Capítulo 07

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Por cuestiones del destino, a Max le tocó un asiento libre que estaba del lado izquierdo de April.

En cuanto me hubo sentado, tomó su primera pieza de pollo, el cual resultó ser una pechuga en este caso. A April también le tocó una pechuga de pollo.

Por parte de Matt, a él le tocó un muslo. Igual Jacob y Freddie.

Max notó que su amigo hacía una mueca en su rostro, intuyendo que tal vez hubiera deseado comer una pechuga de pollo, o tal vez que le hubiera tocado alguna pieza distinta.

—No eres tan fan del muslo, ¿verdad Freddie? —cuestionó Max.

Freddie miró al joven Greevey y asintió con la cabeza a modo de respuesta.

—A mí me gusta más la pechuga —reveló Freddie.

—De haberlo sabido antes. Te intercambio mi pieza de pollo por el tuyo —habló Matt en esta ocasión, intercambiando su pechuga de pollo por el muslo de Freddie.

Ahora sí, todos estaban completamente a gusto con sus respectivas piezas de pollo. Por esa razón es que la mesa de la cocina estaba sumergida en un silencio.

En cuanto todos hubieron terminado sus respectivas piezas, Freddie comenzó a entablar una conversación, en lo que reposaban el pollo frito que habían comido.

—Disculpe la molestia señora Sarah. ¿Usted ya conocía Funny Landy? —preguntó Freddie.

—Siendo sincera no. Lo que me hizo conocerlo fue gracias a una amiga de aquí, quién me contó maravillas del lugar. Me pareció interesante, y fui para comprobar si era verdad lo que ella me había dicho. Eso pasó durante la primera semana en que llegamos aquí, Chick Hall.

» Desde ese momento en que entré por primera vez, no he podido olvidarme de ese sitio —terminó de responder Sarah.

Eso dejó sorprendido a Freddie. Los demás estaban sorprendidos también.

—Nada mal. Max, la señora Sarah es genial. No a cualquier adulto le gustaría un lugar que es para niños y adolescentes. Normalmente van ahí los adultos a la fuerza por sus hijos u otro asunto, pero por gusto no —le dijo Freddie a Max.

Tras escuchar sobre Funny Landy, Max comenzó a tener ganas de entrar ahí. Ver con sus propios ojos el interior de ese sitio.

—Oye Sarah, ¿a qué crees que se deba la alta demanda por ese sitio? —cuestionó Max intrigado al respecto.

La señora Sarah se puso a meditar al respecto, hasta que pronto pudo recordar el por qué.

—Se me olvidó mencionar que Funny Landy ha sido sede de fiestas desde su inauguración. Creo según mi amiga de aquí, Funny Landy fue edificado a principios del nuevo milenio, alrededor de 2003.

» El caso es que para esas fiestas usaban la participación de payasos, o gente capaz de dar espectáculo, hasta el año 2010, cuando introdujeron tres personajes, cuyas imágenes serían usadas a modo de botargas para las fiestas dentro de ese sitio.

Esos personajes son lo que han provocado la alta demanda en el público, en especial con los niños —terminó de explicar la madrastra de Max.

Cuando escuchó claramente las palabras de Sarah, el joven Greevey volvió a recordar aquel mural del teatro abandonado de Funny Landy. Aquel trío de personajes felices. ¿Se habrá referido a aquellos su madrastra? No lo pudo pensar con toda libertad debido a que volvió a ver ese desfile de imágenes horripilantes dentro de su cabeza

April notó que Max se estaba estremeciendo por tal desfile de imágenes, pero no le tomó mucha importancia, cambiando la dirección de su mirada.

Al parecer el resto de los amigos de Max tampoco se percataron de lo que había pasado con el joven Greevey.

La AbominaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora