NARRA VANESSA:
- Dereck...
Gruñe como respuesta revolviéndose en la cama.
- Apaga la luz.
- No hay nada encendido.
- Pues baja la persiana.
- Bájala tú.
De alguna manera esto me resulta familiar, pero no recuerdo de qué. Se estira ocupando casi toda la cama pudiendo haberme tirado.
- No tenías más hueco, ¿verdad? - le digo dándole un manotazo.
Me mira con esos ojazos azules divertidos y entonces hace lo que más me temía. Apoya sus manos en mi costado en termino en el suelo de la habitación.
- ¡Eh!
- Buenos días. - me dice con una sonrisa y dándome un pico en los labios. Me levanto y él hace lo mismo. - Perfecto. Desayunamos y nos vamos.
- Vale...
Por un momento comienzo a recordar todo lo que ocurrió ayer y me entran ganas de vomitar. Me voy corriendo al baño y me arrodillo ante el retrete. Noto como Dereck me sujeta el pelo. Al terminar, me siento en el suelo. Mi novio baja la tapa y hace que mi cena de anoche se vayan por las cañerías.
- Vamos, pequeña. - me dice ayudándome a levantarme. - ¿Quieres una manzanilla?
- Sí... no entiendo cómo con solo recordarlo me han entrado náuseas.
- Es normal. Ese capullo me las va a pagar. Pero antes desayunaremos y nos iremos de aquí.
- Mis padres... mis padres no se pueden...
- No te preocupes. No les diré nada.
———————————————————————
Terminamos de hacer las maletas y Dereck se encarga de avisar a mi tío. Bajo las escaleras sigilosamente, con la esperanza de que Jace no me escuche.
- Vanessa, querida.
La voz de Henry me paraliza por unos segundos, pero al saber que es él y no su hijo mi cuerpo se relaja automáticamente.
- Buenos días, Henry. Siento que nos vayamos así de rep...
- Sé lo que ha ocurrido.
Mi cara cambia al color del marfil.
- ¿Qué?
- Me he enterado, y en nombre de mi hijo, lo siento muchísimo.
Carraspeo ante la disculpa y me abrazo a mí misma sin saber qué más hacer con mis manos.
- Gracias. - le digo con una media sonrisa forzada.
Me responde de la misma manera acompañada de un asentimiento de cabeza, para luego marcharse. Siento algo raro en el estómago, no sé si el desayuno me ha sentado mal o es que no me hace ni pizca de gracia que el mejor amigo de mi tío sep que su hijo me ha violado anoche.
Siento como las ganas de vomitar de nuevo vuelven a mí. Me voy corriendo escaleras arriba esquivando al personal de la casa, incluso a Jade, que se asomó desde su habitación para ver qué era el escándalo que estaba montando.
- ¡Vanessa!
Entro en la habitación como un huracán y corro hacia el cuarto de baño. Levanto la tapa como puedo y echo el poco desayuno que había ingerido. Escucho pasos detrás de la puerta.
- ¿Estás bien? - me pregunta Jade.
- No...
- ¿Puedo entrar?
ESTÁS LEYENDO
VIDA ©
Romance3º LIBRO. SAGA "BLACK SOULS" Las cosas han cambiado en pocos años. Una pareja de enamorados intenta rectificar sus errores del pasado, pero solo hay una persona que no les perdonará jamás. Vanessa Lia Grey ha perdido a su alma gemela, ¿qué creéis qu...