Leave The Door Open

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Tomo asiento en el sofá frente a la chimenea y tomo mi celular. Busco en mis contactos su nombre y lo encuentro, sin pensarlo dos veces le doy al botón de llamar. Un par de tonos después, ella contesta.

-Hola-escucho su hermosa voz.

-Hola linda-sonrio-¿Qué estás haciendo?.

-Nada, estoy esperando por mi comida.

-Uh ¿dónde estás?-pregunté.

-En mi departamento pero luego tengo planes con mis amigas.

-Oh, ¿Tienes planes?-dije con algo de decepción-. No digas eso por favor.

-¿Por qué? ¿Qué estás haciendo?-preguntó ella esta vez.

-Estoy bebiendo vino, en mi bata-escuché su leve risa-. Y la verdad es que me veo muy bien.

-No tengo dudas sobre eso, Shawn-escuchar mi nombre salir de sus labios era mi segundo sonido favorito de ella.

-En estos momentos mi casa está limpia y la piscina está exquisita.

-¿Qué insinúa Shawn?-escuché del otro lado.

-Nada, solo te cuento algunas cosas-traté de hacerme el desentendido-. Hoy me afeite después de que me lo pidieras.

-Te lo agradezco, te ves mejor sin la barba.

Mordí mi labio mientras nos manteníamos en silencio. De verdad quería que ella estuviera conmigo en este momento y me hiciera algo de compañía.

-Tienes que venir aquí.

-Shawn...

-Por favor-interrumpí-. Dejaré la puerta abierta.

-Tengo planes Shawn.

-Entonces cancelalos-pedí-. Sé que quieres venir aquí y pasar tiempo conmigo así como yo quiero pasarlo contigo.

Nuestra relación aún no tenía algún título en específico. Nos habíamos conocido por unos amigos en común, hablamos un par de veces y nos hemos acostado muchas veces, más de las que podría acordarme. Pero no solo nos basamos en el sexo, podíamos salir a desayunar y hablar como simples amigos. Podíamos pasar días sin hablar y eso estaba bien, o eso creía yo. Las últimas semanas era algo importante saber sobre su día y las cosas que había hecho, algunas veces trataba de persuadirla diciendo que quería que viniera a mi casa y hagamos nuestras cosas, pero era solo una excusa para verla.

-Nos vimos hace dos días Shawn-sabia que sonreía-. Necesito ver a mis amigas.

Cada vez estoy más desesperado por verla. Se está volviendo una adicción muy grande y no sé hasta cuándo podré controlarme.

-Por favor bebé-si, sonaba como un gran idiota desesperado-. Hay mucho amor que podríamos estar haciendo.

-Eso no suena tan mal-dijo con un tono seductor.

-Estoy hablando de algunos besos y abrazos-dije serio. Algo que nunca había hecho era invitarla a hacer esa clase de cosas.

-¿Qué?-dijo sorprendida-.¿Quién eres y donde está el Shawn coqueto?.

-Está aquí mismo, pero puedo demostrar que no soy solo un chico que piensa con el pene-ella rió un poco-. Quiero mostrarte al Shawn romántico, el que puede llevarte de paseo, con el que puedes contar tus logros y tus desgracias. Al que puedes contarle tus sueños y anhelos, tus temores y muchas cosas más. Puedes compartir una noche de películas conmigo, viajes, bailes al rededor de la sala e incluso noches de pasión. Puedes hacer eso y mucho más con este Shawn.

Suspiré ante mi confesión, la línea se mantuvo en silencio un momento y decidí volver a hablar.

-Cada palabra que dije vino desde mi corazón-suspiré aún sin tener su respuesta-. Cariño, no me tengas esperando.

-Iré en unos minutos, más vale que esa piscina tenga el agua caliente-dijo y sonreí.

-Dejaré la puerta abierta bebé.

***
Estoy súper obsesionada con esta canción y se me hizo imposible no hacer un capítulo sobre esta canción.

Amo a Bruno y todas sus canciones, literalmente podés hacer miles de historias gracias a sus canciones.

Besos❤

Imaginas Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora