NOSOTROS

22

No dormí en toda la noche, hicimos el amor y en cuanto quedó dormida yo solo no podía parar de mirarla.

Hace menos de una hora que había amanecido y yo estaba muy concentrado viendo como su pecho subía y bajaba con su respiración, con su pelo desparramado por toda la almohada, y esas pestañas que tiene.
Ni siquiera recordaba si hoy había que ir a la oficina o no, y la verdad es que poco me importaba.

La vi removerse y llevar su mano hasta su cara mientras empezaba a estirarse.

-Buenos dias- le dije y abrió los ojos asustada.

-No me mires asi- le dije. Cerro sus ojos un momento y después volvió a abrirlos para mirarme directo a los ojos.

-Buenos dias- me dijo haciéndome sonreír sin poder resistirme a besarla.

-Quieres que desayunemos o prefieres que busquemos a Azize y desayunamos los 3- le dije mientras acariciaba su costado.

-Tal vez deberíamos ir por Azize, yo jamas la había dejado sola ni una noche- me dijo poniendo carita triste.

-Bien vamos por mi bebita- le dije dándole un último beso antes de levantarme.

-Ademas no se que voy a decirle, tu hija pregunta mucho- se quejo haciéndome reír.

-No se porque... pero me recuerda a su madre- le dije volteando a verla como se colocaba el vestido.

-Ja ja ja, tu le explicaras que paso entonces- me dijo sonriendo con sorna.

-Facil, le diré que papá y mamá se quieren tanto tanto que...- seguía diciendo mientras veía su cara horrorizada.

-No le dirás eso a nuestra hija- dijo dándome un golpe en el brazo queriendo ir hacia el baño pero la tome de la cintura antes de eso.

-Te dije cuanto me encanta este vestido- le dije besando su cuello.

-Si? Me lo compre para una cita en Italia- me dijo mientras yo hervía y ella reía.

-Eso no es gracioso Eda- le dije frunciendo mi ceño.

-Claro que si, te pones celoso de medio mundo Serkan-

-Lo dice la mujer menos celosa del mundo no, manejaste tan bien lo de Balca- le dije ahora riendo mientras la veía enojarse.

-Eso no es lo mismo, primero yo tenia razón ella estaba literalmente loca por ti, y segundo por si no te acuerdas dejo que Seiman hiciera su intento de secuestro- me dijo enojada.

-Cierto, tienes razón. Pero dime que no usaste este maldito vestido para una cita con otro- le dije apretandome contra ella y mirándola por el reflejo del espejo.

-No, no lo use. No fui de hecho- me dijo sacándome una sonrisa.

-Bien- le dije para dejarla sola para ir a buscar mi ropa.

No me cabía la felicidad en el pecho, pensar en que ahora si las cosas resultaban bien debería buscar una casa para los 3, o los 4 si contamos a Sirius por supuesto.
Me iba a terminar doliendo la mandíbula de tanto sonreír pero no me importaba.

-Creo que primero tenemos que ir a mi apartamento- comento Eda saliendo de baño.

-Porque?- le pregunte girandome a verla.

-Quieres que vaya con este vestido a buscar a nuestra hija y... a trabajar- me dijo dando una vuelta haciéndome tragar duro.

-Si, iremos a tu apartamento y te ayudare a quitarte ese vestido para buscar uno más adecuado- le dije volviendo a fijarme en mis camisas.

-No necesito ayuda Serkan pero gracias- me dijo mientras se dirigía fuera de la habitación.

Subimos a mi auto listos para ir primero al apartamento de Eda, mientras íbamos ella le envió un mensaje a Melo avisando que en un rato pasábamos por Azize. Y ésta le contesto que entonces la empezaría a despertar para que se preparara.

-De verdad tenemos que pensar que es lo que le vamos a decir a Azize, ella pregunta Serkan. Le digo que volvimos? Le explico que nos separamos pero que ahora estamos juntos otra vez? Y si me pregunta que porque no estuvimos juntos antes? O si...- Eda hablaba sin siquiera pasar aire así que apoye mi mano en la suya para que se callara, y lo hizo y dirigió su atención a mi.

-Respira Eda, tu misma lo dijiste nuestra hija es inteligente. Y nunca le ocultaste nada así que ahora vamos a contarle que queremos estar juntos de nuevo, que vamos a seguir siendo sus padres y que queremos estar juntos porque nos amamos- le dije justo antes de estacionar enfrente de su apartamento.

-De verdad crees que lo entienda, quiero decir el que tu y yo estemos juntos pero que no duermas todas las noches con nosotras o que... no se Serkan ella es muy inteligente pero sigue siendo una niña- me dijo cerrando los ojos y apoyando la cabeza ne el respaldo del asiento.

-Lo entenderá mi amor, ya cálmate. Además si te preocupa lo de no dormir juntos todas las noches lo hubieras dicho y ya llevamos tus cosas a mi deoartamento- le dije con una sonrisa ladeada.

-Serkan no te pases- me dijo preparándose para bajar.

-Esta bien, vamos lento o más o menos- le dije para después bajar del auto.

En cuanto subimos al apartamento Eda se perdió en el pasillo para cambiarse y también para buscar algun libro de dibujo y Ara para Azize. 

-Que miras?- pregunto en cuanto salió por ese pasillo.

-Me gustas con traje- le dije acercandola a mi.

-Estuve llevando trajes todo este tiempo- me dijo frunciendo el ceño.

-Y desde entonces hacer mi trabajo es cada vez más dificil- dije besando su  mejilla mientras ella reía.

Salimos del apartamento y fuimos a buscar a Azize.
Al llegar con Melo esta solo nos lanzó una mirada a ambos para después señalar a nuestra pequeña que miraba la televisión concentrada.

-Pollito, tenemos visitas- aviso Melo haciendo que mi pequeña se girará.

-Mami!!- dijo corriendo para llegar a los brazos de Eda que la esperaba con una sonrisa enorme. 

-Bebé!!- dijo Eda levantandola en sus brazos.

-Hola papi!!- dijo mi pequeña mirándome mientras abrazaba a su madre.

-Buen día bebita!!- le dije acariciando su mejilla.

-Vinieron juntos??- pregunto Azize apenas Eda la dejo en el suelo, mientras se ponía pálida. 

-Si vinimos juntos princesa- le conteste yo.

-No tenemos que ir a la oficina?- pregunto Eda queriendo cambiar de tema haciendo que Azize arruge el entrecejo.

-Ehh si, si tenemos que ir bebita- le dije a Azize. 

-Porque no hablan aquí? Yo no tengo problema- dijo Melo sonriendo de más.

-No Melo- dijo Eda poniéndose sería.

-Pero dada- se quejo Melo.

-Cuñado?- me pregunto Melo poniendo ojos tristes.

-No le contestes- dijo Eda apuntandome mientras yo levantaba las manos y nuestra hija reía.

-Lo siento Melo,  no puedo... aun- le dije guiñando un ojo.

-Nos vamos señoritas?- pregunte abriendo la puerta.

-Nos vemos en la oficina tía Melo!!- dijo Azize mientras la abrazaba.

-Nos vemos pollito- le contesto dejando un beso en su frente.

Los 3 subimos al auto rumbo a la oficina, pero no sabíamos que nos esperaba un interrogatorio  ahí adentro.