A solo un recuerdo

Alerta separación

(***)

Mientras la profesora charlaba, Alma aprovecho para abrir un tema pendiente, -Ya hablé con mis padres... puedo hacer la despedida en casa.

-Demás- agrego contenta.

La atención de Jess ya estaba en nuestro grupo, -¿Querés que yo les diga a los de la clase?.

Jess lo decía amablemente, pero se notaba que sus intenciones eran hablar ella y que todos la vieran como responsable del acto.

Mire enseguida a Alma y nuestras miradas se encontraron transmitiendo la misma desconfianza al escuchar ese comentario.

-No, se los voy a decir yo. Pero ahora no...- le responde Alma con cero ganas.

Alma es tímida, al igual que yo, solo que simplemente ya no me importaba lo que opinaran los de mi clase.

En realidad los chicos de la clasenunca actuaban, siempre seguían la corriente en las decisiones que generalmente las tomaban las chicas y nunca decían nada feo sobre otra persona en público.

El problema estaba en que las chicas de la clase tenían la naturaleza de siempre ser las que tomaran decisiones, y para rebajar a las otras era natural que te juzgaran con su grupo.

Solamente había dos grupos de chicas, las correctas que contaban con 3 chicas lideradas por otra que se llamaba Camila Cole... y luego nuestro grupo, las "rebeldes", "ignorantes", "locas", etc. todo nombres provenientes del otro grupo para nombrar el nuestro... pero nosotras nos pusimos de grupo de WhatsApp; el trío tóxico 💕.

Había demasiadas diferencias, por suerte, entre grupo y grupo. Ellas tenían padres cuyos nombres aparecían por doquier y cuyo dinero posiblemente fuese el quíntuple que las de mi grupo.

Probablemente gracias a esto tenían esa actitud de ser propietarias de la razón sobre todo y todos.

La influencia como resultado del éxito de los padres en profesores y directores del liceo les daba la capacidad y la confianza para opinar y tomar decisiones en problemas de la clase, fuesen mínimos o no, tuyos o de ellas.

En resumen, me encontraba en el nido de unas nenas de papas ricachones.

Odiaba a Camila desde el primer año el cual llegue, ya que la pude conocer bien al pasar todo un año sentada a su lado, era manipuladora y competitiva. La peor combinación.

Siempre se esforzaba al máximo por ser la chica 12, mientras que yo con un 8 estaba contenta.

Opinar en la clase tenía sus riesgos, había dos posibilidades... La primera que seas atacada por Camila si no le agrada la idea y la segunda, es que si le gusta tu idea te la termine robando, siempre quedando bien.

Tenía ese poder de dejarte totalmente desubicada verbalmente, sin la necesidad de insultarte o alzar la voz. Simplemente te hablaba con superioridad y amable, todo lo que decía lo afirmaba con confianza.

Al finalizar una discusión con ella ya estabas boca abierta haciendo su idea, por el hecho de que tu idea parecía ridícula al lado de la de ella. Y repito, la influencia de ella era muy grande por lo tanto la clase siempre la seguía.

Por esta razón a veces era difícil opinar en clase y a Alma le costaba un poco.

Y ahí es cuando escucho alzar la voz de Camila desde el primer asiento al lado del profesor, -Escuchentodos, nos corren los días libres que no nos pusieron en todo el año para los últimos días y son 3... Por lo tanto, terminamos mañana las clases.

Quede en shock, era demasiado rápido. No me había preparado para dejar a mis amigas...

-Entonces solo nos queda mañana, un solo día.- aporta indignada Jess. Un aporteinnecesariamente grupal.

Y surge una voz de los chicos del fondo como consecuencia, -¡Ah! Pero es que vos sos Einstein.

Los chicos me caen bien porque son los que le sacaban lo aburrido a los días con chistes y bromas.

-Si Jess...- le contesta Camila que seguía parada por dar el anuncio anterior, y su mirada recorre con lentitud a Jess de abajo hacia arriba, termina y se vuelve a su charla con la profesora.

Luego de eso todos empezamos a hablar en sus grupos de amigos.

-Como mira a las personas...-, comienza Alma a comentar entre nosotras opinando sobre el show de Camila y su mirada seguía hacia ella con cara de disgusto.

Se me escapo una sonrisa, ya que siempre teníamos los mismos pensamientos e ideas sobre las mismas personas y muchas veces al mismo tiempo.

-No nos vamos a ver más en dos días-, dije no contando este todavía.

Jess se apresuró a rezongarme, -¡Ay ta! Hay que disfrutar lo que queda...

Y Alma continua, - vos nos querésdejar, ¿verdad? Vos nos dejas y yo te mato...

Yo solo las miraba con una sonrisa, complacida de que se había puesto a la defensiva frente a la idea de separarnos.