NOX, sirius black ₁

Capitulo 39

—VAMOS A APLASTARLOS— DIJO CASSANDRA CUANDO se sentó al otro lado de Pandora durante el desayuno en la mañana del primer juego del nuevo trimestre

Calypso leía la sección de Música de "El profeta", que hablaba de la gira de The Moon Sisters, pero específicamente de su acto de apertura, White Rabbit, el nuevo grupo que estaba dando todo.

Había una foto de la banda en la página que estaba leyendo: cada miembro se sonreía con sus instrumentos en la mano.

Calypso dobló la página en su mano y se giró hacia Cassandra.

—Todo el equipo ha estado trabajando demasiado para que perdamos

—Estoy segura de que los Slytherin estarán diciendo lo mismo— opinó Dorcas

—Vamos a aplastarlos— repitió Cassandra

—Las apoyaremos— dijo Pandora. Calypso no había mencionado haber visto a Pandora y Xenophilius en lo que parecía ser una cita el día de San Valentín, pero no pensaba mencionarlo hasta que Pandora lo hiciera primero —Todos han estado haciendo sus apuestas hoy y me enojaré un poco si pierdo esos cinco galeones que aposté por ustedes

—Yo aposté veinte— Dorcas se encogió de hombros —Hoy estaba de humor para apostar, así que traten de no perder

—No vamos a perder— contestó Calypso, mirando a las tres chicas —Hemos practicado mucho y estamos listas— Calypso se levantó de su asiento

—¿Adónde vas?— pregunto Dorcas

—Necesito escribir una carta— le hizo un gesto a su amiga con el papel doblado que tenía en la mano antes de caminar hacia la salida del Gran Comedor

Escuchó pasos detrás de ella y giro la cabeza para encontrase a Sirius ya caminando a su lado.

—¡Oh hola!

—Hola, ¿A donde vas?— pregunto Sirius

—Aerin y su banda estaban en el Profeta, ¡Mira!— desdobló la página y se la mostró a su mejor amigo —Iba de camino a la sala común para escribirle y felicitarlo

—Oh...— Calypso notó el ceño fruncido en el rostro de Sirius —Cal, ¿Puedo preguntarte algo?

—Por supuesto

—¿Aún sientes algo por Aerin?

Calypso parpadeó un par de veces. Sirius nunca le hizo muchas preguntas sobre la relación de ella y Aerin, ni lo mencionó en absoluto desde que se enteró de que rompieron.

—Ummm, bueno...— Calypso se rascó la nuca y dejó de caminar. Sirius la miró pacientemente, esperando su respuesta —Realmente me gustó Aerin, pero... Me dijo que me amaba antes de que rompiéramos y después de que el impacto se disipara, mi estómago dio un vuelco y me di cuenta de que aunque me preocupo mucho por Aerin, no estaba enamorada de él.

La culpa la abrumaba más de lo que le gustaría admitir. Aerin era un gran chico y ciertamente era mucho mejor que Barnabas y Sebastian, pero ella no podía obligarse a sí misma a amarlo.

—Entonces, supongo que la respuesta a tu pregunta es no. Ya no siento nada por él— contestó honestamente —Pero, quiero felicitarlo a él ya su banda por su éxito porque son realmente geniales

Calypso notó la forma en que los hombros de Sirius se relajaron y su sonrisa parecía ser de alivio. Su reacción la hizo sospechar, pero no le preguntó el por que tenía esa duda porque había una parte de ella que tenía miedo de saber la respuesta.

Sirius le deseó suerte en el juego y ambos continuaron su camino por separado.

Calypso le escribió una carta rápida a Aerin antes de que usara el resto de su tiempo a solas para estudiar para sus T.I.M.O.s y distraerse de los nervios que sentía al pensar en el juego. Ella no quería perder de nuevo.

Finalmente, bajó para cambiarse a su uniforme de Quidditch y se reunió con el resto del equipo. Hizo su discurso habitual antes de cada juego en el que les recordaba a todos qué podían trabajar excelente.

—Vamos a ganar. Puedo sentirlo— comento Mirabella cuando entraron al campo

—Yo también lo creo— dijo Calypso. Se puso el bate bajo el brazo cuando se acercó para estrechar la mano de Burke. El chico trató de aplastar sus dedos bajo su agarre, pero mantuvo la cara recta e inmóvil

El juego comenzó y Calypso se reía cuando escuchaba los comentarios de Lee Jordan. Mantuvo su mirada atenta en Mira y la vio dando vueltas por encima, manteniendo su vista en busca de la Snitch.

Calypso estaba jugando excepcionalmente bien ese día, al igual que el resto de su equipo. Eloise e Ignatus marcaron los primeros puntos del juego; Cassandra se aseguró de bloquear todas las Quaffles que pudo presumiendo con los trucos adicionales en los que había pasado toda la práctica trabajando; y Calen también había mejorado mucho.

—¡Parece que el Buscador de Ravenclaw ha visto la Snitch!— Jordan anunció después de aproximadamente una hora de juego

Calypso balanceó su brazo y escuchó el satisfactorio golpe de su bate al entrar en contacto con la Bludger. Envió la Bludger en dirección a Regulus, quien la esquivó hábilmente y voló hacia la Snitch dorada detrás de Mirabella.

—¡BELLA! ¡BELLA! ¡BELLA!— la multitud aplaudió y el estómago de Calypso se revolvió mientras veía cómo se desarrollaba la carrera entre los dos Buscadores

Regulus y Mirabella estaban cuello a cuello con los brazos extendidos y miradas de fiera determinación en sus rostros. Regulus avanzó poco a poco frente a la chica, con el ceño fruncido de concentración, pero luego todo se convirtió en un caos.

Los dos Buscadores parecieron dar bandazos hacia adelante a la vez, balanceando los brazos uno encima del otro antes de que sus escobas chocaran entre sí. Hubo un ruido colectivo de la audiencia cuando los cuerpos de Regulus y Mirabella caían de sus escobas.

Calypso voló hacia abajo cuando Bella y Regulus finalmente aterrizaron en un lío de extremidades extendidas una sobre la otra. Regulus miró al cielo, aparentemente aturdido por el impacto, y Mirabella lo apartó de ella. Miró a Calypso con una expresión de orgullo en su rostro antes de levantar la mano en el aire, sosteniendo la Snitch en su puño.

La multitud se volvió loca y el resto del equipo corrió hacia Mirabella, que estaba saltando arriba y abajo emocionada. Calypso le dio un abrazo a Bella y escuchó la risa de incredulidad de la chica.

—¡Eso fue brillante!— Antoine vitoreó

—¡Excelente atrapada!— exclamo Cassandra, chocando los cinco con Bella

Mirabella les dio las gracias, un toque de rosa inundaba sus mejillas. Miró por encima del hombro y vio a Regulus sentado en el suelo con la cabeza entre las manos mientras el resto del equipo de Slytherin marchaba fuera del campo detrás de Burke.

Calypso observó con curiosidad mientras la otra chica se acercaba al menor de los Black, le decía algo que Calypso no podía oírle y le tendía la mano para que la tomara. Regulus levantó la cabeza y puso los ojos en blanco ante su mano extendida antes de levantarse y seguir a su equipo fuera de la cancha.