34

2.7K 162 7
                                    

Hace una semana que me había puesto en campaña de buscar la casa perfecta para mi familia, pero Eda y yo no encontrábamos una con la que de verdad conectaramos, era como si siempre faltara algo.

Azize tambien nos ayudaba cuando podia, asi y todo no podiamos dejar de lado el trabajo asi que buscar la casa se reducia a las horas libres que pasabamos en el apartamento de Eda, al cual me mude practicamente desde nuestro regreso de Italia.

Otra novedad era que, al estar todos juntos en el mismo apartamento decidimos traer a Sirius con nosotros. Retomando los paseos nocturnos a los que ahora se sumaba mi pequeña.

-Serkan... mi amor?- pregunto Eda pasando su mano adelante de mi cara haciendo que voltee a verla.

-Que?- pregunte sonriendo.

-En que estabas pensando?- me pregunto apoyando su mano en mi pierna.

-En que no encontramos la casa que quiero para nosotros- me quejo haciendo que sonria.

-Ya la vamos a encontrar, ademas estamos viviendo juntos de igual forma no?- me dijo divertida, sabia que de verdad yo queria la casa perfecta para nosotros no me iba a conformar con nada menos.

-Cierto, pero no es lo mismo un apartamento. Quiero una casa, con un jardin donde Azize y Sirius puedan jugar, donde tu y ella puedan dibujar, quiero todo eso Eda- le dije esquivando su mirada y enfocandome en mi computadora.

-Y lo vamos a tener, pero si tu hija y yo no nos quejamos ahora porque te quejas tu? Acaso no eres feliz ahora?- me pregunto entrecerrando sus ojos haciendo que voltee a verla de inmediato.

-Sabes que soy el mas feliz- le dije dejando despues un beso en su mejilla.

-Entonces ten paciencia ya va a llegar nuestra casa- me dijo para volver despues a su trabajo.

Ahora mismo estabamos en la empresa, y mi bebita estaba en casa de Ayfer ayudandola en la cocina ya que tenia un pedido bastante grande para la noche. Engin y Piril se habian tomado el dia aprovechando que Kartal se fue de visita a lo de su abuela, asi que estabamos solo nosostros a cargo de todo lo que queria decir que nos iriamos ultimos, esperando que todos se fueran.

-Tendriamos que pedir algo de cenar despues- me dijo Eda una hora despues, mientras se levantaba de su asiento para estirarse y terminar sentandose sobre la mesa. Nunca antes hubiera aceptado que alguien se siente en la mesa, sabiendo que para eso existen las sillas, pero ver a Eda sentada en la mesa era otra cosa muy distinta, eso y el hecho de que a ella no podia pedirle ni mucho menos prohibirle algo. Asi que yo tambien me levante y me acerque hacia ella abriendo sus piernas para colocarme entre ellas, bajo la atenta mirada de mi hermosa mujer.

-Y que te gustaria comer?- le pregunte acariciando sus muslos mientras la veia morderse el labio.

-No se me ocurre nada aun, a ti que te gustaria?- me devolvio la pregunta, acercandome mas a ella encerrandome con sus piernas en mis caderas.

-Eda...- le dije ronco

-OH!! lo lamento- dijo una voz que conocia demasiado bien detras mio.

-QUE HACES AQUI ERDEM??!!- pregunte girandome en cuanto Eda me solto de inmediato.

-Lo siento mucho señor Serkan, solo venia a avisarle que ya me voy- dijo sonriendo forzadamente haciendo que mis ganas por matarlo aumenten poco a poco.

-Entonces vete, vete, vete Erdem- le dije empezando a enojarme mientras sentia la mano de Eda en mi hombro intentando calmarme.

-Descansa Erdem- se despidio Eda con una sonrisa.

-Nos vemos Eda- dijo algo timido para despues correr a la salida chocandose con todo lo que se encontraba en el camino. De verdad ese hombre tenia la habilidad de ponerme de mal humor.

-Ya deja de pensar en como matarlo- me dijo divertida Eda meintras volvia en encerrarme con sus piernas logrando distraerme.

-Es que lo has visto, siempre es tan....- dije enfureciendome.

-Es tan Erdem, el es asi tu lo conoces desde hace mucho tiempo, deberias saberlo amor- me dijo sonriendome.

-Si pero- trate de defenderme pero fui interrumpido por ella.

-Ademas en defensa de Erdem, tu tampoco eres facil de tratar- me dijo pasando sus manos por mi cuello cortando cualquier espacio que hubiera entre nosotros, y yo gustoso la abrace a mi tratando de ocultar la sonrisa que habia logrado sacarme.

-Puede ser- le dije no queriendo darle toda la visctoria.

-Claro que es- me dijo restandole importancia.

-Bueno que vamos a comer?- me pregunto cambiando de tema.

-Mmm no se tu pero yo ya tengo mi postre- le conteste apretandola contra mi, sacandole una carcajada.

-No esta disponible- me dijo haciendome reir-

-Siempre esta disponible para mi- le dije

-Eres un idiota- dijo dandome un golpe en el brazo.

-Tal vez, pero soy tu idiota- le respondi.

-Un robot idiota- me dijo son una sonrisa haciendo que yo ruede mis ojos.

-Solo un robot idiota me invitaria a cenar en la oficina en la que trabajamos y esperaria sexo como recompensa- me dijo queriendo hacerse la seria y logrando que ahora sea yo el que se carcajee.

-Vamos mi amor, se que lo quieres tanto o mas que yo- le dije escuchandola reir mas fuerte.

-Piensalo bien, con Kiraz y sus hermanos el unico lugar que vamos a tener disponible para nosotros es la oficina, porque ni en casa vamos a poder tener un tiempo a solas. Hay que ser practicos mi hada- le dije acomodando todo su cabello hacia atras, viendo como cerraba los ojos gustosa con una sonrisa en su rostro.

-Con sus hermanos, Kiraz como maximo puede llegar a tener un hermano no mas de eso- me dijo.

-Si es lo que tu quieres... aunque para mi tendria que tener mas que uno. Pero ya paso bastante tiempo desde que hicimos uno de esos, tendriamos que empezar a practicar mas seguido para que nos salgan bellos como la primera- le dije riendo.

-Serkan- me dijo abriendo esos brillantes ojos para verme.

Iba a contestarle pero su telefono empezo a sonar asi que se lo alcance leyendo que se trataba de una llamada de nuestra hija.

-Mami hola!!- dijo del otro lado de la linea mi pequeña.

-Mi bebe hola! Como la pasaste hoy con la tia?- pregunto Eda

-Bien mami, cocine muuucho. Y papi??- pregunto mi hadita logrando ensanchar mi sonrisa.

-Aqui estoy bebita- le dije

-Papii hola!!- me saludo contenta.

-Ya cenaste bebita?- le pregunte cruzando miradas con Eda.

-Aun no papi, pero la tia ya esta cocinando. Me vienen a buscar despues de cenar??- pregunto interesada.

-Claro que si bebe, apenas terminemos de cenar te vamos a buscar- contesto Eda con una sonrisa.

-Esta bien mami, los espero- dijo antes de mandarnos besos y cortar la llamada.

-Ya escuchaste a nuestra hija, comemos y nos vamos Serkan- me dijo Eda bajándose de la mesa y corriendome de su camino con la mano.

-Esta bieeen, ya pido- dije sacando el teléfono.

Cenamos apenas llego la comida, entre medio de la conversación y algún que otro beso para después subirnos en mi auto y dirigirnos a lo de Ayfer a buscar a nuestra pequeña hadita.

Al llegar nos recibió con los brazos abiertos, haciendo que mi corazón salte contento. De verdad esa niña me vuelve loco y la amo tanto que no lo puedo explicar. También nos despedimos de Ayfer y nos fuimos al apartamento donde Sirius nos esperaba.

NOSOTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora