Confesión[2]

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Meto un par de billetes en la lata de propinas. Tomo mi café y salgo de esa cafetería con mi capuchino en mano.

Era un día frío en Nueva York. Salir de mi trabajo temprano y encontrarme con el olor a lluvia y esa brisa fresca era muy agradable.

Caminé por las grandes cuadradas de esta hermosa ciudad hasta llegar a mi casa. Me encontré con el portero y saludé amablemente.

-Hola Esteban.

-Hola ___-sonrió.

-¿Algo nuevo para mi?.

-Oh si-se dirigió al mostrador-. Tengo estas cartas para usted y unas cajas de galletas enviadas por su hermana.

-Mis favoritas. Muchas gracias Esteban.

Me despedí de él y fui hasta el ascensor. Apreté el botón como pude ya que tenía ambas manos ocupadas.

Al llegar a mi puerta tuve que dejar las cosas en el suelo para encontrar las llaves. Una vez dentro tomé todo y lo dejé sobre la mesa. Más tarde leeré las cartas.

Lo más lindo de llegar a casa es quitarme el sostén. Me sentí liberada en ese momento. Ocupé una remera grande de algún chico que la dejó aquí olvidada y un pantalón pijama rojo con puntos blancos. Sin olvidar que con alguna mancha de comida.

Me senté sobre el sofá y abrí aquella caja que contenía las deliciosas galletas de mi hermana. Prendí la televisión y dejé el canal de chismes.
Tal vez diga que está mal entrometerse en la vida de los demás, pero es entretenido a veces.

-¿Tendremos más información sobre la separación de Miley Cyrus y Liam Hemsworth?-dijo el conductor.

-No lo sé John. Pero lo que sí se es lo que se viene para el futuro del cantante Shawn Mendes.

Dejé de masticar mi galleta. Hace mucho no escuchaba ese nombre. Luego de confesarle mis sentimientos hace tres años no volví a verlo por decisión propia. No quería lastimarte a mí misma al verlo y saber que fui la tonta que se ilusionó.

En cuanto a Camila recibí su apoyo por un par de meses. Hasta que se fue alejando de a poco dejándome sola. Lo único que supe de ella es que también se volvió una famosa cantante. Siempre quise escribirle para felicitarla ya que ese fue su sueño desde siempre. Pero mi orgullo era más grande y no iba a permitirme caer por una amistad que no funcionó.

-Hace poco se confirmó que el cantante canadiense y...

Apagué el televisor ya que no quería escuchar nada sobre él. Se que han pasado tres años y que he conseguido un gran empleo, el departamento de mis sueños y buenas amistades. Pero con solo escuchar el nombre de Shawn me lleva a viejos recuerdos y tal vez a viejos sentimientos. A pesar de que muchas veces dije que lo había superado.

Tomé mi celular y marqué el número de mi hermana. Necesitaba hablar con alguien.

-Hola muñeca-dijo al contestar.

-Muñeca tú que te usan para jugar.

-___ dejaron de usarme hace cinco años.

-Habia olvidado que alguien ya te amaba-reí.

-Tonta. ¿Por qué llamas?.

-¿Qué no puedo saber cómo se encuentra mi hermana favorita?.

-Tu única hermana y si llamas es por algo.

-Solamente quería agradecerte por las galletas. Están deliciosas.

Me puse de pie y tomé las cartas de la mesa. Coloqué la llamada en altavoz para estar más cómoda.

Imaginas Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora