Kristen
Desperté al sentir los rayos de sol en mi rostro, por algún instinto de inercia voltee hacía lado izquierdo solo para observar un vacío en la cama.
No es algo nuevo, siempre que me quedaba dormida al día siguiente despertaba sola en la enorme habitación pero por alguna razón ahora había un sentimiento diferente en mi pecho, esto indicaba el fin de una de las aventuras más espectaculares de mi vida.
Me levanté de la cama tomando mi ropa entre mis manos mientras me dirigía al baño, una vez adentro decidí tomarme una ducha para despabilar mi cuerpo y ordenar mis pensamientos, cuando estaba apunto de salir de la regadera se oyó cuando alguien abrió la puerta seguida de pasos.
¿Acaso está aquí?
Salí de la ducha mientras me ponía una bata de baño, silenciosamente abrí la puerta para observar el cuarto vacío tal y como lo había dejado hace algunos minutos, con pasos dudosos camine hacia la sala donde deslumbre una figura femenina.
—¿Quién eres? — pregunté haciendo que la mujer saltará en su lugar y casi tirará lo que llevaba en sus manos.
Giro sobre sus tacones dejándome ver un rostro que ya conocía y una vestimenta que reconocí, pues era el típico uniforme de la recepcionista del hotel.
—¡Dios!, Me asustaste — se llevó una mano al pecho mientras estabilizaba su respiración.
—¿Mara? — pregunté con incredulidad.
—Hola Kristen — sonrió apenada — pensé que la habitación estaba sola y aproveché para venir por la computadora del señor Jackson — dirigí mi mirada hacia sus brazos — Me alegra saber que siempre tuve razón — dijo más para si misma que para mí.
—Te conozco y no me refiero a cuando derramaste una bebida sobre mí te conozco desde antes — sonrió estando de acuerdo con lo que acaba de decir — eres la chica que siempre me recibe en la recepción antes de entrar a las fiestas.
—Pensé que jamás me reconocerías.
—¿Tú sabías todo?, ¿sabías quién era? — pregunté tratando de unir todos los recuerdos pasados.
—Para ser exactos no, es una historia muy larga y quiero contarte pero antes necesito entregar la computadora al señor Jackson, después de eso estaré libre, podríamos desayunar juntas — comenta su idea algo tímida como si temiera que la fuera a rechazar.
Pero jamás la haría, por alguna razón quería respuestas y solo ella podría darmelas.
—Yo te llevo a dónde tengas que ir y después de eso nos vamos a desayunar juntas — sentencie prohibiendome perder esta oportunidad.
—Me parece buena idea, pero antes te traeré algo de ropa no creo que sea muy cómodo andar con un vestido de gala — asentí, agradeciendo la amabilidad de Mara para después verla desaparecer por la puerta.
Varios minutos después regreso con un pants gris junto con un top blanco el cual me quedo un poco ceñido pero pasa desapercibido por la chaqueta que también me trajo, después de cambiarme y arreglar mi cabello salgo de la recámara para encontrarme con Mara quien tecleaba algo en su celular pero una vez noto mi presencia dejo de hacerlo.
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𝐒𝐢𝐧 𝐂𝐨𝐦𝐩𝐫𝐨𝐦𝐢𝐬𝐨
Romance-Solo hay dos cosas que debes entender: •La primera, no nos conoceremos, tú no sabrás quien soy y yo no sabré quien eres. •La segunda, todo será sin compromiso... -Añadiré una tercera: no existirá el amor