Capítulo 19

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 El joven Caan estaba cansado de estar en su casa, parecía horrible para él pensar que estaba deseando comenzar las clases en la universidad nuevamente pero realmente no quería volver a clases, solo estaba demasiado aburrido molestándose porque lo...

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 El joven Caan estaba cansado de estar en su casa, parecía horrible para él pensar que estaba deseando comenzar las clases en la universidad nuevamente pero realmente no quería volver a clases, solo estaba demasiado aburrido molestándose porque lo único que hizo ese día fue estar encerrado en casa mientras que en su mente se reproducía una y otra vez el beso que le dio a Alfhild, sentía que estaba avanzando con la castaña y solo por un beso pero a la vez no sabía cómo enfrentarse a Faye, jamás pensó que debía romperle el corazón a la pelirroja pero él sabía que las relaciones no eran eternas y a pesar de que estuvieron juntos por muchos años, él estaba cansado y se sintió egoísta.

-¿Prometes cuidar la casa mientras no estamos?-Preguntó su madre mientras ajustaba el adorno rojo de su cabello-Con tu padre haremos una escapada romántica-Agregó la señora Caan en un tono soñador.

-Prometo no hacer locuras-Comentó Bryce-Pero si cambio las cerraduras de la casa, no se sorprendan, tendrán que encontrar otra casa para ustedes.

-Me saliste chistoso.

-Lo aprendí de ti.

Una vez que su madre lo saludó y salió de la casa, se quedó con su hogar a solas y estaba feliz de tener un tiempo para él solo, disfrutaba de su propia compañía; dentro de una hora sintió como alguien tocaba la puerta, al abrirla se encontró con unos ojos marrones verdosos que no eran los de Alfhild, estaba acompañada de un chico de cabello negro y ojos marrones.

-¿Podemos hablar?-Preguntó Shelby sin mirarlo a los ojos-Es sobre Alfhild.

-Sé que piensas que no soy bueno para ella-Dijo Bryce abriendo la puerta aún más para que Shelby y su esposo pudieran pasar-Entiendo que debe estar con alguien de su raza y que no tengo oportunidades con tu hermana pero por lo menos quiero conocerla, más de lo que ya la conozco, no veo qué tiene de malo eso, solo no te preocupes por tu hermana o por lo que yo pueda hacer, porque quiero tratar a Alfhild de la manera que se lo merece, entiendo que es una raza que nunca voy a llegar a comprender del todo pero Alfhild puede enseñarme a respetarla y a quererla, a apreciarla.

-Tienes que alejarte de Alfhild-Exigió Aaron.

-Pero podemos hacer que funcione.

Bryce se dirigió hacia la cocina a calentar el agua para ofrecerle algo a Shelby y a su esposo que en ese momento estaban sentados en el sillón como si él los hubiera invitado, el morocho estaba desesperado y suspirando a cada rato, sentía que mientras el agua se calentaba el tiempo pasaba cada vez más lento, sentía que el peso de sus hombros era demasiado para él, pensaba que sería así de simple, pensaba que sus padres no la dejarían estar con él pero no se lo esperaba de su hermana y mucho menos que el esposo de ella también dijera eso, sentía que no tenía derecho a manejarle la vida a Alfhild cuando la Gris y Aaron no eran más que cuñados.

Sintió que puso el agua a calentar en vano cuando ellos anunciaron que ya debían irse y se creían tan audaces de decir que ellos nunca estuvieron en esa casa y que ellos nunca hablaron con Bryce.

Ella (Grises #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora