Cuando entré al tercer mes mi pancita se asomó, había mantenido oculta mi "hinchazón" con remeras sueltas, ¿la convivencia con Peter? Bien, aún no nos matamos entre nosotros, descubrí que él tiene una paciencia infinita, aún con mis cambios de humor, mis hormonas revolucionadas.
-Hoy es el día-se mostró entusiasmado desde que nos despertamos.
Tocó el botón del último piso y llegamos a las oficinas, los trabajadores ya estaban en lo suyo.
-¡Hola!-Peter captó la atención de todo el equipo- ahora sí puedo contarlo-elevó sus cejas mirándome, le había dado permiso para finalmente hablar porque todo iba a ser más evidente-ya todos conocen a Lali-me sonrió, después posó su mirada en sus trabajadores-estamos muy felices de contarles que estamos en la dulce espera de mellizos
Se hizo un silencio que se me hizo eterno, acto seguido todos se acercaron para saludarnos, nos felicitaron.
-¡Que bien!-me saludó una compañera, me dio un abrazo.
Peter había pedido sandwiches y cositas dulces como si estuviéramos festejando un cumpleaños, me abrazó por la cintura y por primera vez eso no me molestó estando enfrente de tanta gente, me escondí en su cuello y a lo lejos noté la mirada de disgusto de Natalie, la ignoré.
Me puse a trabajar, organicé la agenda de Peter y noté que tenía una reunión con mi papá, quise esfumarme pero me tocó atenderlo.
-Hola-lo saludé.
-Hola-me respondió seco.
-¿Vas a hacer como si no fuera tu hija?-elevé mis cejas.
-No vine por vos, viene para seguir negociando-suspiró, Peter lo llamó y se fue de mi vista, toqué la puerta y pasé para llevar dos cafés.
-Gracias Lali-Peter me agradeció y me sonrió-¡hoy estamos de fiesta! Seguro notaste todo el despliegue de comida, podes agarrar lo que quieras-le dijo a mi papá-
-¿Alguien cumple años?-mi papá fingió interesarse.
-No..-Peter negó con la cabeza- voy a ser papá
Mi papá se quedó mirándolo.
-Felicidades-otra vez mostró interesarse-¡que alegría!
-Acá está la linda mamita de mis bebés-Peter me dejó un besito en la mano y papá se quedó mirándome.
-Te lo tenías guardado Lali
-¿Se conocen?-Peter elevó sus cejas.
-Ella es mi amada hija Mariana Esposito-papá se mostró "orgulloso"- la única y hija favorita
No pude seguir escuchándolo hablar, actuó como si siempre hubiese sido el padre ejemplar, corrí hacia el baño a devolver, me hacía tanto mal enfrentarme al enfermo de mi papá.
Cuando salí del baño por suerte él se había ido, entré a la oficina de Peter al sentirme mejor.
-Estás pálida La-Peter se preocupó, simplemente lo abracé-ey, ¿que pasa?
-Papá pasa-suspiré- Peter él no es lo que aparenta, si puede darte por la espalda lo va a hacer, no es la primera vez que hace eso-me apoyé contra su pecho sin soltarlo.
-¿Hablás de la misma persona? Me parece un tipo copado, con ganas de trabajar..-Peter iba a seguir hablando pero puse mi mano sobre su boca.
-¿Podemos dejar de hablar de él? Me duele la cabeza-le pedí, él asintió.Ambos terminamos con nuestros deberes y nos fuimos juntos, al llegar al departamento me bajé de mis tacos.
-Tu altura tiene su encanto-Peter me abrazó por atrás y me dejó unos besos por el cuello.
-Lo se...-esbocé una pequeña sonrisa- ¿te gusta no?-agarré su cara entre mis manos.
Los ojos de Peter brillaron y asintió con la cabeza.
-Sos toda chiquita, quiero meterte en una cajita de cristal-él me hizo una caricia en la mejilla-¿te sentís mejor ahora?-volvió con lo mismo y asentí con mi cabeza.
-Te tengo una sorpresa para celebrar los tres meses-Peter me sonrió como un nene, estaba muy feliz hoy-vení, salgamos al balcón-me tomó de la mano.
Al salir noté que había montada una carpa, alrededor habían luces de esas que se usan para los arbolitos de navidad.
-Noche de camping-me sonrió, sus ojitos se volvieron chinos.
Nos sentamos en el suelo que estaba acolchado, lleno de almohadas, después nos pusimos a comer fideos de paquete.
-Seguro extrañaste este menú-Peter elevó sus cejas y me reí.
-No se como lo adivinaste...-le di un toquecito en la nariz, él se me quedó mirando-¿estoy sucia? ¿Tengo salsa, no?
Él negó con la cabeza.
-Solo.. Solo te veo luminosa-él suspiró y se puso a jugar con mi pelo- es una sensación mía a lo mejor, pero siento que es imposible que el mundo no lo note, emanas luz Lali, estás más hermosa que nuca
Escuchar esas palabras salir de la boca de Peter me shockearon, él posó su mano sobre mi pancita y la acarició.
-Seguro ellos tienen que ver-se rió.
Nos tumbamos en el centro de la carpa y volteé para mirarlo a los ojos.
-Peter.. Si pudieses volver a tu vida de hace unos meses, ¿lo harías?-me dio curiosidad y miedo.
Él se quedó pensando.
-Buena pregunta...-se puso a acariciar mi mejilla- pero no, ahora tengo algo nuevo, una aventura para la que nunca voy a estar preparado-elevó sus cejas- una aventura compartida, me llena de alegría, de miedo.. No estoy listo, no se nada de cambiar pañales, dormir bebés, pero se que no estoy solo..
Sentí un cosquilleo en mi interior, la mirada intensa de Peter esta vez me intimidó, me sentí completamente desnuda.
-¿Que se te pasa ahora por la cabeza?-me escondí debajo de su cuello.
-Que me gusta mi aquí y ahora, estar pudiendo hablar de la vida, conectar con tu ser, tu linda energía-enredó su mano en mi pelo- no te escondas de mi Lali-giró, hizo un movimiento y quedé debajo suyo, quedamos cara a cara-me siento raro con vos
-¿Raro bueno o raro malo?-entré en pánico.
Rozó su nariz con la mía.
-Creo que raro bueno...-noté que su respiración se aceleró- eso decímelo vos.. ¿Vos te sentís rara conmigo?
Me quedé pensando aunque ya sabía la respuesta.
-Estoy rara, seguro es todo esto que estoy atravesando, no es fácil..-no pude seguir, no lo esperé, Peter se lanzó a mi boca y me besó, fue un beso robado, apasionado, por último lento, dulce.
-Lali yo... Olvidalo-se arrepintió de hablar, eso me desilusionó-yo.. Voy a decirte que..-volvió su valentía.
Otra vez miré sus ojos.
-Entiendo Peter, nos están pasando cosas muy fuertes, vamos a ser papás, no es poca cosa..-me puse a hablar pero él puso su mano sobre mi boca.
-Lali no encuentro las palabras... Simplemente me siento muy raro, me aterra el simple hecho de estar diciéndotelo y que las cosas cambien-Peter apartó su mirada, mi interior se removió, ¿esta diciéndome lo que estoy creyendo que estaba diciéndome?
-Pit-tomé su cara entre mis manos, sin querer choqué mi nariz con la suya-te entiendo, yo.. Yo también me siento rara..-lo dije, en un impulso solté las mismas palabras que él, lo cual hizo que me sintiera más desnuda de lo que ya estaba, todo me tenía más vulnerable, el embarazo, la confusión.
Peter Lanzani volvió a besarme, dejamos de hablar, terminamos sintiendo al cuerpo del otro, entre caricias y besos simplemente vivimos el presente, uno desconocido, uno que nos tenía revolucionados.
-Lali-Peter me llamó, busqué su mirada-raro es bueno-me afirmó ahora con seguridad.
-Lo mismo digo, raro es bueno-asentí, me apoyé sobre su pecho y sentí sus caricias, sintiendo paz me quedé dormida.
ESTÁS LEYENDO
Enredaos
Fiksi PenggemarLali está de novia con su mejor amigo de la vida Miguel Ángel desde los trece años, ambos son tal para cual, por eso es que nunca se le ocurrió que podría llegar a confundirla tanto una persona completamente opuesta a ella. ¿Se permitirá que Peter i...