ROCKSTAR

CUATRO

El día de Jungkook no estaba mejorando, se sentía fatal, su cuerpo dolía y con suerte podía mantener sus ojos abiertos, sentía que cargaba dos pesas en sus párpados. Sin mucho ánimo se tuvo que levantar de la cama, estaban en la última semana antes de que la gira comience por lo que los ensayos eran indispensables.

Aun con todo el dolor en su cuerpo y su poco ánimo, bajó hasta el estacionamiento y pareciera que los planetas se alinearon para que el día estuviera en su contra, pues justo cuando estaba caminando hacia su auto, otro choco fue directo a estrellarse al de él. Juro que asesinaría al responsable pero su cuerpo solo le permitió hablar despacio y sin ánimo, lo que intimidó al dueño del otro auto.

Después de eso recibió una llamada de Yoongi diciéndole que ya era tarde para el ensayo. Le explico lo sucedido y no tardo en mandar a alguien para que se encargara y llevara al chico a la empresa para ensayar.

Seokjin no tardó en llegar y al parecer tampoco parecía estar de muy buen humor por lo que los dos no dijeron ni una sola palabra. El camino a la empresa fue silencioso, hasta que el mayor recibió una llamada, que intentó ignorar pero no pudo.

- Contesta, antes de que lance ese jodido celular por la ventana. - dijo con brusquedad el chico en los asientos traseros mientras sobaba su cabeza.

Jin no tuvo opción y contestó.

- Namjoon estoy ocupado...

- Jinnie, porfavor... - el mayor incluso podía imaginar el puchero que posiblemente su hermano estaría haciendo.

- No, es mi última decisión, así que no insistas que la respuesta será la misma.

- p-pero...

- pero nada, no iras. - sin esperar una respuesta, terminó la llamada.

Jungkook se sentía tan frustrado porque en ese momento no estaba obteniendo lo que quería y era descansar, lo necesitaba en demencia, su cuerpo juraba no responder en otra situación de estrés. No sabía porque se sentía de esa forma, días anteriores comenzó a sentirse muy cansado, y desconocía la razón de sus malestares, pero hasta el día de hoy le estaba resultando un martirio.

Llegaron a la empresa y bajaron del auto para caminar directamente al ascensor, por suerte estaba vacío, lo que significaba que no tendrían que lidiar con la incomodidad de ir todos apretados tal sardinas en lata, aunque el día no estaba a favor de Jungkook, pues las puertas se abrieron y por estas entró un chico despistado quién cargaba tres cajas pesadas y hasta arriba llevaba lo que parecía ser una bolsa de comida.

" ¿qué clase de estúpido deja la comida ahí? " piensa Jungkook, hasta que siente su cara llena de una pasta y una salsa un poco caliente.

Todas las cajas habían caído y con ellas la bolsa de comida que dio directamente al rostro del cantante.

Quito el exceso de pasta de su cara y limpió sus ojos con sus dedos para mirar intensamente al chico responsable de aquel desastre.

Lo toma por la playera y lo estampa contra la pared del ascensor. Jin intenta acercarse para separarlo y evitar que le haga algo al chico, pero a cambio recibe un fuerte empujón.

Jungkook estaba perdiendo el control, no había duda. Algunos de los trabajadores miraban con intriga la escena. No podían hacer mucho, el temperamento y el poder que Jungkook tenía ahí era fuerte.