Capítulo 19: Tragedia

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Este es el penúltimo capítulo, así que espero que lo disfruten

Mi advertencia es que vayan buscando un lugar para poder gritar y llorar porque se viene

La tragedia


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"El azar tiene muy mala leche, y muchas ganas de broma."

Arturo Pérez Reverte

Tragedia.

Desarrolla temas centrados en el sufrimiento, la muerte y las peripecias dolorosas de la vida humana, con un final funesto y que mueve a la compasión o al espanto .

La "tragedia" es una palabra extraña y particular que describe varios eventos infortunados, muchos de los eventos no tienen ninguna relación excepto lo que la une a esa palabra.

Puedes pensar en muchas maneras diferentes como ejemplo de esa palabra.

Lastimosamente este evento no es la excepción.

Dos autos iban recorriendo la carretera a una velocidad impresionante, ninguno disminuía la velocidad.

El criminal gruñía molesto al verse perseguido por el detective que hace poco había golpeado, mientras Shiho miraba preocupada desde la ventana como el auto donde iban golpeaba el de sus amigos, el cual maneja su esposo.

—Dile a tú estúpido esposo que se detenga y tu saldrás a salvo. —le dijo Tanaka.

—¿Y como quieres que haga eso, haber? —le respondió Shiho con el ceño fruncido sin abandonar sus manos de su barriga, en señal de protección.

—Tks. —fue lo único que se escuchó del hombre, antes de golpear de nuevo el carro que lo perseguía.

El auto donde manejaba Shinichi retrocedió por el golpe, dándole oportunidad al criminal de cambiar de vía. Adentrándose a una carretera poco transcurrida pero llena de curvas.

Shiho Miyano priorizó la vida de su bebé, mientras Shinichi Kudo la de su esposa e hijo, entonces… ¿acaso hicieron algo malo al hacer eso? Priorizar la vida de alguien más antes que la suya, no es realmente algo malo, ¿o si?

Furioso el oji-azul aceleró llegando hasta ese auto, sin más se adelantó.

Definitivamente lo detendré. —seguro era su único pensamiento.

El criminal estaba en confusión, aún así no desistió y aceleró aún más, tratando de llevarse consigo el otro auto. Mientras el detective bajaba la velocidad.

Si chocaba y frenaba, tal vez podría detener el auto.

Pero las cosas no podrían salir tan bien, Tanaka aceleró mientras Shinichi desviaba el auto de lado, tratando de detenerlo.

La pobre mujer embarazada tenía los nervios de punta al ver cómo esos dos hombres ponían todo su esfuerzo en tumbar al otro. 

Shiho miró preocupada a su esposo desde la ventana, este rápidamente le envió una sonrisa de autosuficiencia, poniéndola nerviosa.

El criminal furioso retrocedió firmemente y constantemente, Shinichi con terror acomodó el auto y lo empezó a perseguir.

Para su desgracia el piloto del otro automóvil mantenía una sonrisa de psicópata que ponía nerviosa a Shiho, esta acariciaba su estómago en busca de tranquilizarse sin mucho éxito.

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