No es para tanto, solo para siempre

CAPITULO 2. CHRISTOPHER

Christopher despertó a la madrugada, se giró y miro el reloj eran las 4.30am, aún quedaba una hora para que sonara la alarma, se puso a pensar en lo mucho que había cambiado su vida desde que decidió independizarse, compro un departamento en una de las zonas mas lujosas de Los Ángeles en donde esta viviendo con su mejor amigo Alfonso Herrera, los dos son médicos internistas con excelente trayectoria, están haciendo la residencia en el CA Hospital Medical Center, un hospital muy prestigioso en la ciudad. Hubo algo que lo saco de sus pensamientos, se sentía estable y pleno en todos los aspectos de su vida... - ¿seguro que en todos? - se preguntó, la respuesta era no, hasta ese momento no había querido formalizar ninguna relación amorosa, se sentía satisfecho de tener amigas con quienes salir y pasar el rato, quiso convencerse que el compromiso no era lo suyo, pero ahora era diferente, estaba por cumplir sus 30 años y quería sentirse realizado en todos los sentidos. Se prometió que iba a hacer un esfuerzo por abrir su corazón, cuantas mujeres de las que había conocido le habían expresado sus deseos de tener con el algo más que una relación de una noche a lo que la siempre tenía una negativa. Estaba dispuesto a dejarse robar el corazón para llenar ese espacio de su vida en el que aún se sentía vacío. Repasaba la lista de posibles candidatas a ocupar ese espacio mientras reía porque para el ninguna aplicaba totalmente, sonó la alarma lo que lo alegro porque estaba por desistir de su nueva decisión al no encontrar lo que buscaba. Se levanto de la cama solamente con un bóxer que acentuaba muy bien sus caderas, tenia su torso desnudo, se notaba su musculatura muy bien marcada, Christopher Uckermann era una bomba sensual para cualquiera que fuera la mujer que tuviera el placer de conocerlo. Se dirigió al baño, se afeito, cepillo sus dientes, se dio un baño rápido y se puso su uniforme azul oscuro, peino su cabello dejando escapar un rizo rubio sobre su frente. Cuando llego a la cocina su amigo aún no había salido del cuarto, saco del refrigerador una banana para comerla mientras estaba listo el café, aprovecho para revisar sus mensajes y las noticias del día, tenia su bandeja de entrada llena todas sus "amigas" insistiendo por una nueva cita, puso su sonrisa ladeada mientras servía un café para el y otro para su amigo, en ese momento Alfonso entro por la puerta de la cocina.

Alfonso: Buenos días bro. Te siento de muy buen humor, me alegra mucho que inicies tan bien el día. – le dijo dándole una palmada en la espalda-

Christopher: Buenos días mi rey, he tomado una decisión importante, quiero tener una relación seria, el problema es que de mis chicas ninguna aplica para lo que busco. Tú, ¿qué tal noche pasaste?, aun sigues soñando con la rubia de ojos claros con cuerpo escultural que me contaste el otro día -dijo mientras soltaba una carcajada-

Alfonso: Perate wey no me hagas esas bromas tan temprano... las palabras Christopher, relación, seria y compromiso no caben en la misma frase – dijo dando un sorbo a su café- y respecto a la rubia, si sigo soñando con ella, te juro que cuando la encuentre enseguida me caso – dijo suspirando-

Christopher: Primero, no es una broma Ponchito, ya se que no tengo muy buena fama en ese sentido, pero quiero cambiar, ya casi tengo 30 y aun sigo actuando como cuando tenía 20, lo estuve pensando bien y espero elegir bien cuando la chica de mis sueños se presente en mi vida. Segundo, que bueno que sigas soñando con ella solo espero que no se quede solamente en sueños y ya vámonos que vamos a llegar tarde, ya sabes como se pone Diestro cuando no llegamos a tiempo a recibir turno – dijo mientras tomaba las llaves del auto y empujando a su amigo hacia la salida-

Subieron al auto de Chris y salieron rumbo al hospital. Al llegar hicieron el recorrido con Diestro, otro residente que todos los días tenia cara de pocos amigos y es que literalmente era así, no tenia amigos era una persona solitaria y para nada sociable, se dirigía a sus compañeros solamente para hacer algún comentario estrictamente de trabajo y por lo mismo nadie intentaba siquiera buscarle conversación. Al terminar el recorrido iniciaron con sus labores médicas.

Hacia el medio día Chris le envió un mensaje a Poncho para que se vieran en la cafetería para almorzar. Mientras caminaban hacia la barra de comida a Christopher le llamo la atención un aviso que vio en la cartelera de novedades: "XXVII SIMPOSIO NACIONAL DE RESIDENTES DE MEDICINA INTERNA. Inscríbete y mantén tus conocimientos actualizados de la mano de los mejores profesionales de Latinoamérica."

Christopher se detuvo y le tomo una fotografía al cartel, siguió caminando cuando de pronto sintió que le dieron un golpe en el codo.

Poncho: - dándole un golpe en el codo- Por Dios Luis, ¿qué te pasa?, casi te estrellas con la jefe Sabrina, sabes lo sangrona que es esa vieja.

Christopher: Vamos a inscribirnos, será interesante...

Alfonso: De que hablas wey, me estas preocupando, a que nos vamos a inscribir, ya reacciona te necesitamos en la tierra. El universo tiene todo controlado como dices tu.

CVU: No seas imbécil Poncho por favor, hablo del simposio, definitivamente tu caminas y no prestas atención a los avisos importantes que hay en las carteleras.

Alfonso: Cual simposio, no vi nada – suena un mensaje en el celular de Alfonso- Ahhh ok, ya entiendo gracias por compartirme la información bro. Dice que en la oficina de Paty nos podemos inscribir, después de comer vamos antes de que se acaben los cupos.

Chris solamente asintió porque ya era su turno de seleccionar su menú, terminaron de comer y antes de que terminara su hora fueron rápidamente a la oficina de la jefe Patricia.

Paty: ¿Qué onda guapos?, ¿Qué los trae por aquí?

Alfonso: Paty, pero como no nos saludas como corresponde – le tomo la mano y dejo un beso sutil en el torso de la misma- ¿Cómo estas princesa?

Paty: Ay si tú, ¡muy caballero!, si ya sé que cuando vienen es porque necesitan un favor, que necesitan par de galanes de vereda – ríe- o ¿acaso vienen a invitarme a salir? – dejó escapar una sonrisa burlona- ya en serio que necesitan que tengo bastante trabajo.

Christopher: Esta bien iremos al grano, queremos inscribirnos al simposio...

Paty: Por supuesto, hay bastantes cupos aun así que no se afanen que no quedaran por fuera del evento.

Christopher: ¿En serio? – preguntó- pensamos que los demás ya habían venido a inscribirse.

Paty: De hecho, si vinieron, pero no les agrado un pequeño detalle así que desistieron.

Alfonso: -Mirando a Christopher y luego a Paty- ¿Cuál es ese detalle?

Paty: El simposio es en Ciudad de México

Christopher y Alfonso se miraron sorprendidos, con la mirada se preguntaban el uno al otro que harían, si realmente valía la pena un viaje de dos semanas fuera del país para actualizar sus conocimientos médicos.

Paty: - Viendo la cara que los dos tenían preguntó- Entonces, ¿se van a inscribir?

Alfonso y Christopher: - Al tiempo dijeron- Si!

Sonrieron al ver que sin hablarlo tomaron la misma decisión, diligenciaron el formato y salieron de la oficina de Paty pensando si lo que habían hecho sería la mejor decisión, aun tenían un mes para retractarse de su inscripción, si así lo querían.