Eres mi Persona 🖤

16. Corazón Roto.

Vestido con la ropa que Mew había dejado en su habitación, Gulf se miraba a si mismo en el espejo, el chico que le devolvía la mirada no era para nada el mismo chico que había entrado en esta casa con el firme propósito de cobrar una deuda antigua, en cambio ahora había un chico que había perdido la batalla contra la única persona que podía hacerle daño.

No se arrepentía de la decisión que había tomado, pero eso no acallaba las voces que a veces se colaban en su conciencia. ¿Y si Mew lo descubría? ¿Si descubria la verdad de por qué estaba aquí? ¿Que pasaría con él? ¿Lo echaría? Dejó que esos pensamientos fluyeran fuera de su mente mientras conjuraba la imagen del rostro perfecto de Mew.

Su voz, sus besos y sus manos que cuando lo tocaban lo hacían olvidarse de si mismo. Lo que lo traía de nuevo a la cuestión en este instante. ¿Por qué quería que fuera a esa fiesta? Confiaba en que Mew cumpliera su promesa y terminara el compromiso. Pero, ¿Despues qué? ¿Podrían estar juntos sin que nadie dijera nada? ¿Sin pasado? ¿Solo ellos y su futuro? Tantas preguntas y tan poco tiempo.

Dio una última revisión y salió de su habitación, en el camino se encontró con May. - Mira que elegante. Estas muy guapo, pareces el novio. - fue un comentario inocente, pero algo en su pecho se sintió mal. No quería estar en una fiesta donde la persona que amaba... Esperen ¿"amor"?.

La mirada de pánico debió reflejarse en su rostro porque May comentó: - Relajate, estaba bromeando. Aunque estés muy guapo, seguramente todas las miradas estarán en la novia. - ahí, otro comentario inocente, pero aún así dolía.

Le agradeció a May y continuó hasta llegar al salón donde la fiesta estaba en pleno apogeo, el lugar estaba decorado con tonos dorados y plata, muy elegante. La señora Sawetre tenía gustos exquisitos. Todo era hermoso.

- ¡Gulf! No pensé encontrarte aquí. - la familiar voz e inconfundible de su mejor amigo lo hizo apartar la vista de donde había estado buscando a...

- ¿Tu, que haces aquí? - le preguntó a Bright. Su amigo sonrió y apuntó en dirección a...

- Oh doctor, hola. - Gulf saludó a Win quien se veía muy elegante, su amigo también estaba guapísimo.

- Hola. - Win saludó.

- Verás, es nuestra... ¿Que? ¿quinta cita? - dijo Bright con una sonrisa de lado al doctor quien en puso los ojos en blanco.

- Finge perder la cuenta, eso te llevará lejos. - respondió el doctor.

- Me alegro ver que ustedes van bien. - y era verdad, que su amigo pudiera estar aquí sin ponerse verde era algo bueno, se le veía mas sonriente. Estaba feliz, eso aligeraba un poco la carga en su pecho.

- Eso es porque en cinco citas y tu no... - Bright tomó de la cintura a su novio y le dijo algo en el oído que lo hizo sonrojarse, era adorable.

- Deja de molestarme. - Win lo empujó en el hombro, pero no salió de sus brazos.

- ¡Tío Win! - dos niños llegaron a abrazar a su tío favorito en ese instante, Bright quitó las manos de su novio para que este se moviera.

Mientras los niños hablaban con Win, Gulf no se perdió la mirada apreciativa que su amigo le lanzaba, no quería verlo a los ojos o se daría cuenta de los sentimientos que nadaban muy cerca de la superficie. Antes Bright estaba tan confundido respecto a Win que estaba distraído, pero nadie lo conocía mejor que él, así que ahora con sus asuntos resueltos, una mirada y vería todo.

- ¿Estás bien? - le preguntó.

- ¿Por qué? ¿No parezco bien? - trató de evadir Gulf.

- Todavía estoy tratando de decidir eso. - ahí estaba, no podía ocultarle nada.