Capítulo 32

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Había anochecido y aquellos amigos que se acababan de reencontrar no dejaban de conversar sobre todo lo que pasaron para por fin encontrar a su príncipe.

Mi pueblo se encuentra a salvo... - concluye el pequeño príncipe de cabellos verdes apretando su mano contra su pecho mientras sus ojos se humedecían y una sonrisa iluminaba su rostro.

El príncipe de dragones observaba desde el otro lado de la habitación la conversación que tenía Izuku con aquellos que venían del Reino Natura; intrigado y con una mirada demasiado seria, hasta que su mirada se encontraba con aquellos ojos de color esmeralda lo que causaba una leve sonrisa y una calidez en su mirar, siendo respondido con una sonrisa de su pequeño pecoso; el pelirrojo de dragones observaba a su amigo hasta que se animó a hablarle - Bakugo ¿Qué haremos ahora? - cuestiona por la reciente llegada de aquellos cuatro de otros reinos.

El silencio invadió el ambiente entre ambos hasta que las criadas avisaron que la cena estaba lista y el comedor real del Reino de Dragones esperaba la compañía de aquellos viajeros.

Tokoyami junto con el príncipe del Reino de Fuego y Hielo se encontraban el el balcón de aquella habitación.

El joven de plumas decidió acompañar a aquel príncipe, que estaba sumergido en pensamientos y aunque estuviera en un total silencio el sufrimiento que pasaba era percibido por él.

Príncipe... creo que... si se lo comentara al joven Midoriya... él comprendería cada palabra que usted le dijera - comenta, al mismo tiempo Todoroki voltea a verlo a los ojos, y una pequeña esperanza que duró unos segundos hasta que nuevamente todas sus voces internas comenzaron a atacarlo haciendo que nuevamente todo se desmoronara.

Las puertas que daban paso al balcón fueron abiertas por el pelicenizo que sólo observó detenidamente a ambos - La cena está lista - dice el príncipe de dragones mientras se retira rumbo al comedor real.

El comedor era inmensamente grande, la mesa completamente llena de comida que no se pudieran imaginar; todos se sentaron en la gran mesa, dando por comenzada la cena, Bakugo sentado al extremo de la mesa y a su lado derecho a su dulce Izuku; la hechicera disfrutaba muchísimo de toda la comida que había haciendo caras graciosas mientras Iida le pedía que no devorara todo y que guardara modales, mientras Izuku reía por las expresiones de sus amigos, justo al frente estaba Shoto observando cada facción del pequeño peliverde soltando un suspiro para luego mirar su plato de comida que estaba vacío.

Bakugo notaba lo que el príncipe bicolores hacía, y comenzó a sentirse algo irritado por ello, hasta que Kirishima le da unas señales a su príncipe para que diga algo respecto a lo que pasaría mañana.

El pelicenizo tomó la mano del pequeño ojiesmeralda haciendo que este le devolviera la mirada y como si pudiesen entenderse sobre lo que hablarían en ese instante, siento notado por todos haciendo que la mesa se tornara de silencio.

Nos iremos mañana - dice el ojirubí con decisión, los viajeros se miraron entre sí, necesitaban más que un aviso.

Buscaremos los fragmentos de la espada sagrada - enfatiza el príncipe pelicenizo.

¿La espada sagrada? - cuestiona en voz baja Tokoyami que estaba sentado al lado de Todoroki que también estaba sorprendido por aquella declaración. 

Aquella espada legendaria que sólo se hablaba de ella en aquellas leyendas que traspasan los años.

De ser así... ¿Cómo piensa conseguirla? - pregunta Tokoyami.

Según tengo entendido... los fragmentos de esta se encuentran en cada reino - comenta el caballero de cabellos azules. 

De hecho sí, según lo que cuenta la leyenda pues... es así - dice el pelirrojo mientras pone su mano en su mentón.

Te Encontré [Katsudeku] [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora