—¡KAORU!
Por favor.
Por favor...
Corro pista abajo buscando entre las rocas, buscándote. Sabía que no había sido buena idea dejarte solo. ¡Es que soy idiota!
El corazón late desbocado. Tengo tanto miedo... No sé en qué momento he empezado a llorar.
—¡KAORU!
Tu nombre me desgarra la garganta. Me llevo las manos a la cabeza, respirando fuerte, cogiendo todo el aire del mundo y, aun así, es insuficiente.
No estás.
No estás por ningún lado.
Gruño y chillo y pataleo con rabia el suelo.
—¡KAORU!
La voz se me quiebra y me ahogo con mis propias lágrimas.
Tenía que haberme quedado contigo.
Tenía que haber luchado.
Tenía que haberte cuidado.
Tenía, tenía, tenía.
—¡JODER!
Pero no he hecho nada.
Se me encoge el pecho con la sola idea de que te he perdido. De que no volveré a oírte reír. De que no volveré a mirarte a los ojos. De que tú, que eres mi vida, te esfumas.
Lloro y lloro, cada vez más fuerte. No hay aire en el mundo para apagarme. No encuentro la calma y doy vueltas sobre mis propios pasos, en círculos. El teléfono en la mano guarda las quince llamadas que te he hecho en los últimos minutos. Y tú que sigues sin responder me dejas paralizado sobre un último latido.
Giro y giro pero no apareces y siento que la noche se vuelve más oscura, más pesada, cae una lluvia invisible, ácido que me deshace.
No estoy listo para esto.
No estoy preparado para perderte.
¡¿Cómo podría estarlo?!
El mundo da vueltas, siento que caigo rodando por la pista y la angustia crece. Aumenta la presión en el pecho, los pulmones se cierran bajo el peso de las costillas cediendo. No puedo respirar, no me sale la voz y tengo miedo de gritar y romperme más de lo que ya estoy.
Rompe, rasga, quema.
Como piel ardiendo por el raso suelo.
Y estalla desde el estómago.
—¡KAORU!
El silencio de la noche me responde.
Y yo me convierto en un niño asustado y perdido. Camino entre sombras, recortando las rocas, dejando un rastro de lágrimas para poder regresar. Pero, ¿regresar a dónde? Mis pasos siguen adelante. He dejado el skate atrás, me he olvidado de él y he seguido corriendo. Y poco me importa perderlo o que alguien llegue y me lo robe.
Ya no me importa nada...
Solo quiero encontrarte, joder.
Kaoru...
¿Por qué estoy recordando esto justo ahora?
¿Será que mi inconsciente intenta decirme algo?
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sodaro kaoru? ▶ matchablossom
Hayran Kurgu«pero, ¿sabes qué? nosotros no estamos solos ¿verdad, kaoru?»