malas intenciones

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14 de mayo de 2021 – Córdoba, Argentina...

POV Clarke

Departamento de Clarke, 21:30hs...

Me he amigado conmigo, con lo que doy y puedo recibir cariño. Lo he logrado y me he probado a mí misma que lo puedo por ti, por Abby y por mí. Si me preguntas quien soy, hoy te respondo que soy mi nueva yo, Lexa Woods enamorada perdidamente y profundamente de Clarke Griffin y si me lo preguntas mañana te voy a responder lo mismo y así sucesivamente. No quiero que te vayas nunca más, como yo no quiero irme nunca de tu lado. Te amo como nunca he pensado amar, y quiero darte todo lo que no pude hasta hoy. Tú eres mí para siempre. No quiero vivir de recuerdos, no quiero que olvides nunca lo que te amo, quiero vivir contigo cada día y voy a arriesgarme a todo en esta vida sí sé que lo puedo todo de tu mano Clarke Griffin, contigo es todo o nada. No tienes idea de lo que te quiero, ¿quieres volver a intentarlo conmigo?. Todos mis sentidos se habían agudizado, estaba con el corazón latiendo desbocado y a mil por hora. Lo primero que hice fue girarme lentamente y fijar mis ojos en los suyos, fue un contacto instantáneo. Estirando mi mano, toque su mejilla, todavía sin poder creer que estaba aquí frente a mí y no en Buenos Aires como yo pensaba. "Lexa nunca dejaba de impresionarme". Nos sonreíamos con un deje de vergüenza y ambas permanecíamos en silencio, durante varios latidos de nuestros corazones, que sincronizaban a la perfección.

Toda una maldita vida estuve esperando este momento Woods!!!!. Fue lo primero que se escapó de mis labios, la había esperado tanto tiempo que lo haría una y otra vez. Ella no dejaba de sonreír y de un segundo a otro ya la tenía frente a mi sentada sobre la mesa ratonera y sosteniendo mis manos junto a las suyas. "Ninguna podía quitar los ojos de la otra".

Es bueno saber que estabas esperando este momento tanto como lo hice yo cariño. Ha pasado un tiempo de la última vez que nos vimos personalmente, pero fue el tiempo exacto para estar hoy una vez más junto a ti. Nunca dudes de cuanto te amo porque eso jamás estuvo en discusión Clarke, te amo con la misma intensidad que la primera vez que nuestros ojos se cruzaron en aquel salón de clases. Sé que siempre hemos estamos en la misma dirección y sintonía. Me he visto dejando cosas de lado por pura supervivencia, pero algo que nunca he dejado de lado es el amor que siento por ti y por tu hija. Yo lo quiero todo con ustedes y esta vez es un para siempre amor y si tú quieres y Abby también podemos comenzar a hacerlo a nuestra manera, ¿qué dices?. Un nudo en mi garganta estaba presente, no quería llorar y si lo hacía claramente era por la felicidad que desbordaba en este instante. Vi que la mano de ella tomó un mechón de pelo que estaba sobre mi cara.

Yo también te amo Lexa, nunca he dejado de hacerlo y nunca podría tampoco. Y SISISISISI!!!. Quiero todo contigo, quiero ser tu cómplice en cualquier locura y acompañarte a cada segundo. Siempre te he jurado amor eterno y una vez más lo hago, siempre te he amado, me encanta amarte y me encanta que estés aquí conmigo Lexa, te elijo una y otra y otra vez y no tienes idea de cuánto amo tus cartas escritas a mano, es que no puedo contigo de todo lo que te amo y de toda la felicidad que me invade. Me acerque a ella y no pude evitar abrazarla con todas mis fuerzas, "me proporcionaba tanta seguridad", ella acariciaba mi espalda y me regalaba besos sonoros en mi hombro. Sabía que las dos queríamos llorar pero era más fuerte la sensación de pertenencia de la una con la otra que cualquier otro sentimiento, "quería esconderme en sus brazos como si no hubiera un mañana".

Te voy a entregar mi amor constante y si es posible te regalo el sol y el mar y todo lo que me pidas cariño. Todo lo que pienso es hoy y todo lo que imagino es un futuro contigo y con Abby. Te amo con toda la fuerza que atraviesa mi conciencia y mi razón. Ella hablaba pegada a mi oído y su sola voz me estremecía y mi cuerpo reaccionaba inmediatamente. Nos levantamos aun sin separarnos del abrazo, era tan caluroso y se sentía tan increíble. Sus manos tocaban mis caderas e hicieron que mi estómago se aquietara ante la sensación. Y yo la sostenía desde el cuello, necesitaba mantener este contacto con todas mis fuerzas, porque temía estar soñando.

Entre Nosotras: ¿aún hay algo de amor? (Clexa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora