VEINTIDÓS

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Intentaba olvidarlo, intentaba sacar aquella imagen de su cabeza, olvidar su voz pero era imposible hacerlo, en todo momento era una tortura interna borrar su imagen.

Le causaba tanta importancia sentirse observado y no poder sentir un alivio al ver qué posiblemente solo era su imaginación, porque sus ojos nunca se lo permitirían. Eso le frustraba tanto, que el aire se le iba y su cabeza comenzaba a doler. Por eso prefería ir y quedarse con Jungkook o Jin, estando con ellos se sentía protegido y podía descansar bien.

No le había dicho a nadie porque no quería preocuparlos o arruinarles la gira, no quería causar problemas.

En ese momento estaba recostado junto a Jungkook quien acariciaba su cabeza con suavidad. Sus dedos se movían por su cabeza arreglando su cabello y masajeando, algo que lo estaba durmiendo.

- Namjoon...- escuchó a Jungkook hablar. El mencionado soltó un sonido haciéndole saber que lo escuchaba. - ¿Todo está bien, bebé?

Pudo notar la preocupación en sus palabras, por lo que busco sus manos para unirla con las suyas.

- Si, solo que esto de los cambios de lugar me abruma un poco, pero está bien.- habló con honestidad pero no con toda la verdad.

Habían pasado dos semanas de la gira y ya habían visitado cinco lugares distintos.

- Es un poco difícil. Pero te guiaré a todas partes. - sintió como las manos de Jungkook soltaban las suyas para después apresar su cuerpo en un abrazo.

Namjoon sonrió y ocultó su cabeza en el pecho de Jeon.

- Gracias...

Adoraba esos momentos junto a él, sentía que de nuevo había luz, que todo estaba bien. Sus miedos desaparecían al igual que sus problemas, todo era perfecto a su lado, nunca se había sentido tan bien como lo hacía estando con él.

- ¿Quieres salir? - escuchó la voz de su novio.

- ¿A dónde?

- Tienes que usar un traje de baño. Solo eso te diré.

Sintió como se alejaba y se paraba de la cama.

- Pero no tengo uno...

- Lo sé... Por eso te compré uno.

Jungkook tomó su bolso donde iban todas sus cosas.

- Vamos.- caminó hacia Namjoon y tomó su mano para ayudarlo a ponerse de pie. - Nos cambiaremos allá.

Namjoon sonrió y asintió, se colocó sus sandalias y siguió a su novio quien lo guió por todo el camino.

Salieron del elevador y fueron hacia una habitación. Namjoon, antes de entrar, pudo escuchar una cascada y agua moviéndose.

Entraron y Jeon cerró la puerta una vez que estuvieron dentro de la habitación.

Era una piscina que pertenecía al hotel donde se estaban quedando. Tenía una hermosa vista que daba a toda la ciudad, donde ya se pintaban los bellos colores del atardecer sobre el cielo.

- Toma.- dijo Jungkook sacando de su bolso en traje de baño que había comprado para su novio.

Namjoon lo tomó entre sus manos y Jungkook lo guió hacia los vestidores para que se cambiara. Él ya lo tenía puesto por lo que no era necesario entrar pero aún así lo acompañó.

Namjoon salió del baño con su ropa en mano y acomodando el shorts que sentía algo corto y apretado a sus muslos.

- ¿Se ve bien? - habló Namjoon algo avergonzado.

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