Capítulo 21

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Mordí su boca y me aparté un poco de él, le hice una caricia en la mejilla.
-Me voy a dar un baño..-me escapé, cambié de tema, fui hasta el baño, iba todo bien hasta que Peter Lanzani se metió a la ducha conmigo-¡¿qué?!
Peter abrió la canilla y el agua nos mojó a ambos.
-Ahorramos más agua-se rió y me hizo reír.
-Sos un tarado-asentí con la cabeza, él rodeo mi cintura con sus brazos- lindo tarado..-me quedé tildada mirando sus ojos, mientras tanto empezó a pasarme shampoo por el pelo-¿porque sos tan bueno conmigo?
Suspiró, elevó sus cejas.
-Porque.. Porque..-dudó- es imposible no ser bueno con vos, sos buena persona, y no siempre uno conoce a esa clase de personas
Lo abracé y besé su mejilla, me quedé pegada a su cuerpo, él no me soltó, sentí que me besó el cuello, entrecerré mis ojos, mi piel se erizo, tantas sensaciones y sentimientos estaban aflorando en mi interior que me generaba un miedo terrible.
-Pit..-lo llamé, él se apartó un poco para mirarme a los ojos-voy a mostrarte un poquito de mi universo, pero comparado con el tuyo es muy aburrido
Ambos nos reímos.
-Quiero conocer mejor a tus amigas, amigos, a todos los que te quieren-sus ojos se achinaron al sonreírme.
Despeiné su pelito y asentí con la cabeza.
-Hecho-mordí mis labios sin dejar de mirarlo- te queda bien el look pasado por agua
-¡Gracias!-se rió- lo mismo digo
Peter elevó sus cejas mirándome coqueto.
Me terminé de bañar y cuando salimos de la ducha pedimos delivery.
-Risotto, podía haberlo hecho yo-Peter se quejó.
-Estaba antojada y no quería molestarte-asentí con la cabeza, me puse a comer.
-La próxima me pedís, ¿ok?-me miró, asentí con la cabeza.
-OK papito-dije eso y él se me quedó mirando.
-Papito-se quedó pensando- es fuerte
-Muy fuerte-agregué-fuertísimo
-Y vos sos mamita, mamá-me lo dijo, primera vez que me puse a pensar que esa iba a ser una realidad- mamita-me hizo una caricia en la mejilla.
-Sí.. Mamita-asentí y suspiré-mejor voy a dormir, yo.. Muchas emociones, muchas cosas, siento que necesito dormir una vida, menos mal que mañana es Sábado-otra vez me escapé de él.
Cuando me cambié y estuve en pijama me metí en la cama, Peter siguió mis pasos y se recostó a mi lado, ambos parecíamos un matrimonio de años.
-Buenas noches La-me besó la frente, al cabo de un rato escuché a su respiración profunda, calma, eso me relajó y dejé de pensar, también me dormí.

Una vez que se hizo de día me puse a hacer ejercicios de yoga que encontré en Youtube, Peter se despertó después que yo.
-¿Desayunaste?-me preguntó con cara de dormido, negué con la cabeza-¿que haces haciendo gimnasia si no comiste?
-Necesitaba estirar, hacer por lo menos unos ejercicios-tomé un poco de agua- últimamente lo que más hago es comer, tengo que remediarlo
-Vamos a desayunar entonces, cambiate-tiró de mis brazos para que me pusiera de pie.
Terminé haciéndole caso y bajamos a caminar por Puerto Madero, elegí una mesa al aire libre y Peter pidió un desayuno para dos.
Agarré una factura y la comí, Peter se quedó observándome.
-¿Es algo raro no? Los cambios en el cuerpo.. En todo-agarró su café- me gusta verte luminosa, sana
Asentí con la cabeza.
-Poco a poco, cada día que pasa encuentro nuevos cambios, me marea, me asusta pero al mismo tiempo veo mi panza crecer y me maravillo-se me escapó una pequeña sonrisa, Peter se puso de pie y se sentó a mi lado, me hizo una caricia, buscó mi boca, me la besó.
-Podemos.. Podemos hacer lo que quieras después, seguir caminando, recorrer museos..-elevó sus cejas, me reí.
-Sos tan chico aventurero que no podes quedarte quiero-volví a reírme.
-Sí, la ciudad ciudad me sofoca-lo admitió- pero hay lugares nuevos por conocer.. No todo es malo
-Coincido en eso-le sonreí- ¿podemos hacer algo con tus amigos? Y mis amigas, como en el camping
Peter me sonrió y asintió alegre.
-Me gusta tu manera de pensar-me dio un toquecito en la nariz.
Terminamos de desayunar y no me dijo donde íbamos, me puse cómoda en el auto, puse música y recé para no marearme.
Cuando Peter puso en pausa el motor lo agradecí, salí del auto y quedé mirando el río.
-Estamos en el Club Náutico San Isidro-me sonrió-vamos a navegar un ratito
-¡Aguantaste un viaje medianamente largo despierta!-me felicitó Eugenia abrazándome.
-Hola chiquita-me abrazó Nicolas, después su novia Gimena.
-Lali-me dio un cálido abrazo Agustín.
-¿Como estás hoy La? ¿Peter te está cuidando bien?-ella volteó a mirarlo a él.
-Que te diga ella-él levantó sus manos riéndose.
-Sabés que sí boba-también me reí.
-Vengan, vamos a subirnos a mi barquito-Peter nos hizo seguirlo hacia un muelle, me sorprendí al ver a su "barquito".
-Regalo de mi papá para compensar el nunca haber estado para mi-suspiró- por lo menos hoy nos va a hacer pasar un buen día
Me dio la mano para que subiera y lo terminé haciendo, subí y fui con mis amigas.
-Tremendo el universo del hippie-Candela se rió- igual lo entiendo, es demasiado, yo también me alejaría de algo así
-Sí.. Es demasiado loco-asentí con la cabeza.
Peter se puso a manejar, me acerqué para unirme a sus amigos pero me detuve a escuchar, estaban hablando de mi.
-¿Te imaginaste alguna vez el volver a todo el caos?-Agustín se rió, Peter negó con la cabeza.
-No.. Pero es lo mejor por ahora, le prometí a Lali que estaría y acá estoy-suspiró.
-¿Enserio no te sentís atado?-Nicolás lo miró.
Peter se quedó pensando.
-Todo es muy raro.. Se que estoy atándome de por vida a algo, pero.. Por ahora no lo siento como una carga, no se a que se debe eso-volvió a suspirar- cada vez entiendo menos
-Te lo voy a decir algo, mirame a los ojos-le pidió Nicolás- no la cagues con Lali, siempre escapas de lo amoroso, ella es buena mina, buena chica, y se nota que algo siente por vos, no seas tarado
Peter se quedó en silencio mirando a su amigo.
-¿Como sabes que siente algo por mi?-se señaló sin poder entenderlo.
-Es obvio, sus ojos brillan cuando está con vos, eso fue raro verlo en ella tan rápido, cuando estábamos de camping noté que había química, que sus mundos tan distintos iban a complementarse juntos-Nicolás abrazó a Peter y palmeó su espalda- por eso, no la cagues, no entres en pánico
Volteé para irme y que no me descubrieran, me quedé asimilando en silencio todo lo que había escuchado.
-Hola-Gimena se acercó a mi- soy algo extrovertida y tal vez entrometida, pero.. ¿Que le hiciste a Peter? Es otro pibe
Ella me sonrió.
-¿Yo? Nada-esbocé una pequeña sonrisa- estoy aprendiendo a dejarme ser, Peter me estuvo enseñando eso, tal vez él también lo está implementando eso
-Solo quería agradecerte, me alegra ver a mi amigo feliz-Gimena asintió con la cabeza y me sonrió.
Peter apagó el motor y todos nos juntamos para comer sandwiches, tomar algo, hicimos un picnic improvisado.
-¿Vamos a nadar?-Peter elevó sus cejas y me tendió sus brazos, ambos nos tiramos del barco juntos, el resto de nuestros amigos también lo hicieron.
Salpiqué la cara de Peter con mi mano, él hizo lo mismo, ambos nos reímos, me fue inevitable no recordar cuando hicimos eso en el camping.
Tiro de mi brazo y me acercó hacia él, nos quedamos mirándonos, tantos pensamientos se me asomaron por la cabeza, volví a salpicarlo con mi mano libre y ambos nos volvimos a reír.
-Sos de terror-sus ojos se volvieron chinos de sonreír.

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