CAPÍTULO 13. INTENTALO

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Dulce entro a su departamento, que extraño se sentía llegar sola, dejo el bolso y el abrigo en el perchero y entro a la cocina a preparar su acostumbrado te para dormir. Intento llamar a Any pero la llamada se iba a buzón, no insistió más, tomo la taza que contenía la bebida caliente y se dirigió a su habitación. Apagó la luz y se acomodo bajo las sabanas de la cama, antes de cerrar los ojos paso las yemas de sus dedos por su rostro, siguiendo la ruta de las caricias de Chris, sonrió, que extraña sensación le hacia sentir ese chico.

Christopher entro a la habitación del hotel, se quito la ropa y tan pronto como recostó la cabeza en la almohada quedo profundo, obviamente pensando en la pelirroja.

Al día siguiente Dulce despertó como era acostumbrado muy temprano en la mañana, antes de iniciar su rutina de ejercicio salió del cuarto y se percato que su amiga no había llegado a dormir, tomo su celular para intentar comunicarse con ella.

Any: ¿Bueno?... Honey, ¿cómo estás?

Dulce: Creo que esa pregunta debería hacerla yo... ¿Estas bien?

Any: Mejor no puedo estar -de fondo se escuchaba la risa de Poncho- En media hora estoy en el depa para cambiarme, espérame con un buen café porque no he pegado el ojo en toda la noche -río- nos vemos bebé, te quiero.

Dulce dejo el celular sobre el comedor, no estaba de acuerdo con el comportamiento de su amiga, pero tampoco le extrañaba, ella desde la secundaria había tenido buena relación con los hombres. Entro a su cuarto y empezó a hacer ejercicio, miro el reloj y ya había pasado una hora y nada que aparecía su amiga. Sin embargo, puso a preparar café mientras se bañaba, se estaba terminando de peinar cuando escucho la puerta, salió de la habitación corriendo hacia el salón. Estaba Any abrazándose a Poncho mientras se daban un candente beso. Dulce carraspeo.

Poncho: Buenos días Dulce ¿qué tal el café de anoche con Chris? – hablo posando su mano sobre la cintura de Any-

Dulce: Buenos días a los dos, en la cocina hay café fresco por si desean tomar una taza, no se ven nada bien – dijo riendo mientras miraba a la pareja de tortolitos- Any, ¿te demoras o alcanzas a estar lista mientras desayuno?

Any: Bye cariño, espero verte en la tarde – se dirigió a Poncho depositando un corto beso en sus labios para luego hablarle a su amiga- Espero no demorarme, please espérame no me quiero ir solita.

Dulce: Y, ¿cómo a mi si me toco pasar la noche sola en este apartamento? – hablaba mientras preparaba un plato de fruta- Pero esta bien, para que veas que la mala amiga de la relación no soy yo te voy a esperar, pero por favor apúrate, Maite descanso ayer y quedaron varios pendientes en el hotel.

Poncho: No les quito más tiempo yo también tengo afán, la conferencia es pronto y según el navegador el lugar esta un poco retirado. Que tengan buen día. -dijo perdiéndose por el pasillo que llevaba a la puerta-

A Dulce le extraño que Any en pocos minutos estuvo lista.

Any: Ay no Dul, siento que la cabeza se me va a reventar -dijo tomando un poco del café del desayuno de su amiga- Pero la pase increíble, y a ti que tal te fue con tu galán.

Dulce: Temo que hoy tendrás que usar tus trucos de maquillaje bebé, jajaja de que galán hablas, Chris y yo solo salimos a tomar un café y luego dimos un paseo por la plaza principal, me trajo a mi casa para que pudiera descansar, no como otras que se van por una cerveza y quien sabe donde pasan la noche – hablo levantándose del asiento para llevar los trastes a la cocina- ¿Vas a desayunar o con el café tienes?

Any: Con el café estoy bien, no quiero que lleguemos tarde.

Tomaron sus cosas y salieron camino al hotel, a unos metros de la entrada se encontraron con Maite.

No es para tanto, solo para siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora