Always By Your Side ✧⋆ Kookmin

25. "¿Tu?"

La siguiente semana habia sido una total molestia para el castaño. Con las fotografías circulando por hay en manos equivocadas, mas y mas gente se preguntaba : "¿Están saliendo?". Incluso ya habían un par de cuentas dedicadas a ambos, convencidos de que era verdad, aun cuando JungKook habia salido a aclarar aquel malentendido. Pero la gente era tan dura que no quería ver la verdad y seguía buscando la quinta pata del gato. 

Jimin ya habia hablado mas tranquilo con JungKook y  se dieron la oportunidad de llegar a un acuerdo, el que consistía en que si alguno de los dos tenia alguna molestia o algo parecido, tenían que hablarlo para evitar alguna discusión innecesaria.  Ambos estuvieron de acuerdo con eso así que no hubo problema.  

-¡¿Dónde estas Jeon?! - Raramente lo llamaban por su apellido, pensó el chico. Pero poca importancia le dio y siguió comiendo su sándwich, mientras respondía un par de mensajes de Instagram. 

Pero lo que menos se imagino fue ver a su mejor amiga, parada en la entrada de la casi echando humos por las orejas. Claramente estaba enojada. ¿Por que?. Por ahora no lo sabia. 

Un gato. ¿Qué hacia un gato en su departamento? 

-¿Esa es la sorpresa que me tenias? - Pregunta algo confundido, se levanto y con cuidado se acerco al animal que estaba en los brazos de la chica. 

Pero vaya sorpresa se llevo al recibir un zape en su nuca con fuerza. Sorprendido sobo su cabeza, con el ceño fruncido. 

-¿Y eso porque? 

-Por estúpido. - Dijo, dejando al gato en el suelo. -¿Como se te ocurre acercarte a ella, sabiendo que tienen las cámaras en ustedes después del comunicado de Vogue? - Lo regaño. De verdad no quería volver a golpearlo, pero la estúpida conducta del castaño la estresaba de una manera que ni ella sabia que podía lograrlo. Aun así, ignoro sus tentación. 

-Solo quise ayudarla. Nunca pensé que pasaría algo como eso. - Explico como niño pequeño siendo regañado por su madre al descubrirlo haciendo algo malo. Sabia lo recta que podía llegar a ser Lisa con el cuidado de su imagen y el de sus amigos, esa era una de las razones por las que raramente era mencionado de mala manera. 

Ella suspiro presionando su cien. 

-Supongo que explicaste lo que sucedió. - Por supuesto que lo habia hecho, pero tal parece, ella aun no se habia enterado. 

-Ayer. - Dijo bajito. A veces le daba miedo ver a la castaña enojada. 

Y es que ese ceño levemente fruncido y sus facciones endurecidas junto a sus ojos sin perderse ninguno de sus movimientos, lo intimidaban. 

Y eso que el a poca gente le tenia miedo. 

-Bien hecho. - Para su suerte, el ceño fruncido desapareció. Eso era una buena señal. -Ahora, por favor, prepárame un desayuno y a Luca también, mientras me doy una ducha. - Estaba por quejarse, pero se calló cuando ella lo miro antes de salir de la cocina.  

Pronto escucho los pasos alejarse y miro al gato que con sus grandes ojos lo miraba atentamente. 

-Supongo que debo darte de comer. - Le dijo al gato antes de acaricias su cabeza y buscar algo que si pueda comer. 

                               [🍂]

-Luca orino un par de mis zapatillas nuevas. - Se quejo JungKook, cuando detuvo frente a un semáforo rojo. 

Lisa rio. 

-F. 

-¿Sabes cuanto costaron esas zapatillas? - Pregunto, acelerando. 

-No lo se, puedes comprarte otro par. No es como si no tuvieras dinero suficiente. - Lo miro. 

-Eran de edición ilimitada. 

Lisa viro sus ojos y apago el celular, para por fin mirarlo. 

-Bien, hay veo que hago. 

JungKook asintió y entro al estacionamiento del edificio donde trabajaba. Apago el motor del auto y salió de este, pero vaya: 

-Jeon.- El castaño volteo hacia donde venia la voz. Un chico salía de las sombras.  

Muy de película, pensó JungKook. Cruzo sus brazos y levanto su mentón. 

De pronto, Jaebeom se hizo ver. Una sonrisa de lado apareció en sus labios. 

Jeon, con burla, sonrió. Se recargo en la puerta y espero a que estuviera mas cerca.  

-¿Que se te ofrece? - Pregunto, subiendo su mirada de sus pies a el. 

El chico sonrió con sorna. 

-No creo que tu podrías llegar a darme algo que de verdad desee. - Auch, justo en su ego. 

Pero Jeon no estaba dispuesto a aguantar sus estúpidas bromitas. Dio un paso, quedando mas cerca. 

-¿Que es lo que haces aquí? - Su rostro habia cambiado a seriedad pura, de esa que el disfrutaba. 

-Solo vengo a entregar esto. - De su traje saco un sobre blanco, el que le extendió. Confundido, lo tomo. 

-¿No crees que habría sido mucho mas fácil por correo?. - Y claro, le gustaba molestar a gente como el. 

-Cosas como estas, se deben entregar en persona. - Metió sus manos en sus bolsillos delanteros, mostrándose despreocupado. 

Alzo una ceja y miro el sobre, en una esquina estaba la "P" que habia visto hace un par de días. Y entonces una teoría llego a su cabeza.  

-¿Tu fuiste el que le envió esas fotografías a Jimin? 

Por un segundo su expresión despreocupada se transformo en una sorprendida, aunque intento disimular, Jeon ya se habría dado cuenta. 

-Vamos, contesta. - Insistió. 

El levanto su mentón, tratando de mostrarse intimidante. 

-Puede ser. - Elevo sus hombros. 

-Es si o no. - Aclaro, su tono fue bastante duro. 

Dio un par de pasos atrás y solo: 

-Fui yo. 

Entonces entro a un vehículo negro que estaba allí. 

Y mientras el pensaba en las posibilidades de no ir tras el y darle una paliza. 

Un chico rubio lloraba en silencio por estar contra la espada y la pared. Sin saber que decisión tomar. 

Los estudios me tienen consumida. Al menos ya entregue el proyecto que me tenía estresada y tendré un poco más de tiempo para escribir. Además ya comencé con la nueva historia, que aún no está publicada, pero pronto si lo estará.

Espero que se encuentren bien y que se cuiden. 

Nos leemos pronto.