Eres mi Persona 🖤

18. Asunto Familiar.

Gulf asintió, sabía lo que implicaba continuar con esto, lo aceptaba. Lo necesitaba y a estas alturas no podía detenerse, no desde que la boca de Mew había rodeado su miembro.

Mew empezó a mover sus caderas sobre las suyas en una imitación de lo que vendría si lo penetraba. Se había sentido intimidado por el tamaño de Mew, nunca habían estado tan desnudos como ahora, y no solo el cuerpo, tan vulnerables como podrían estarlo en este momento.

La boca de Mew volvió a su cuello y empezó a lamerlo mientras continuaba meciendo sus caderas sobre las suyas. Fue bajando sus manos por su costado hasta llegar a una de sus piernas y la levantó para acodarla sobre su cintura, hizo lo mismo con la otra, por instinto cruzo sus tobilllos sobre su espalda y movió su cadera siguiendo los mismos movimientos de Mew.

Justo cuando creía que no podía soportalo mas sintió dos dedos sondear su entrada, un gemido escapo de sus labios cerca de la oreja de Mew. - Ahhh Mew... -

- Siii... Mi nombre se escucha tan bien saliendo de tu boca en este momento. Dilo de nuevo. - movió sus dedos para invadir su entrada lo que provocó no solo que dijera su nombre si no que lo gimiera con necesidad.

- Mew~~~

- Mirame a los ojos. - y lo que vio lo dejó paralizado en el instante. Había amor en esa mirada, mezclada con lujuria y placer.

- Ahhhhhh ... - estaba tan perdido en sus ojos que no fue hasta que sintió un dolor punzante que noto que estaba siendo penetrado por el miembro de Mew. Intentó cerrar los ojos para calmar su mente.

- No, mirame. Gulf... Ahhh... - al parecer Mew también estaba pasando por algo, por la forma que dijo su nombre. Lo miró nuevamente y su confianza volvió, sabía que Mew lo cuidaría.

Rodeó su cuello con sus brazos y dejó que la persona sobre él guiara todo. Mew entonces empezó a moverse y el dolor pronto fue olvidado por el placer inmenso, algo dentro fue tocado porque su cuerpo empezó a brivar, no pudo controlar su boca ni intentándolo.

- Ahhh Mew. -

- Siii tan apretado. - Mew entonces lo besó comiéndose todos sus gemidos. Aceleró sus movimientos llevandolo por una espiral de placer que nunca había sentido.

Sus bocas se separaron, Mew enterró su cara en su cuello y su respiración se volvió inestable. No pudo soportarlo más y el placer se volvió más intenso. Si eso era posible. Una mano envolvió su miembro y fue acariciado a la misma velocidad que los embistes de Mew. Hasta que el nombre de la persona que lo poseía salió de su boca y blancos chorros salían de su miembro hacia su estomago.

Sintió a Mew ponerse rígido y al gemir su nombre se vino con la misma intensidad.

Con respiraciones agitadas ambos cayeron rendidos en los brazos del otro. Pudo sentir que era limpiado, pero le habría importado menos de lo cansado que se sentía. Fue quedando dormido en los brazos de Mew.

El sol de la mañana lo despertó y un delicioso dolor en los lugares correctos. Gulf se estiró y recordó toda la noche anterior. Recordaba querer escapar para no ver a Mew con alguien más, recordó que lo siguió y lo llevó a una cabaña lejos de la casa principal y recordó se tocado y poseído por este magnifico hombre. Se sonrojó.

Quiso moverse para salir de este lugar antes de que alguien los viera, pero Mew lo atrajo de nuevo a sus brazos.

- ¿A dónde vas? - Dios nunca se habían quedado dormidos, Mew siempre salía antes del amanecer de su habitación asi que escuchar esa voz grave lo tenía deseando besarlo y algo más.

- Mew nos quedamos dormidos. - advirtió tratando de moverse.

- Por eso te agoté anoche, para que ninguno pudiera escapar. - su sonrojo se intensificó. - Te ves tan lindo, sonrojado, recién despierto, mío. Como si acabaras de hacer el amor. -