41. Huida

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Narra Hoseok

Las cosas estaban muy locas en mi casa, mamá le había dicho a papá sobre mi decisión de cambiar de carrera y dejar todo lo que tenía que ver con la empresa en el desayuno y subió a mi habitación muy enojado. Discutimos mucho y terminé huyendo de casa en pijama y sin nada mío.

A penas pude ponerme los zapatos ignorando el dolor de mis manos y los gritos de mi padre detrás de mí. El día estaba frío y no tenía chaqueta, mi pijama era de tela ligera que no me brindaba calor. Dejé mi celular en casa, el poco dinero que tenía y ahora estaba deambulando por las calles mientras las personas me veían mal.

No las culpo, mi cara seguía hinchada y mis manos estaban vendadas, estaba en pijama muriendo de frío. También pensaría que algún loco se escapó del manicomio. Seguí caminando para entrar en calor y en serio estaba empeorando todo.

El labio empezó a dolerme, estaba con hambre y el frío me estaba haciendo la vida imposible. Quería regresar a casa, pero no lo haría. No quería seguir allí, aunque eso me costara terminar toda relación con mis padres. Tal vez debería llamar a mi hermana para que me ayudara a regresar a Australia y así librarme de un gran peso en mi espalda.

Pero eso significaba separarme de Yoongi y tampoco quería eso. Lo amaba y quería seguir con él aunque estuviese enojado en este momento. Mierda, las cosas se había complicado desde que Andrew llegó y ahora lo estaba odiando, pero tengo que darle las gracias por abrirme los ojos.

Si él no hubiese llegado yo seguiría con la idea de estudiar contabilidad, tomar mi parte de la herencia, mi puesto en la empresa y vivir con aquel miedo de que alguien de la competencia quisiera acabar conmigo por seguir expandiéndome en todas partes.

Y para ser sincero nunca me gustó este mundo de empresas, negocios, trajes caros e inversionistas. Solo quería seguir danza, ponerme una academia de música y bailar hasta que mis huesos no pudieran más. Quería algo tranquilo en mi vida, solo eso, nada más.

Sin darme cuenta había caminado mucho y me detuve en una cabina para llamar a alguien luego de pedirle algo de cambio a un guardia. Necesitaba un poco de ayuda y aunque todo estaba loco no me dejaría arrastrar por mi papá. Esperé solo un poco y luego la línea se conectó.

-Hola, soy Hoseok. Necesito tu ayuda, Nam.

(...)

Cuando Nam llegó al lugar en el que estaba trajo un abrigo suyo, una pastilla y algo de comida. Le hubiese besado si no me doliera el labio. Tuve que conversarle lo que pasó en mi casa y la razón de mi huida, él me escuchó sin decir nada y lo agradecí un montón. Tampoco preguntó nada y se ofreció a dejarme estar unos días en su casa.

Tuve que rechazar su ayuda y solo le pedí que me prestara su celular y que me acompañara por hoy porque en serio necesitaba a alguien, no se negó y se lo agradecí. Cuando tuve su celular en mis manos y ya había comido y tomado la pastilla marqué el número de mi hermana.

-Hola, Jiwoo noona. Soy Hoseok.

-Oh, hola. ¿Cambiaste de número?

-No, es el celular de un amigo. Te llamaba para pedirte ayuda. Sé que esto va a sonar loco y que tal vez te enojes, pero hui de casa y no sé qué hacer.

-¿De qué estás hablando, Hoseok? ¿Qué pasó?- le conté lo que pasó, todo. Sobre Yoongi y papá, luego de mi cambio de idea y la gran pelea de hoy.

-Entonces salí de casa. Sabes que siempre he sido un miedoso y lo que más quiero es mi tranquilidad.

-Te entiendo, yo vine a este país huyendo de mis responsabilidades. Papá estuvo enojado conmigo hasta que naciste tú. No puedo creer que ya te haya dado esa charla, pensé que se iba a demorar más porque sabía que eras alguien pacifista.

-Pensé que no sabías esto. Pero ahora puedes entenderme mejor. Quiero estudiar danza.

-Puedo entenderte, Hobi. Pero no puedo hacer nada, papá se enojará conmigo si te ayudo de alguna manera a salir de casa. Lo mejor sería que vuelvas y te mantengas seguro. Hablaré con él y trataré de convencerlo, tú haz lo mismo.

-Pensé que me ayudarías, noona. No puedo creer que me hagas esto.

-Lo que puedo hacer es recibirte en mi casa para que estudies. Pero sería ganarme el odio de papá por ayudarte con esto. Si quieres venir puedes hacerlo, va a ser más fácil hacer esto que llegar a algún acuerdo.

-Gracias, intentaré resolver esto primero antes de decirte algo. Lo siento si te causo problemas- cuelgo la llamada y Namjoon se acerca para abrazarme.

-Todo va a estar bien. Vamos a mi casa y allí te relajas un poco y piensas las alternativas que tienes, ¿sí?

Asiento y luego nos subimos en un taxi. Prometo que recompensaré a Namjoon por todo lo que está haciendo por mí. Estaba muy agradecido y ahora sé que puedo confiar en él. Si él necesita ayuda no me importaría hacer cualquier cosa por devolverle todo lo que está haciendo por mí.

(...)

Cuando la noche llegó Namjoon me llevó al hospital para que me sacaran los puntos del labio en el carro de su papá y luego fuimos a comer algo. Estaba seguro que papá ya debía estar buscándome y Yoongi por igual.

-Voy a pagarte el triple por esto, Nam.

-No es nada. Eres como mi hermano y jamás dejaría que pasaras solo por una situación así.

-Gracias- quiero llorar lo que no he llorado este tiempo y lo hago. Solo dejo salir las lágrimas mientras Nam conduce en silencio por las amplias vías hasta su casa. Ya era muy tarde y solo quería un lugar cómodo para dormir.

-Hemos llegado- Namjoon estaciona el auto y bajamos en silencio. Cuando estuvimos en su cuarto me ofreció su cama pero me negué enseguida y me adueñé de la colcha en el piso. No quería causarle más molestias de las que ya le había dado. Estaban tan cansando que solo me despedí d Nam y me dormí enseguida.

Mañana tendría tiempo de enfriar el infierno que se estaba avecinando en mi vida. Estaba teniendo un fin de semana agitado y todo se pondría peor cuando deba volver a clases una vez sanase y no lo hiciera. Solo en ese momento papá se daría cuenta de que hablaba en serio.

El covid no me mató, me alegro por eso, pensé que si lo haría, estaba muy mal, pero por suerte mi sistema inmunológico pudo con el virus

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El covid no me mató, me alegro por eso, pensé que si lo haría, estaba muy mal, pero por suerte mi sistema inmunológico pudo con el virus. 🤧
Ahora creo que puedo decir que estoy sana, creo que ha pasado un mes y un poco más, aunque no he recuperado el olor y el sabor.

¿Eso es malo?

Da igual, ya no me siento morir como los primeros días.

Espero les guste la historia, comenten y voten, por favor.

¿Destino o casualidad? [YOONSEOK/SOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora