente se quedaba callada y no decía nada o se iba del cuarto.

Incluso Theo y Blaise habían intentado hablar con ella, siempre habían sido cercanos y aunque ya no estuvieran con su hermana, la veían como una hija, pero recibían las mismas respuestas que Daphne.

Draco era el único que no había intentado conseguir respuestas de la chica, igual que todos, quería saber que estaba pasando, no tenía nada de sentido las acciones de Astoria, pero Draco creía que si había alguien con quien ella no quería hablar, era con él.

No Lo Hagas-4 (Draco Malfoy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora