¡CORRE!

2 CAP: A DOS SEMANAS 

Lein

-Sí, mamá- le respondo a la señora que se encuentra al otro lado de la pantalla mientras ordeno la habitación

Ella se queda media hora hablando acerca de cómo le está yendo en su curso de cocina y me detengo a observarla mientras termino de doblar las sábanas blancas de mi cama, cada nada se detiene para decirme que así no se hace, como no le presto atención continua hablando; es increíble lo mucho que me parezco a ella, tengo sus ojos, un color gris que sólo he visto en el espejo y en la cara de mi madre, también el color de su cabello, un negro intenso que resalta el brillo de mis ojos y los de la mujer que se refleja en la MacBook, solo que mamá es morena, tiene la piel trigueña y suave; en cambio yo soy tan pálida como mi padre, cosa que agradezco porque de otra forma pensaría que solamente me hizo mamá.

-No estoy muy de acuerdo con el viaje a Italia- me dice de repente y dejó lo que estoy haciendo y me siento en la cama

-Aún no es seguro y no veo que te preocupa mamá

-Lein, ustedes solas por allá, Italia es un país peligroso, no me convence mija- La miro con ternura y quisiera poder abrazarla para tranquilizarla, a mis 22 años aún sufro de mamitis

-Mamá te prometo que nada malo pasará, más tarde te escribo, iré a bañarme- le tiró un beso a la pantalla y ella me lo devuelve, corta la llamada, termino de ordenar la mesita de noche y me quito la ropa mientras entro al baño que está justo al lado de mi closet

Ya pasó una semana desde que fuimos con el Profesor Rowan, hemos seguido trabajando duro en la finalización de algunos puntos de la tesis y nos hemos reunido bastante con nuestros amigos para apoyarnos en algunas cuestiones que tengan que ver con el trabajo, todo el mundo lo he sentido bastante nervioso por el viaje a Italia y también porque aún no sabemos con certeza quiénes son los que tendrán esa increíble oportunidad, dejó que el agua fría me aclare las ideas y le pido a Alexa que reproduzca Talking to the moon.

Me siento como si fuera famoso, la comidilla de la
ciudad    

Dicen que me he vuelto loco

Sí, me he vuelto loco

Pero ellos no saben lo que yo sé

Porque cuando se pone el sol, alguien está respondiendo

Sí , están respondiendo, oh En la noche, cuando las estrellas iluminan mi habitación
Me siento solo

Hablando con la luna
Tratando de llegar a ti
Con la esperanza de que estés del otro lado, hablándome también
O soy un tonto, ¿Quién se sienta solo, hablando con la luna? ¿Alguna vez me escuchaste llamar?
(Ah-ah, ah-ah, ah-ah) Oh-oh-oh, oh-oh-oh

La canción inunda mis oídos y me relaja inmediatamente, después de 5 canciones más salgo del baño y me cambio con jeans cómodos y una camiseta corta de tiras, blanca. Salgo a la cocina mientras me peino el cabello y huele a pasta con salsa bechamel

-Hay que irse preparando para cuando estemos en el poderosa Italia comiendo pasta todos los días- Me siento en una de las sillas que se encuentra en la barra de la cocina mientras observo a mi amiga cocinar y bailar al son de The weekend. Mare y yo somos como la luna y el sol, ella es rubia, tiene el cabello hasta los hombros y los ojos verdes, su piel es un poco amarilla y es de aproximadamente 1,70 de estatura.

Almorzamos juntas mientras vemos diario de una pasión, Mare está llorando desde hace media hora, estamos arropadas mientras el frío de la noche junto con la lluvia nos hace tiritar, la pantalla de mi celular se enciende y me acerco a verlo

¿Será que soy digno de que cenes conmigo hoy?

Le sonrió a la pantalla y Mare le pone pausa a la película.