5

4.1K 220 3
                                    

Todos estos años de alguna forma Eda siempre estuve presente en mi vida, pero saber que para ella también estaba presente y que sin importar los problemas que tuvimos en el pasado ella le haya contado a nuestra hija todo sobre mi solo hacia que mi corazón se encoja.
Como siempre había dicho Eda era un ángel, no sabía lo que era la maldad. Ella no fue egoísta pensó en Azize e hizo que yo ese presente en su vida aun sin estarlo, eso me dejaba sin palabras.

-Y que le gusta hacer a ella?- le pregunte después de un rato de silencio.

-Serkan ya almorzaras con ella y podrás preguntarle tu mismo, por si no te diste cuenta le encanta hablar- me dijo ella sonriendo..

-A quien habrá salido- le dije haciendo que ría, llenándome los oídos de ese hermoso sonido que hace tanto no escuchaba.

-Pero tu también vendrás Eda- le dije, estaba apunto de protestar cuando escuchamos unos tacones que venían desde afuera.

-Serkan Bolat si yo no vengo no eres capaz de aparecerte por la casa- apareció mi madre enojada mientras yo solo podía mirar a Eda. Mi madre no se había dado cuenta de que estaba ahí pero cuando se giro y la vio se tapo la boca abriendo sus ojos asombrada.

-Señora Aydan, Seyfi- dijo Eda como saludo.

-Eda- dijo mi madre en un susurro y eso que aún no le contaba lo que traía Eda consigo desde Italia, seguro iba a querer matarme.
Se acercó muy lento a Eda mientras ella se levantaba de su asiento para recibirla. Me sorprendió ver como mi mamá la abrazaba fuerte contra ella, estuvieron así unos minutos mientras Seyfi y yo solo eramos espectadores.

-Perdoname- le dijo apenas se habían separado y entendía porque, Eda tenia razón yo si le prohíbi a mi madre hablar con ella.

-Ya no importa- le dijo Eda.

-Estas más preciosa que nunca, tienes un brillo- le dijo mi madre explicando lo que yo desde que la vi note.

-Gracias, usted está espléndida como siempre- dijo Eda.

-Señorita Eda- corrió Seyfi para abrazarla mientras ella lo recibía divertida.

-Yo también te extrañe Seyfi- le dijo sonriendo.

-Porque no me dijiste que había vuelto?- pregunto mi madre desafiandome con la mirada.

-En realidad pasaron muchas cosas desde la llegada de Eda mamá- le dije serio.

-Serkan no importa los problemas que Eda y tu tuvieron tu sabias que ella era muy importante para mi tendríamos que haberme dicho- me reprocho.

-Lo se, pero hay algo más importante que contarte- dije buscando ayuda en Eda que ya se había acercado a nosotros.

-Señora Aydan... tengo una hija- explico Eda despacio mientras mi madre volvía a abrir los ojos.

-TE CASASTE??!- grito mi mamá

-No, no mamá Eda... tuvo a nuestra hija- le dije mirándola atentamente para ver su reacción, Seyfi por su parte se tapo la boca impresionado.

-Su que??- pregunto mi madre en shock

-Nuestra hija señora Aydan- volvio a repetir Eda.

-Ustedes tienen una hija, pero... pero como?- pregunto mirando solo a Eda.

-Cuando su hijo y yo nos... separamos yo decidí irme a Italia y lo hice, pero dos semanas después de haberme ido, me enteré que estaba embarazada- dijo Eda

-Dos semanas... tu, tu me llamaste dos semanas despues- dijo mi madre mientras sus ojos se llenaban de lagrimas.
Otra vez la culpa me invadía, mi madre lloraba mientras Seyfi también con unas cuantas lágrimas la consolaba. Eda por su parte dejó que llore, ella sabía que tenía que llorar por haberse perdido lo mismo que yo.
Pero sentí su mano en mi hombro haciendo que la mirara.

NOSOTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora