Capítulo 9

37 2 0
                                    


Salgo del baño luego de darme una larga ducha de agua caliente y en eso suena la puerta de mi habitación.

- Pasa.- Digo en voz alta y se asoma Dallas.

- Puedo? - Me pregunta y yo asiento con la cabeza.

Él toma asiento en la cama y yo lo miro fijamente.

- Lo siento. Es mi culpa que estés de ésta manera.- Me dice tristemente.

- No tuviste que haber reaccionado así y menos con él.- Le digo seriamente. - Me ayudó, se arriesgó de que tú te molestaras por eso, pero se preocupó más por mí y me llevó a un hospital.- La molestia se estaba apoderando de mi.

- Lo sé, lo siento. Me disculparé con él en cuanto pueda y respetaré la amistad de ustedes dos. - Me dice rascando su cuello.

- Dallas, en serio quiero disculparte, pero me siento muy triste por él. Yo...me duele mucho recordar la mirada de tristeza. - Le digo con mis ojos brillosos.

- Yo también la noté y me siento muy mal, lo admito. - Me dice respirando profundamente.

- Vas a llevarme ahora mismo a la cafetería en donde trabaja. - Le digo tomando un suéter de mi closet y me daba igual si estaba en pijama.

- Está bien, vamos. - Me dice sonriendo levemente y me acerco a abrazarlo.

- Eres un imbécil, lo sabes, no? - Le pregunto divertida.

- Si, lo sé.- Me dice riendo. - Por cierto, esa palabra te sale perfectamente. - Me mira con una ceja elevada.

- Lo mismo me dijo Tristan. - Le digo con una pequeña sonrisa y él suelta un suspiro.

- Te gusta, eh? - Me pregunta y abro mis ojos cómo platos.

- Qué!? Claro que no, de donde sacas esas cosas? - Le pregunto alterada y puedo sentir que mis mejillas se sonrojan. - Mejor vámonos ya. - Le digo rodando los ojos y tomo mi teléfono antes de salir de mi habitación.

Bajamos las escaleras poco a poco y mis tios, quiénes estaban en el sofá viendo televisión, nos miran.

- Vamos a salir por un momento.- Les dice Dallas sonriendo.

- Ya hablaron? - Nos pregunta mi tía emocionada y yo asiento con la cabeza.- Me alegra oír eso! Yo también merezco disculparme, no actué cómo una adulta. - Me dice apenada.

- Las personas se equivocan, está bien. - Le digo y ella me abraza fuertemente.

- Te quiero mucho, Callie. Jamás pienses que eres una carga para nosotros, porque no lo eres. - Me asegura.

- También te quiero, pero ya debemos irnos, Tía. - Le digo separándome de ella.

- No vuelvan tarde. - Nos dice mi tío sonriendo.

- No lo haremos, adiós. - Les digo apurada y salimos de la casa.

Subimos al auto y no podía parar la emoción que sentía por ver a Tristan.

Él me gusta?

No lo sé.

Pero sé que siento algo que pasa el límite de amistad. Algo que nunca he sentido y sin duda no me molesta. Él es tan difícil, pero al mismo tiempo parece un libro abierto. Es amable y muy gracioso. Siempre se las arreglaba para hacerme reír.

Cuando Dallas arrancó el auto, mi corazón comenzó a bailar dentro de mi pecho y yo no sabía cómo reaccionar. Quería abrazarlo y disculparme todas las veces que sean posibles, pero sé que no debería. No es mi culpa lo que pasó, pero siento que debo disculparme para sentirme tranquila.

El cielo en tu miradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora