Prometidos

Conociendo... ¿a mi omega?

Había pasado un tiempo desde la visita de las personas de Nueva York y de la noticia que le habían dado al rubio omega.

Ese día, Steve se encontraba en el pueblo haciendo una entrega junto a Sam quien tenía libre, cuando vieron un auto estacionarse junto a su camioneta;

-señor Rogers- exclamó un hombre al bajar la ventana del auto, haciendo que el chico se acercara mientras se limpiaba el sudor con un pañuelo

- ¿sí? - preguntó este ante la atenta mirada que daba su amigo

-mucho gusto, soy Harold Hogan y vengo de parte de la señorita Virginia Potts. - dijo el hombre extendiéndose para darle la mano al chico quien lo vio extrañado -Por su rostro supongo que no sabe que hago aquí ¿cierto? - el chico negó con la cabeza - ¿Ginny no le avisó que venía por usted?

- ¡¿Qué?!- soltó el otro asustado soltando feromonas a su alrededor cuando el moreno se acercó

- ¿sucede algo Steve? - dijo Sam viendo al otro bajarse del auto - ¿Quién es usted?

-soy Harold Hogan y vengo de parte de la señorita Virginia

-Sam Wilson- dijo el policía extendiendo su mano cuando fue tomada por el otro - ¿Qué hace aquí?

-Ginny me pidió que viniera por el señor Rogers. Tenia entendido que ella le había enviado un mensaje diciéndole que el señor Stark lo citó a Nueva York para hablar sobre algunas cosas con respecto al compromiso

- ¿Steve?

-yo... no tenía idea, no he hablado con la señorita Potts desde que vinieron aquí- contestó el chico

-que extraño, ella me dijo que le había enviado un correo electrónico con las especificaciones de hoy- Sam soltó una pequeña risa mientras que negó con la cabeza viendo como su amigo se sonrojaba y el otro hombre lo miraba extrañado -¿pasa algo?

-mi amigo aquí, - le rodeo el hombro con un brazo al omega -no se lleva con los aparatos tecnológicos. – se rio – Es posible que si le hayan enviado ese correo pero nunca lo vería, Steve no sabe usar una computadora

- ¡sí sé! - se defendió el otro soltándose del agarre de su amigo -Es solo, que no lo reviso tanto como debería- Harold rio

-ni siquiera tienes celular

-yo... no me llevo bien con esos aparatos- ambos betas comenzaron a reírse cuando el rubio se sonrojo de nuevo y miró su reloj

-creo que es hora de almorzar.- dijo alejando el tema anterior -¿Nos acompaña señor Hogan?- el hombre asintió

-claro, ustedes me guían y pueden llamarme Happy- dijo subiéndose al auto y esperando a los otros para seguirlos.

Por otro lado, Pepper iba entrando en la oficia de Howard mientras hablaba por teléfono y llevaba varias carpetas;

-si está bien... entiendo... - dijo colocando unas carpetas frente al alfa mayor -Si... fue mi culpa por no verificar la respuesta... aja... bien... nos vemos mañana. Gracias Happy

- ¿está todo bien? - preguntó el de cabello canoso cuando la beta se pellizco el puente de la nariz con una sonrisita divertida

-si, es solo que... hasta mañana traerán al señor Rogers

-¿y eso? ¿está todo bien? - la mujer rio

-fue una tontería- y se rio contagiando al otro cuando la puerta se abrió

- ¿todos bien por aquí? - oyeron la voz de Tony quien entraba en el lugar con una enorme sonrisa

-Anthony, ya era hora que llegaras- exclamó Howard con algo de molestia