Epílogo

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Allegra llegó a este mundo a los gritos, mientras que Santino trajo la paz, eso le llevo calma a su hermana.
-Lo hiciste muy bien-Peter me miró con sus ojitos brillantes.
Una enfermera apoyó encima de mi pecho a mis dos hijos, tan chiquitos, ínfimos, me derretí de amor.
-Están acá-miré a Peter sin poder creerlo.
Mientras yo le di la teta a Santino, Peter sostuvo en sus brazos a nuestra Allegra, la acunó y supe enseguida que sería la bebé más malcriada de la faz de la tierra.
Nuestros amigos vinieron a visitarnos, llenaron la habitación de la clínica con globos, nos desearon lo mejor, en simples palabras nos llenaron de amor.

-Bienvenida a casa chiquitita-le hablé a Allegra- y bienvenido a casa mi chiquito lindo-miré con ternura a Santino que estaba en brazos de Peter, ambos ni se enteraron de que abandonamos la clínica, estaban dormidos.
Cuando pudimos nos tiramos a la cama a dormir, pero no pudimos hacerlo mucho, corríamos de un lado a otro, no miento al decir que tuve ataques de llanto por no saber como manejarme, como ser madre, pero Peter me contuvo, su paciencia de hippie fue útil, también logró levantarme el ánimo.
Besé los labios de mi amor, mi Peter mientras él me abrazaba.
-¿Podemos meterlos en la cama con nosotros?-Peter insistió, suspiré, asentí con la cabeza resignada.
-No lo hagamos siempre, sino se pueden acostumbrar..
-Ya lo se mamita-me besó, acto seguido cargó de a uno a nuestros hijos, los puso en el centro de la cama, ambos nos recostamos.
Me quedé maravillada mirando a nuestros amores, ni en mis más alocados sueños soñé que iban a ser tan perfectos.
Besé reiteradas veces a mis bebés y lo vi a Peter sonreír.
-¡¿Qué?!-me reí divertida, elevé mis cejas.
-¿Podes creer que estoy aún más enamorado de vos? Sos hermosa, sos hermosa como mamá-Peter me agarró de la mano y me la apretó suavemente, le sonreí, la levantó y me dejó un besito ahí-descansá La, yo hago de guardia
Me reí, le hice caso y cerré un rato mis ojos.

2 años después..

Peter me sostiene de la mano y me sonríe de reojo, beso dulcemente su mejilla.
Hace un tiempo nos fuimos a vivir a una casita frente al lago en el Sur, donde todo comenzó.
-Son culo inquieto-Peter se ríe y se agacha para agarrar de la mano a nuestros hijos que intentan ponerse nuevamente de pie para caminar, todavía no pueden hacerlo solos, por eso necesitan de nuestra ayuda.
Yo ayudo a Allegra que me mira fastidiada porque quiere hacerlo sola.
-Ya vas a poder solita-la consuelo, beso su frente y el enojo se le pasa. De un momento a otro ella me suelta y caminando torpemente, va hacia Peter, le abraza las piernas.
-¿Podes creerlo?-Peter elevó sus cejas con una cara de felicidad enorme-¡muy bien mi amor!-le llena la cara de besos, ella se deja, porque sí, su papá es su debilidad.
Cargo a Santino entre mis brazos y lo llevo hasta la orilla, él quiere meterse al agua, por eso le saco sus zapatitos y dejo que lo haga, frunce su nariz y atina a ponerse a llorar porque le agarra frío.
-Y eso que es verano-me reí, besé su mejilla.
¿Mis hijos? Lo que mejor me pasó en la vida, además de haber conocido a Peter.
-Y pensar que no querías venir al camping..-Candela me sonríe acercándose a mi, se sienta a mi lado, después llega Eugenia.
-Gracias por venir a visitarnos-las abrazo fuertemente- las extraño tanto.. Pero igual acá soy feliz
-Lo se La-Eugenia me sonríe- dejaron atrás el circo que es la ciudad para venir a este lugar de ensueño, en cualquier momento hago lo mismo
Todas reímos.
A lo lejos vi a Peter hablar mucho con sus amigos, me miraban desde a lo lejos.
-¿Y a estos que les pasa?-me reí, me acerqué interrumpiéndolos-¿porqué me miran tanto?
-Porque estas luminosa, esta vida te sienta-Gimena elevó sus cejas- dejalos terminar de hablar, Emi, Cande, Chinita, Lali vamos a seguir jugando con Alle y Santi
Le hice caso a Gimena y me aparté, nos pusimos a jugar con baldes, llenarlos de agua y vaciarlos nuevamente en el lago, también con juguetes flotantes, Allegra y Santino felices.
Cuando se hizo de noche nos reunimos alrededor de una fogata, todos nos sentamos a hablar de la vida, cantar canciones, me puse nerviosa.
-Tengo una sorpresa..-anuncié y todos hicieron silencio- quiero mostrarles, especialmente a Peter la canción que escribí hace un tiempo-cerré mis ojos- ya la practicamos antes con Gastón que me va a acompañar con la guitarra..
Cerré mis ojos y me puse a cantar..
-Yo creí que el amor nunca iba a tocarme, siempre bajo control, yo tenía mis planes, pero tú llegaste y sin avisarme, mi mundo cambiaste..
Me miraste así, dije qué interesante, intenté resistir, pero tú me besaste, cuando llegaste sin avisarme, mi mundo cambiaste..
Cuando tú dices mi nombre, mi cuerpo siempre responde, no le hago caso a mi mente, aunque me grite detente, terminamos enreda'o, enamora'o, cuando tú dices mi nombre, mi cuerpo siempre responde, con este amor inocente, saco mi lado indecente, y terminamos enreda'o, enamora'o..
Terminé la canción y Peter me sonrió, me tomó de la mano, me dio un beso que todos nuestros amigos celebraron.
-Yo también te tengo una sorpresa-soltó de la nada, elevé mis cejas- acá, frente a todos nuestros amigos, en el lugar que nos conocimos, donde ahora vivimos quiero... Quiero tragarme toda mi filosofía de vida anterior y..-Peter estaba realmente nervioso, besé su mejilla- sos la mujer que no esperaba y me abrió los ojos, la que me alegró en la ciudad gris, la que me despertó sentimientos que creí que nunca iba a tener.. Acá frente a todos los que queremos quiero casarme con vos.. Ahora...
¿Ahora?
Mi cabeza tardó en procesar lo que me dijo, cuando caí en la cuenta de eso me puse emocional.
-Peter..¡¿Qué?!-lo miré desconcertada.
-Que te quiero, que lo vengo pensando hace mucho, y.. Estamos donde queremos con la gente que nos hace bien, ¿queres casarte ahora mismo? Algo chiquito, informal..-soltó todo acelerado.
Puse mi mano sobre su boca y asentí con la cabeza, lo abracé fuertemente.
Y así fue que sin caminar por una pasarela, sin necesidad de una iglesia, sin personas con mala vibra, y con flores de verano en mi pelo me casé, nos casamos frente a una fogata rodeados de nuestros amigos e hijos.
Peter me sorprendió porque sí compro anillos, sencillos pero hermosos, después de ponerme el mío me besó el dedo.
Yo hice lo mismo aún shockeada por la sorpresa, por lo que había acabado de hacer.
Nos besamos y todos lo celebraron, nos abrazaron, nos sacamos fotos y Peter me cargó entre sus brazos, me metió al lago junto a él, nuestros amigos a los gritos se rieron, nos aplaudieron.
-Te amo mi hippie con Osde-molesté a mi ahora esposo, se rió conmigo.
-Yo a vos mi La la land-cerré mis ojos y sentí el calor y su beso dulce, me aferré hacia él.

FIN

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