Me acuesto en el pasto olvidando por completo las estrellas y siento su mirada cuando se sienta frente mío. Yo en cambio desvió la mía a los arbustos, cualquier cosa era más interesante que mirarlo, si lo hacía corría el riesgo de llorar y no quería eso.
No quería que me vuelva a ver débil
Y comienza a explicarse.
-Mis padres hicieron una reunión para celebrar que tenemos nuevos socios, es tradición que venga la familia días después de la gran celebración, que fue a la que fuimos juntos. Pueden ir acompañantes- para al ver mi cara y agrega rápido. – No, ella no era mi acompañante, la única a la que pensé invitar fue a ti. Ella era la hija de los nuevos socios, pensé en invitarte a ti como te dije, pero recordé un pequeño detalle, digamos que si te invitaba y nos metíamos a la pileta era más probable que ella te presté toda la atención a vos que a mí, y por si no entendiste ella, la chica del bikini es lesbiana, muy lesbiana. Fue un día después de que nos besáramos y estaba contento, sé que sos bisexual y ella podía hacer que te olvides de mí, porque tengo ojos y sé que es bonita y tú también lo eres, hubieses llamado su atención muy rápido. Es una maldita mujer y hasta yo admito que tienen más posibilidades con cualquier chica hetero.
Ah ok, quede como una idiota cuando se me estaba confesando.
-Y por si no me crees. – Saca su celular y me muestra un Instagram, una foto de una chica que tiene puesto el mismo bikini que él me dio. Me muestra otra foto y estaba besándose con una chica. HASTA EN LA MALDITA BIOGRAFIA TENIA UNA BANDERA LGBTQ+ y para que no crean que es bisexual tiene la palabra Lesbiana en negrito.
Lo volví a arruinar, como siempre lo hago.
Soy una estúpida, habiendo pasado otra cosa, no tengo motivos para enojarme con Cosmo.
No somos nada más que amigos.
-Oh entiendo, perdón. Fui una imbécil al no preguntarte primero. – Intento que mi tono muestre lo arrepentida que me siento, pero no lo estúpida que soy.
-Ambos actuamos como imbéciles hoy. Perdón igual. – Se disculpa
Nos quedamos en silencio avergonzados hasta que lo rompe.
-Entonces Emma... mejor aclarar las cosas y hacer algo que ambos queremos ¿Novios? – Se levanta y me ayuda a hacerlo. –Si es que podrías aguantar estar con dos personas completamente distintas en un mismo cuerpo.
Había aprendido que Cosmo intenta usar el humor o hacer chistes cuando está nervioso. Y ahora lo está, tanto que bromea con algo que no le agrada.
-Podríamos intentarlo, no tenemos nada que perder. Novios. -Le confirmo.
Tenemos mucho que perder.
Después de la extraña pequeña discusión o aclaración de dudas estamos bien.
Nos besamos, por segunda vez. Sus labios siguen siendo igual de suaves, como nubes, esta vez no tiene sabor a alcohol, es él al 100% y eso lo hace más emocionante, no hay ninguna personalidad que esté manejando su cuerpo ahora, no hay alcohol que no le permita hacer sinapsis a sus neuronas, que no le permitan pensar con claridad. Solo él, las estrellas y yo. Solo nosotros.
Vuelvo a acordarme de las estrellas. Y cuando nos separamos las miro, siguen igual de hermosas, como si nada hubiera cambiado, pero en tan solo minutos cambiaron tantas emociones dentro de mí y dentro de Cosmo podría afirmar que más.
Intento pensar en una palabra que defina a Cosmo o a nuestra vida desde que nos conocemos, pero es tan inefable que se me hace imposible poder hacerlo.
Cosmo es completamente inefable.
Gal es completamente Inefable.
Ellos son Inefables ante cualquier persona que busque describirlos, tan perfectos e imperfectos, tan simples y complejos, tan puros y reales, pero al mismo tiempo ninguno de los dos es puro, y ninguno real.
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Inefable
Misteri / ThrillerNunca quise arrastrarla a mi. No quería arrastrarla a su final. En sus ojos se reflejaba la intensa llama de un pasado que jamás puede volver. En sus ojos se reflejaban esa niña que nunca pudo crecer, pero por más que quisiese no era ella, nunca lo...