35. Pesadilla.

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Gulf estaba cansado, fue un parto doloroso, solo quería tener a su bebé en sus brazos, ansiaba conocer a su hijo y de Mew ¿Donde estaba Mew?.

Unos brazos le arrebataron a su bebé antes de siquiera poder verlo. - No te preocupes pequeño, no dejaré que te lleven de mi lado, no volverán a quitarme esto de nuevo.-

- ¿Que...? ¿Quién es? - Gulf estaba con fundido, cansado y solo quería a su bebé.

- ¿No reconoces a tu tío? También estuve cuando tu naciste muchacho y tu madre no me dejó verte, no sabía de la existencia de mi propio hijo hasta que ya era demasiado tarde, pero este bebé... El si será un digno susesor de mi fortuna. - La voz se sentía como un martillo en su cráneo, quería a su bebé ¿Quién se atrevía a interponerse? Y ¿Por qué Mew lo permitía?

- Mew... - Sentía la boca seca y apenas podía pronunciar una palabra.

- No te esfuerces, ese hombre ya no esta aquí, tu eres mio ahora y tu bebé también sera mío. - la risa que resonaba de esta persona... Era conocida... ¡No puede ser! ¡Song! ¡No! ¡¿Mew?! ¿Dónde está? La risa seguía aumentando y su corazón latía desvocado.

Esto no puede estar pasando, veía la luz apagarse y la oscuridad lo reclamaba, mientras Song se llevaba a su bebé en brazos. - No por favor, no...- rogaba pero de nada servía, Song se alejaba cada vez más y cada vez era mas difícil respirar... Mew... Imagenes de su familia pasaban por su mente mientras era arrastrado a un sueño que no quería...

- No... No te vayas... No... -

- Gulf... ¡Gulf despierta! - la realidad se apoderó de él como un tsunami. Todo de un golpe y al abrir los ojos lo vio. Mew estaba cerca de él, a su lado en la gran cama que compartían, las lágrimas llegaron a sus ojos y no podía detenerlas.

- Shhhhh calma. - repetía Mew como un mantra mientras lo abrazaba y consolaba. Había sido un sueño realmente feo.

- Mi bebé... - automáticamente llevo sus manos a su vientre hinchado. El recuerdo de aquel hombre llevandose a su hijo fue tan vivido que temía por ello.

- Tranquilo amor... - Mew le proporcionaba el consuelo de sus brazos y su voz. Solo eso borraba la risa macabra de Song que se repetía en su mente después del sueño.

- Yo tuve una pesadilla... - le dijo a Mew mientras se dejaba abrazar.

- Lo se ¿Quieres hablar de ello? -

Gulf agitó su cabeza negando, no hablar era mejor, así se olvidaría de ello.

- Entiendo que has pasado por mucho debido a los recientes sucesos. Pero ya todo está bien. - Mew lo recostó en su pecho y una de sus manos acariciaba a su bebé en su vientre.

- Todo lo que ha pasado ha sido terrible. Tenía mucho miedo. -

- Te entiendo. - Con la otra mano acariciaba su cabeza.

- No puedo creer que Song... Haya intentado hacerte daño, y lo que le hizo a Alex ¡Por Dios! Alex es mi hermano, su propio hijo. -

- No creo que lo haya hecho a propósito, creo que yo era más bien su objetivo. -

- Y ahora le debo tu vida. - Gulf estaría siempre agradecido con su recién descubierto hermano mayor, había desenmascarado a Song y había protegido a Mew de un disparo.

- No, yo le debo tu vida. - Mew depositó un beso en su cuello. - Ahora descansa, debes estar agotado. - Lo abrazo más fuerte.

- Si, mañana iré al doctor a revisar al bebé. Te amo. - Con esas últimas palabras volvió a dormirse y no tuvo mas pesadillas.

***
A la mañana siguiente fueron recibidos por un sonriente Win, Brigth también estaba ahí, se comportaba como un tío emocionado, era divertido de ver, y mas después de todo lo que pasó, sabía que Brigth se sentía culpable por no estar ahí cuando paso lo de su tío y por mas que Gulf intentara decirle que no era su culpa, no escuchaba.

- Brigth ¡Sueltame! Te juro que si vuelves a tratarme como un invalido te voy a patear el... - Gulf exclamo a su mejor amigo antes de ser interrumpido por...

- Cariño el lenguaje... - Mew.

- Te juro que parecen dos niños pequeños. - Win comentaba sonriente, se notaba el amor que le tenía a su novio y que habían arreglado sus dudas desde la ultima vez que se vieron.

Esperaban al obstetra en una habitación y cuando este llego y observo a todos en la habitación, les pidió que se marcharaa excepto el padre, pero no pudieron disuadir a nadie.

- ¿Es su primer bebe? - preguntó a Gulf.

- Si. - respondió y mientras levantaba su bata y ponía un gel frío en su estomago, sus nervios aumentaron.

Mew lo notó y tomó su mano. - Todo estará bien. -

- Al parecer no es su primer bebe señor... - dijo el doctor.

- Mew, solamente Mew, y no es mi primer hijo, tengo otros dos, pero siempre parece como la primera vez. -

- Lo entiendo, bien veamos. - El doctor movía un aparato en su vientre y observaba el monitor, el ceño fruncido no presajeaba nada bueno.

- ¿Que pasa doctor? - pregunta Gulf.

- Nada es solo que... - El doctor movió el aparato por todos lados y... - Si, aquí está, al parecer tienen dos bebés sanos, el segundo bebe no se dejaba ver... -

- ¿Dos? - Mew y Gulf preguntaron al mismo tiempo.

- Oh si ¿No había venido antes a revisión? Serán gemelos ¿Quieren saber el sexo de cada uno? - el doctor seguía revisando el monitor y la mente de Gulf seguía dando vueltas, ¿dos? ¿gemelos? Oh Dios, Mew ya tenía dos hijos, dos más y serían cuatro... Pero que... Giró su rostro hacia Mew y esperaba encontrar miedo, terror, angustia, pero no ¿lágrimas? Nunca había visto a Mew así...

- Yo... Lo... - estaba por disculparse cuando Win palmeo la espalda de su primo y con una sonrisa brillante le dijo: - Oh vaya ¡Gemelos! ¿No vas a desmayarte o si? -

- Imbécil. - Le dijo Mew a su primo.

- Cariño lenguaje... - dijo Gulf, Mew lo miró y en ese momento podría jurar que veía la luna en su mirada. Una mirada de adoración y amor.

- Gulf tendremos gemelos, los chicos estarán felices. - No podía creer que en todo momento Mew siempre pensara en su familia. Dios ¿Cómo tuvo tanta suerte de encontrarse de nuevo con este hombre? ¿Cómo pudo pasar media vida sin él? El amor que sentía no se podía describir con palabras.

El doctor les dio imágenes de los bebes y les dijo que serían dos niños saludables, se sabe que los embarazos portadores son riesgosos y pocos llegan a término. Sin mencionar el parto. Pero todo estaría bien.

Cuando los niños recibieron la noticia que tendrían hermanitos, dos y no solo uno, brincaron de alegría, ambos competían por darle un nombre a cada uno. Era divertido de ver.

Pasaron los días y las semanas restantes hasta que llego el día del parto.


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Holis, perdón por la larga ausencia, en serio no tenía nada de tiempo, pero este capitulo lo tuve que dividir en dos porque ers muy largo, así que esperen el cap doble.

Saludos y gracias por leer, votar y comentar.

El próximo es el final.

Se cuidan.

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