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¡Hay por Dios!
Hace siete días que no subo nada.
Lo lamento, a veces se me olvida que escribo.
............
Sebastian
Me habia preparado durante todo el día para contarle a mamá sobre mi romance con  tini y ella para hablar con los del colegio, así evitaríamos tener que escondernos.
-Mi vida, voy a bajar a decirle a mamá ¿vamos?
Tini asintió y tomo mu mano con dulzura mientras bajábamos, casi no quedaban marcas y tini había sanado completamente, aunque aún así me encargaba de cuidarla.
-¡Mamá, ven aquí!
Tini me codeo en el estómago y largué un suspiro.
-por favor....
Vi como sonrió triunfante y luego se pegó a mi cuerpo.
-¿Que pasa, hijo?
-Nada mamá, solo que mmm, debo..debemos, contarte algo.
-Adelante.
-Bueno, ammm..no se como decirlo, yo....
-Estamos juntos.
Si, Martina noto que tardaría horas en decirlo por mi tartamudez
-Mi amor, quería que lo dijeras tu, pero temía que te diese un infarto, siento tu corazón desde donde estoy.
Vi como los ojos de mi madre se iluminaban y se apresuró a abrazarnos.
-Felicidades hijo ¿Desde cuándo?
-Desde...mmm unos meses.
-¡¿Meses?!
Si, se había puesto histérica.
-Si mamá, es que quería eso esperar hasta hoy que llega mi hermana y contacté a papá que vendrá aquí tambien.
-Si y... yo espero que la próxima semana libre poder invitar a mi padres a mi departamento.
Vi como tini se acercaba a mi oído y susurró despacito.
-Tu debes asistir, hombre guapo.
Martina
Me había puesto nerviosa, dentro de unos minutos la hermana menor de sebastian llegaría y tambien conocería a su padre.
-amor, me estoy arrepintiendo y si no les agrado?
-Muñeca, tu les agradas a todos.
Sebas tomó mi mano en el momento exacto en que la puerta se abría.
-¡Hermanito!
Vi como una chica casi rubia se le tiraba encima abrazandolo fuertemente.
-¡Caro, te extrañe!
Al momento en que se separó y me vio me escaneo de arriba abajo.
-Tu debes ser Martina.
Asentí mirándola con cautela, su expresión era confusa.
Pero entonces me rodeo con sus brazos casi aficiandome debió quebrarme las costillas sanas.
-¡Caro, cuidado! Tuvo un accidente reciente.
Agradecí mentalmente a Adela.
-¡Ay dios santo!-me soltó asustada-¿Que le pasó a mi cuñada?
Me puse roja ante su apodo y vi como Sebastián sonreía.
-Ya ves mi amor, le agradaste y mucho.
Sonreí satisfecha al ver que nos llevábamos muy bien, hablamos durante horas como si nada importara.
Ella consentía a bella y a Isa, decía que ahora tenía dos sobrinas incluyendo a bella.
-Quiero ser tía otra vez ¿Tu me darás otro sobrino?
Me atragante con el agua y Sebastián tuvo que correr a ayudarme.
-cálmate, levanta los brazos y respira.
Cuando por fin pude calmarme miré a su hermana.
-¿Que?
-Que quiero sobrinos.
Mire a sebastian que no parecía muy afectado, al contrario parecía gustarle la idea.
-Traidor, ayúdame con la loca de tu hermana.
-Oye mi hermanita no es loca-comenzo a acercarse hasta que quedo su boca en mi oído-Además podemos ir practicando.
Modo tómate:activado.
Si vi la mirada de adela y Caro y sentí que moría.
-Que te habrá dicho cuñadita como para que estés así? Me tendré que llevar a mamá y isa a algún lado y dejarlos solos, la tensión se siente.
Vi como sebas asintió sonriente

Dulce Amor_By:Bianca IbañesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora