Prometidos

Espionaje y malentendidos

El tiempo había pasado bastante deprisa y esto le estaba dando entrada al segundo trimestre del embarazo del rubio, quien había estado bastante feliz y tranquilo en los últimos días.

Las cosas con Tony habían mejorado notablemente y el alfa había cumplido su palabra de cambiar y cuidar de él y su cachorro, además de que Peter también pasaba todo el tiempo que podía junto a ellos, emocionado por la idea de tener un hermanito y también de ver el cambio que había tenido su padre.

Todo había sido paz y calma durante ese tiempo, cosa que mantenía a la familia del rubio tranquila y mas al soldado, quien había vuelto a su estación junto con Rhodes.

Ese día, Steve se dirigía hacia la cocina con una pequeña sonrisa mientras mantenía una de sus manos acariciando la pequeña curvatura que se alzaba en su estómago. Su muy trabajado estomago se había marchado de vacaciones, pero él estaba feliz con ese pequeño cachorro que crecía en su interior y la felicidad de ese día era aún mayor ya que no había amanecido con náuseas y había podido dormir bien por primera vez en bastante tiempo, ya que Tony había estado cerca y le había ayudado a dormir, o mas bien, el alfa había estado en modo protector/idiota y eso había hecho que, al menos por ese día, sus nauseas no estuvieran;

-tengo ganas de comer helado de nuez- dijo mientras caminaba escaleras abajo hacia la cocina - ¿te gustaría eso pequeño? - le preguntó a su pancita cuando escuchó a Tony cerca - ¿Tony? - preguntó al aire y comenzó a caminar hacia donde oía la voz del alfa, llegando frente a las puertas de cristal del taller.

El rubio se acercó y cuando se disponía a abrir, vio que una chica de cabello café y grandes senos que mostraba por el escote de su blusa estaba proyectada en una pantalla holográfica frente al moreno.

El omega la reconoció de inmediato haciendo mala cara al ver a Janeth coqueteando vulgarmente con su alfa;

- ¿Tony? - volvió a preguntar y se acercó a la puerta, pero se detuvo al oír al otro hablar;

-ya te dije Janneth, que no podemos vernos- dijo Tony atornillando una pieza que tenia en la mano, sin poner atención a los enormes pechos que estaban en su pantalla

-pero ya han pasado meses Tony y ya me has dejado plantada en varias ocasiones, incluso Hank piensa que te hizo algo... se supone que somos amigos, Stark. - dijo la mujer haciendo un puchero -Te extraño

-sabes que e tenido demasiadas reuniones y, además, no entiendo porque me reclamas si el día que habíamos quedado en ir a cenar, me dejaste plantado

-lo sé, pero ya estoy aquí. - la mujer sonrió con picardía y se mordió un poco el labio haciendo que Steve se molestará, aunque aún era ignorada por el ingeniero - ¿Porque no vamos a cenar esta noche? Yo invito

-de verdad no puedo, le prometí a Peter que hoy cenaríamos juntos. - el hombre dio un sorbo a un vaso que tenía junto a él -También, en estos días vienen los amigos de Steve y...

- ¿dejas que la gente del omega entre en tu casa? Eso es nuevo- la mujer se rio haciendo que Tony la viera malhumorado

- ¿Por qué no lo haría? Vienen a verlo, por... su estado- el moreno calló de pronto, había olvidado que no le había dicho nada a la mujer sobre su futuro hijo

- ¿su estado?... ¡ay no!... ¡¿el omega ese esta embarazado?! – el moreno mantuvo su mirada seria - ¿Cuántos meses?

-cuatro...

-pensé que te desharías de él rápido y vienes y lo embarazas... no la esperaba- Tony se acercó un poco más y Steve también, ya que quería oír mejor

-fue algo que pasó y pues... estoy muy feliz con eso. Además, - tomó un poco de aire -te pido que no hables así de mi esposo ¿sí? Eres mi amiga, Janeth y no me gusta como hablas de mi esposo