Capitulo XII

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Acomodo los libros en los últimos estantes de la biblioteca, hago esto y me voy a mi casa. Termino el trabajo y tomo mi mochila para salir del lugar

—Adiós— me despido de Stella al pasar por su lado

—Skate—me llama, giro en mi propio eje para verla— vino alguien para hablar contigo, esta en las mesas del fondo

Frunzo el ceño, desde que empecé a trabajar aquí nadie ha pedido hablar conmigo, las personas suelen evitarlo

—Ve—me anima

Camino hasta las mesas del fondo y veo la silueta de un chico sentado de espaldas a mi, me aproximo hasta quedar frente a el y el levanta la mirada con una sonrisa ¿apenada?

—Hola— saluda levantándose— disculpa por haber venido, pero es que nunca me avisaste y quería saber si podías hoy

El nerviosismo que tiene no se pasa desapercibido, se nota en la rapidez en la que habla y como juguetea con sus dedos

—Lo lamento Thom, se me olvido— me disculpo por ni siquiera acodarme de su propuesta—pero...

Soy interrumpida por la anciana metiche de mi jefa, la cual no se en que momento apareció y poso un brazo alrededor de mis hombros

—Claro que ira contigo pequeñuelo— le dice ella al chico

—¿Que?

—¿Si?

Refutamos Thom y yo al mismo tiempo

—Si, ira contigo— se confirma ignorándome—¿verdad Skate?

Miro a Thom y la miro a ella, me rindo y suelto un suspiro— Si

—¿Ves? váyanse pues—dice empujándonos a la salida— que si duran mas puede que los agarra la lluvia

Amdru casi todo el tiempo esta nublado, son raros los días de sol. A mi en lo personal no me afecta, me gusta así

Llegamos a la cafetería cerca del parque en el auto de Thom ya que no me dejo llevar el mío, le dije que lo seguía pero respondió que  me podía arrepentir y marcharme, rodé los ojos por su dramatismo pero el aseguro que después me llevaría al estacionamiento de la biblioteca para recoger mi auto

Nos sentamos en una mesa con un ventanal a un lado, llego la chica que atiende y el pidió un capuchino y yo un batido de fresa y chocolate. Los primeros minutos fueron incomodos porque ninguno sabia de que hablar, yo porque no estaba acostumbrada a esto, y el... No se porque el no hablaba

Pero a mitad de la bebida lanzo una pregunta que me dejo confundida por un momento

—¿Por que se llamara capuchino?—pregunta viendo fijamente su bebida

—¿Eh?

—Porque se llamara capuchino, es hecho de café con chocolate— Vuelve a decir poniendo su mirada en mi— el batido es justificado porque esta batido, osea, ponen todo en la licuadora y ella lo batee. Pero el capuchino no, es café con leche y chocolate, debería ser cacholate¿no?

Lo que dijo mas las caras raras que hacia me saco una carcajada que no pude aguantar, el me miro raro pero luego se unió a ellas, mientras que las personas que estaban en el lugar se volteaban a vernos y su expresión decía "¿que les pasa a estos locos?". Termine de reír y me enderece en la silla aun con la sonrisa en la cara

—Preguntas estupideces— le digo, el se hace el ofendido

—Uysss perdón, solo era una duda existencial— dice con las manos levantadas en señal de paz— además, vale la pena hacerlas si sonríes así de hermoso como lo haces ahora

BranxtorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora