CAPITULO 7

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Mark y yo salimos a caminar después de que el regresa del trabajo, vamos a comer en un restaurante que tiene una comida deliciosa, carne y toda clase de embutidos asados y servidos en un brasero de hierro pequeño que mantiene la comida caliente, me lleno hasta más no poder y la noche pasa tranquila, ambos estamos en silencio, pero no es en ese silencio incomodo, más bien es en aquellos momentos donde no necesitas decir nada. Cuando terminamos la cena Mark paga la cuenta y nos dirigimos al auto.

-         ¿Quieres hacer algo más?- me pregunta y su voz como siempre es mi tranquilizante para el alma.

-         No lo sé, yo ya estoy que reviento, siento que mi pantalón va a explotar, que propones hacer.- le respondo dándole a entender que no importa lo que diga aceptare de todas formas.

-         Quieres caminar un poco para bajar esa comida.

-         De acuerdo.- acepto y él me invita  a subir al auto.

Conduce por unos veinte minutos hasta llegar cerca del puente de Brooklyn y estaciona el auto frente a la hermosa vista de los rascacielos y viejos edificios alumbrados por la luz artificial, que hacen de Nueva York un hermoso cuadro para recordar.

-         Vamos.- me dice y lo sigo por el camino que lleva al inicio de la vía en el puente.

El viento sopla fuerte, por la temporada hace frió, me aprieto y acurruco contra Mark, quien me mira y me da un beso en la frente, para ser el está muy callado, algo raro hablando de Mark, caminamos por unos cuantos minutos hasta llegar a la mitad del puente y Mark se detiene.

-         Pasa algo, te veo muy callado hoy.- le suelto, porque su silencio me preocupa.

-         Siendo sincero, pasa mucho Sherry, no precisamente contigo pero hay algo que me tiene preocupado.

-         ¿Tiene que ver con el trabajo?- niega con la cabeza.

-         No, respóndeme algo, ya has visto un lugar en donde te puedas quedar me dijiste que querías mudarte, ¿has buscado un apartamento o algo?

-         La verdad no.- respondo de manera sincera.

-         Bien.- dice y asiente.

-         Aunque el plan sigue en marcha.- frunce su ceño y mira durante unos segundos al piso mientras se apoya en el barandal del puente.

-         Sherry...- calla un tiempo más.- se que acepte una vez tu propuesta.- me mira directamente a los ojos y lo veo acongojado.- pero tengo que prohibírtelo ahora.

Mi cerebro me manda una señal de alerta, acaricio su mano  y lo miro nuevamente, le doy una mirada consoladora y lo abrazo.

-         No me pasara nada.- hablo y él me abraza como si no quisiera dejarme ir.

-         Esto es serio Sherry.- su cuerpo se pone rígido.- no voy a estar aquí para siempre y temo que algo realmente malo te pase.

-         Porque lo dices.- retrocedo un poco y hago contacto visual.

-         Algo malo va a pasar lo presiento y no quiero dejarte sola.

-         No lo harás, Mark tu estas aquí conmigo, me puedes sentir y yo a ti, estamos a salvo.- hablo pero resuenan las palabras en mi mente, como si me lo estuviera diciendo más a mí que a él.

-         Temo que algo te pase, no puedo estar tranquilo pensando que pasas sola en casa, pudiendo ser que alguien irrumpa dentro y yo no pueda hacer nada.- recuerdo lo que ha pasado esta tarde, si Isaac entro sin problemas, cualquiera lo haría de nuevo.

Entiendo perfectamente que el peligro a vuelto, siempre ha estado ahí, pero ahora, es más notorio que todo se está yendo a la basura, Mark jamás me habría pedido que no me fuera porque respeta mi espacio, así como yo hago con el suyo, ambos ya somos grandes, Mark tiene mucha más experiencia que yo e incluso sabe más sabre el tema de porque yo tengo que estar siempre cuidándome la espalda, trato de no tomar mucho en cuenta sus palabras y mantenerme tranquila, pero ya desde el primer día en el que volví a tener las pesadillas me planteé en la cabeza que no pasaría nada si me quedo con Mark o no.

-         Estarás mas conforme si decido quedarme en casa.

-         Me darías un gran alivio.- me da una falsa sonrisa.

-         Pues entonces me quedare.-si así el se siente mejor lo acepto.- te parece si trabajo de ahora en adelante hasta las cuatro.

-         Veo que no soy el único preocupado por la situación.- sonríe y la verdad es que tiene toda la razón, una cosa es que mis pesadillas me asusten, pero ahora es un problema real y esa inseguridad no me la quita nadie.

-         No mentiré, he sentido como si cosas raras sucedieran, tampoco me siento sumamente tranquila, será lo mejor para ambos.

-        ¿Quieres algo para tomar?.- pregunta cambiando de tema, lo prefiero así y le sigo la corriente.

-         Agua estaría bien.- me abraza por el hombro y caminamos de regreso.

-         Porque no nos tomamos la noche y vamos al cine, te parece.

-         Eso estaría genial.

Al regresar al auto ninguno de los dos vuelve a hablar del tema, nos dedicamos a conversar de cosas triviales y finalmente terminamos en la línea de espera para la función, hablando de lo que hemos hecho en el día, le cuento todo evadiendo la parte en que Isaac ha entrado a casa, vemos la película echando risas, llantos y disgusto y cuando llegamos a casa ambos estamos agotados, nos preparamos para ir a la cama, nos despedimos y no dejo de pensar en la conversación, es inquietante y me ofusco, el sueño me va cubriendo, pero tengo terror, se que esta noche volverá a ser como las ultimas, las pesadillas vuelven a mí y así paso otra noche en vela. 

(Hola chic@s se que este capitulo es corto, pero de ahora en adelante serán así, comencé clases nuevamente y mi tiempo se acorta un montón, espero estén disfrutando, comente, voten y mil gracias por su apoyo)

SHOT THE GUN (Disparo) CanceladaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora