Salieron del restaurante a continuar con sus labores, pero Dulce no pudo dejar de pensar un instante en la conversación que tuvo con sus amigas. Mientras transcurría la tarde las chicas seguían en sus actividades y los chicos estaban en las conferencias y los eventos programados por el simposio. Al caer la noche Dulce se alistaba para salir del turno, tomó la tarjeta que Chris le había dado y antes de salir del hotel marcó su número, repico un par de veces cuando escucho esa sensual y masculina voz al otro lado de la línea.
Chris: ¿bueno?
Dulce: Ho... Hola Chris ¿cómo estás?... Soy Dul
Chris: - sorprendido por la llamada- Hola Dul, ¿cómo estas mi vida?
Dulce: - un poco apenada por como el la había llamado- Bien muy bien todo por acá, ya terminando turno, ¿qué tal tu día?
Chris: - entendiendo que lo llamaba para repetir la salida de la noche anterior- Bien también, muy interesante todo ya saliendo también. ¿Tienes planes para esta noche?
Dulce: No, no tengo planes ya en 10 minutos salgo del hotel.
Chris: Que bueno belleza, ¿te gustaría tomarte otro café conmigo?
Dulce: Claro que sí, encantada... Pero, ¿dónde nos vemos?
Chris: No te preocupes, yo rente un auto hoy al medio día porque andar en taxi me desespera, paso por ti, espérame en la entrada del hotel.
Dulce: - Pensativa porque no sabía cómo podían proceder en ese auto con los temas que han dejado pendientes- De acuerdo, aquí te espero. Bye.
Rápidamente tomó su bolso y corrió al baño a darse un retoque en el maquillaje, quería estar más bella de lo que ya era para su cita. "Cita" cuando se imagino ella llegar a tener una cita con un huésped, pero no era cualquier huésped era el único que le había movido las fibras de esa manera en toda su vida, porque la vida le haría sentir algo así con una persona que solamente estaría en su vida un par de semanas o al menos así lo creía ella.
Al cabo de 10 minutos ya Dulce terminaba su turno, estaba sola ya Maite había salido y Any se fue rápido para verse con Poncho, algo le decía que esa noche tampoco llegaría su amiga al depa, tomó su abrigo y camino rumbo a la salida del hotel, se detuvo a esperar a Chris cuando de un auto estacionado sonó la bocina, ella se quedó buscando de donde venía el sonido y lo que vio fue un vidrio bajarse automáticamente de un modelo color negro muy deportivo, tras el vidrio apareció Chris moviendo su mano en señal de saludo, ella camino hacia donde el estaba, cuando la vio acercarse descendió del auto y camino hacia la puerta del copiloto, cuando se encontraron el le recibió el bolso y la tomó de la cintura depositando intencionalmente un beso en la comisura de sus labios.
Chris: Buenas noches Dul -abriéndole la puerta del auto para que subiera-
Dulce: - sonrojada por el saludo del guapo joven, no lo esperaba, pero le gustó- Hola Chris, que tal tu día
Chris: - estaba agotado, pero no se lo haría saber, quería que fuera una velada igual o más especial que la de la noche anterior- Bien, la verdad es muy satisfactorio aprender nuevas técnicas y procedimientos para ayudar a mis pacientes.
Dulce: Que interesante, me alegra mucho que estés disfrutando tu simposio – dijo acomodándose en la silla del copiloto-
Christopher le dio la vuelta al auto, subió y arrancó rumbo a la cafetería, durante el camino conversaron sobre sus amigos, ambos estaban de acuerdo en que Any y Poncho estaban yendo muy rápido, pero solamente ellos conocían la manera de actuar de los chicos y por eso no les extraño lo que estaba pasando.
Al llegar a la cafetería Chris estacionó en una Bahía que había a un costado de la acera, descendió y abrió la puerta de Dulce ayudándola a bajar, al entrar los atendió el mismo mesero de la noche anterior lo que a Chris no le causó nada de gracia. Se dirigieron nuevamente a la mesa ubicada en el balcón, tomaron asiento y empezaron a buscar en la carta lo que iban a ordenar, el mesero nuevamente llegó inesperadamente preguntando si ya habían hecho su elección a los que los dos asintieron, el joven tomó la orden y se dirigió a la cocina, mientras tanto Christopher le habló a Dulce un poco de su carrera, tenía ganas de compartir con alguien los temas interesantes que habían tratado durante el día pero no quería colapsar a la chica con términos que seguramente no conocía, el mesero llegó con la comida la dejó sobre la mesa y cuando estaba dispuesto a retirarse Christopher le hizo una señal para que le permitiera un momento a lo que él joven no se podía oponer. Christopher llevándolo a un lado alejado de la mesa donde estaba Dulce
Chris: - leyendo el nombre del joven en su uniforme – Peter, estoy muy agradecido por tu atención y tu servicio, en el momento que necesitemos algo en lo que nos puedas colaborar ten la seguridad de que te haremos llamar – hablo sacando un par de billetes de su bolsillo para entregárselos al mesero-Quedó claro?
Peter: Si señor por supuesto que quedó claro, disculpe usted las interrupciones no volverán a suceder – se giro caminando hacia la entrada para atender a las personas que habían llegado-
Christopher regresó a la mesa con Dulce
Dulce: - mirando a Chris- Paso algo?
Chris: No princesa para nada, solo quería darle una propina al chico, nos ha atendido muy bien, la merece.
Dulce sorprendida de la generosidad de rubio y apuesto joven sonrió y empezó a comer al mismo tiempo que el lo hizo, mientras lo hacían Chris no dejaba de acariciar la mano de Dulce, aprovecho un par de ocasiones para darle una probada de su plato, se sentía extraño, pero se sentía bien. Al terminar, retiraron los platos hacia el centro de la mesa. Chris tomó a Dulce de la mano haciéndola levantarse de su silla, la dirigió a la baranda del balcón y la abrazo por la cintura, Dulce no entendía que iba a pasar, pero tampoco se iba a resistir, iba a poner en práctica algo del consejo de sus amigas.
Chris: Siento las estrellas son mis cómplices en Ciudad de México, insisto en que la luna y tu tienen una conexión especial, ella siempre se pone de tu lado para hacerte más bella de lo que eres – hablo retirando un mechón de cabello del rostro de la pelirroja mientras acercaba su rostro al de ella- Me gustas Dulce, me gustas mucho y esto es algo que no puedo evitar.
Diciendo esto sin mediar una palabra más atrapó suavemente los labios de ella con los suyos, ella al principio se resistió pero poco a poco se fue soltando más al punto de entregarse por completo en ese inesperado beso, movía sus labios al compás de los de Chris formando una danza sensual que los estaba incitando a dar un paso más, ella acomodo sus brazos sobre los hombros de Chris y los entrelazo tras su nuca, con lo que él sintió que ella estaba levantando las barreras que había puesto entre ellos por lo que la apretó más hacia el, era inevitable la excitación de los dos, y de eso Dulce pudo darse cuenta al sentir el duro miembro de Chris presionando sobre su vientre. Se alejaron por falta de aire, el la abrazo y sonrió mientras depositaba un corto beso en los labios de ella.
Chris: Y ahora me encantas más – dijo mientras se dirigían al punto de pago-
Mientras Chris pagaba la cuenta Dulce rápidamente llamó a Any.
Any: ¿Si bueno?...
Dulce: Any hola, ¿vas a ir a dormir esta noche al depa?
Any: - entendiendo las intenciones de su amiga – No honey, puedes acostarte a dormir tranquila, llego en la mañana como hoy – dijo en tono sarcástico –
Dulce: está bien, cuídate mucho, te quiero – corto la llamada rápidamente-
Acercándose a Chris abrazándolo por detrás.
Dulce: Vamos, te tengo una propuesta.
Christopher sin dudarlo quiso averiguar cual sería esa propuesta, siguió a la chica hasta el auto, subieron y para poder salir de ahí le preguntó a dónde se dirigían.
Dulce: - Dándole a Chris un beso corto con una mordidita- a mi departamento – lo miro sensualmente-
El no pudo resistirse y sonriendo arrancó el auto hacia el edificio donde vivía Dulce.
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No es para tanto, solo para siempre
RandomPodrán un médico y una recepcionista darle un final feliz a su historia de amor o el destino estará en su contra.