• Capitulo 28 • [2/2]

5K 429 433
                                    

Contenido no apto para todos,
+18.

•••

Camino a paso apresurado tratando de encontrar la jodida moto de uno de mis chicos Valter. Agarro la mano de Conejo, guiándolo, mientras tiene una mueca de confundido.

Encuentro un camino que me hace llegar hasta la colina en donde se encuentra la moto. Veo los diversos colores que esta posee y las rayas desde lejos, así qué troto junto con Conejo hacia está.

- ¿Qué pasa? - pregunta confundido.

Agarro el casco y se lo entrego, recojo el casco qué anteriormente había lanzado al suelo de un arrebato y me lo coloco.

- Llevame a mi casa. - digo con una notoria molestia.

El me ve más confundido aún, sin ponerse su casco. Yo trato de montarme en la moto, por mi fuerza de voluntad, pero aquel móvil está muy alto para mi estatura de ardilla, así que como puedo escalo el cuerpo de Conejo, quien me ve con una sonrisa divertida, y logró montarme en la moto.

- Hey, ¿qué sucede? - vuelve a preguntar. Termino de colocarme mi casco y yo le arrebato el de el, sin hablarle. Se lo pongo como puedo y le indico que se monte en la puta moto.

- Montate.

- ¿Estas molesta?

- ¡Que te montes!

- ¡Vale! - alza sus manos en zona de paz.

Se monta y yo lo agarro de su vientre. El motor de la moto ruge a todo dar y maneja a mucha velocidad, pero no tanta como lo había hecho anteriormente.

Ya está anocheciendo, están las ultimas luces del atardecer y se ve el cielo de un tinte naranja, amarillo, rojo y morado. Es totalmente precioso.

Pasamos las calles a bastante velocidad y aprieto mis piernas. Las calles del pueblo están bastante solitarias solo quedan algunas tiendas abiertas y uno que otro club con chicos universitarios.

Llegamos a mi casa y Conejo aun no a parado por completo la moto, cuando yo ya me tire halándolo por el brazo para que me siguiera, aun con los cascos puestos. El hace una maniobra para tratar de sacar la llave de la moto y bajarse de ella para seguirme el paso, de reojo veo una camioneta negra estacionada también en nuestro porche, debe ser algunos de los culos de Vega o Dolfi.

Abro la puerta de mi casa y entro en ella, subo corriendo las escaleras, tratando de ver y no tropezarme ya que aun tengo el casco puesto.

Diviso mi cuarto y me encamino a paso rápido hacia el. Entro, paso a Conejo y cierro la puerta.

El cuarto está en penumbras. Corro hacia la mesita de luz y prendo una lampara morada de color neón, qué alumbra solo un poco la habitación.

Conejo me ve confundido ya sin el casco puesto, este lo coloca debajo de su brazo, despeinándose más su cabello y ladeando la cabeza como un cachorrito, siempre lo hace y me encanta.

Noto que me he quedado varios minutos solo viéndole, así que sin más quito mi casco con fiereza y estoy súper decidida en lo qué haré.

Los Canavarlar [Klanlar #1] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora