Imaginas Shawn Mendes

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Tomé mi celular decidida a llamarlo. Lo estuve extraño estos días, no solo de forma sentimental, de forma física también. Fueron días ocupados para mí, pero ya tenia tiempo libre para él.

Al tercer tono contestó mi llamada.

-Hola cariño.

-Hola bebé-sonreí-. Tengo que hacerte una pregunta.

-Te escucho.

-¿Qué harás esta noche?.

-¿Ya tienes el día libre?-se lo escuchaba feliz.

-En realidad, toda la semana.

-Oh eso es genial. Podrías venir a mi departamento, te prepararé la cena y miraremos algunas películas ¿Te parece?.

-Claro-acepté-. Te veré esta noche.

Colgué luego de su despedida y me desplomé sobre mi sofá. De solo imaginarme a Shawn esta noche y de lo que podría hacer conmigo me ponía aún más de humor.

[...]

Toqué su puerta y luego de unos segundos la hermosa imagen de mi novio apareció frente a mí.

-Hola amor-saludó y me rodeó con sus brazos-. Te extrañé tanto todos estos días.

-Yo también Shawnie-besé sus labios-. Lamento no usar la llave que me diste, la olvidé en casa.

-No importa. Ven, estoy preparado tu favorito y ya casi está listo.

Me guió hasta su cocina y me senté en la isla admirando sus movimientos. Me mordí mi labio inferior al ver sus brazos flexionados y sus venas marcadas.

Se volteó hacia mí y se acomodó entre mis piernas mientras me regalaba una sonrisa.

-¿Cómo han sido estas dos semanas?-preguntó.

-Agotadoras. Solo me mantuve tomando café-vi que iba a reclamar y lo interrumpí-, también estuve comiendo sano, no tienes que preocuparte.

Sonrió y se acercó a dejar solo un pequeño beso. Eso no era suficiente para mí, lo tomé de la camisa y lo acerqué a mi. Besé sus labios lenta y profundamente. Sus manos subieron desde mis muslos hasta mi cintura, me atrajo hacia él un poco más. Estaba a punto de meter mis manos dentro de su camisa pero se alejó.

-La comida ya casi está lista-besó mi mejilla.

Bufé y bajé de la isla. Esta noche iba a ser larga.

[...]

Estábamos recostados en la cama de Shawn disfrutando de nuestra segunda película. Apenas estaba empezando y yo apenas prestaba atención. Traté de persuadirlo durante un tiempo, pero parecía no darse cuenta que lo necesitaba.

Me encontraba recostada sobre su hombro y trazaba líneas sobre su abdomen. Su piel se puso de gallina y sonreí de lado.

-Extrañaba tus caricias amor, pero harás que me duerma-dijo.

-No Mendes, no te duermas.

-¿Por qué?.

-¿Puedes quedarte despierto toda la noche?-me subí sobre su regazo. Ya me cansé de tantas indirectas-. Fóllame hasta el amanecer, Shawn.