𝑨𝒑𝒐𝒍𝒐||BarcaGamer

No quiero esperar otra vida para tenerte

 Anisa Navarro:

Y tal como pensamos que pasaría paso a la mañana siguiente de aquel encuentro fuimos simples extraños con una inmensa despedida por nuestros cuerpos, a pesar de amanecer con sus brazos rodeando mi cintura no fue hasta que abrimos los dos los ojos que nos dimos cuenta del que debia pasar ahora.

Seguir como si nada.

Me separe de sus brazos y el frio de aquella habitación golpeo mi desnuda espalda, tenia un dolor en mi cadera bastante notorio pues las embestidas que ambos dimos no fueron muy románticas que digamos pero a pesar de aquel dolor en mi cadera en silencio me vesti y con una mirada de despedida, di media vuelta y sali de aquella habitacion para regresar a la mia.

Al llegar no pude evitar sentir un gran dolor en mi pecho, pues aquel sentimiento de vació se apoderaba de mí, me tire en mi cama boca arriba viendo aquel techo blanco pensando todo y en nada al mismo tiempo y antes de que mis lagrimas rodaran por mis ojos el teléfono del hotel sono.

"¿Que hice?"

Pense antes de contestar.

-Bueno.- dije al poner el teléfono en mi oreja.

-El señor Misael pidió una alarma para hoy, es la boda que tengan buen dia.- y sin mas colgaron.

Una pequeña sonrisa salio de mis labios pues me sentía feliz de que por fin mis amigos se fueran a casar, me pare de la cama y me meti a bañar sabia que tardaría en arreglarme y la ceremonia era a las 3 asi que necesitaba apurarme.

Me bañe y puse unos shorts de mezclilla y una camisa cualquiera para bajar a desayunar, en el restaurante de aquel hotel me encontré a Juan y Ari asi que con una gran sonrisa me acerque a saludarlos.

-¿Que te vas a poner hoy?- dijo la castaña después de darme un abrazo.

-Un vestido verde esmeralda.- dije con una sonrisa.

-Te vas a ver hermosa.- dijo de lo mas alegre.

-Gracias Ari.- dije y sin mas me fui a otra mesa a desayunar.

Y realmente porque no quería estar de mal tercio en una pareja tan linda como ellos, comencé a comer hasta que aquel castaño alto se acerco y con una sonrisa me saludo.

-Hola Sixx.- dijo.

Tenia tiempo que no me llamaba asi, con una sonrisa le respondí.

-Hola Ilan.- dije.

Ambos desayunamos juntos y en lo que nos poníamos al dia de varias cosas que habian pasado desde que me había mudado salio el tema de que iba a irme un par de dias a Monterrey con ellos, realmente eso lo había aceptado antes de si quiera imaginarme pasar una ncohe con Diego y si antes estaba nerviosa de hacer eso ahora lo estaba mas.

-Estoy seguro que a Leo y Lia les gustara verte mucho.- dijo alegre mi mejor amigo.

Bueno hay que ser sinceros ver a aquellos dos felinos que sin duda habían robado mi corazón desde que los vi por primera vez era una buena razón para al menos pasar tres dias en aquella casa.

-Ademas conocerás la nueva casa.- si intentaba convencerme.

-Bueno en eso tienes razon.- dije antes de comer un ultimo pedazo de fresa en la boca.

-Azul y Roberto hacen muy linda pareja.- dijo Hasvik de la nada.

Por un momento gire mi cuerpo para ver aquella pareja y si realmente se veían bastante felices mientras platicaban pero antes de que mi cuerpo y mirada volviera a como estaban hacia unos segundos sus ojos Hazel chocaron con los míos, el apenas iba entrando al restaurante asi que fue algo que realmente no podía evitar pues la mesa en la que estaban aquella pareja estaba casi cerca a la puerta de madera.