Imaginas Shawn Mendes

Inseguridades

-No sabes cuánto te extrañé Shawn-volví a abrazar a mi novio.

-Yo mucho más amor-besó mi cabeza.

-¿Tienes hambre? Podemos pedir una pizza.

-¿Mientras vemos una película en el sofá y estamos abrazados y nos damos todo el cariño que no nos dimos en un mes?-reí ante su entusiasmo.

-Trato hecho.

-Mientras ordenas la pizza yo voy desempacar y darme una ducha-besó mis labios antes de ir hasta nuestra habitación.

Ordené una caja de pizza con un par de cervezas y elegí alguna película. Sabia que no le prestariamos tanta atención por estar hablando sobre el viaje de Shawn. También traje algunas mantas ya que el invierno se notaba cada vez más en la ciudad.

El timbre resonó en casa y caminé hasta la puerta. Recibí la caja de pizza y nuestras cervezas para luego pagarle al repartidor.

-Nada mejor que darse una ducha en tu propio hogar-Shawn apareció con su pijama.

-Oye mis besos son mejores-dije.

-Claro que si-unió sus labios con los míos por unos segundos.

-¿Quierés ver la película o contarme sobre tu viaje?

-Reproducela, en cualquier momento te contaré sin darme cuenta.

Puse play a la película y tomé un trozo de pizza. Extendí mis pies y estos quedaron sobre los muslos de mi novio.

Tan solo pasaron veinte minutos de película cuando Shawn empezó a hablar de su viaje ya que una escena le recordó algo. No paré de reír ante algunas anécdotas que me contaba.

-Entonces entramos a ese bar gay porque tenía karaoke y dijimos "genial algo de entretenimiento" y oh dios que arrepentido estaba. Solo te diré que Jack tiene mucha suerte con los hombres y que Connor borracho, cantando Single Ladies es lo mejor que verás en tú vida.

Solté una carcajada al imaginarme esa situación.

-Pero enserio cariño-tomo un trago de su cerveza y siguió hablando-. Te sorprenderás al ver cómo baila Connor, me atrevo a decir que hace mejor la coreo que la misma Beyoncé.

-Hubiese querido estar ahí-hice un puchero.

-Yo también lo quería, me hacías mucha falta.

Se inclinó a besar mis labios. Lo que creí que sería un beso inocente terminó siendo uno salvaje. Los labios de Shawn se movían rápido y su lengua jugaba con la mía. Sabia donde quería llegar y lo entendía, un mes era mucho tiempo para nosotros. Sentí sus manos acariciar mis pies y su intención era subir por mis piernas pero no se lo permití al separarme.

-¿Qué sucede? ¿Algo está mal?-noté el tono de preocupación en su voz.

-Tal vez si.

-Dime que pasa bonita.

Suspiré y jugué con mis dedos. Era vergonzoso decirle esto a él.

-Pues verás. Tú sabes que soy alguien que trata de estar arreglada siempre-él asintió mientras su ceño se fruncía al no entender-. Desde que te fuiste me he descuidado un poco y tú sabes.

-No amor, no sé. Por favor explícame.

-Uhm... no me he depilado desde hace un mes y mis piernas y axilas no son lo más lindo que verás. Lo siento tanto, mis piernas parecen de hombres y la verdad es vergonzoso-escondí mi rostro entre mis manos.

Nunca tuve problemas con las chicas que no se depilaban. Tengo amigas que no se depilan desde hace años y no me resultaba desagradable. Pero al ser yo la que los llevaba me sentía mal por no poder sentirme linda hacia mi chico.