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Cuando llegamos afuera nos encontramos con las sonrisas de nuestros amigos, que aplaudían como si ya nos hubiéramos casado, y al final, justo en el lugar en el que Eda me beso se encontraba la ministra lista para declararnos marido y mujer. 

Aunque en un principio estaba nervioso, justo ahora caminando tomado de la mano de Eda me sentía tranquilo, era como si todo estuviera cayendo en su lugar, y yo claro que caía en los brazos de Eda como siempre debió haber sido. 

-Estamos listos?- pregunto la ministra en cuanto subimos y nos colocamos a su lado, nosotros compartimos una mirada antes de que yo me girara y le contestara.

-Listos- dije esperando por minuto a que comience. 

-Bien- dijo ella con una sonrisa. 

-Sean todos bienvenidos, estamos aquí hoy porque el señor Serkan Bolat y la señorita Eda Yildiz solicitaron casarse presentando los debidos requerimientos y presentándose sin ningún obstáculo para que este matrimonio se lleve a cabo. Ahora les pido que declaren verbalmente su deseo de casarse- mientras la ministra daba todo ese inicio a la ceremonia mis ojos solo se fijaban en Eda, así que como ella me devolvía la mirada pero aun así a la lejanía la escuchábamos hablar. 

-Ahora, señorita Eda Yildiz por voluntad propia, sin la influencia o la presión de nadie. Acepta al señor Serkan Bolat como su compañero de por vida?- pregunto la ministra logrando que Eda la mire por un segundo antes de volver a mirarme con su sonrisa. 

-Si, lo acepto- dijo ella segura haciendo que mi corazón salte alterado. 

-Y usted señor Serkan Bolat por voluntad propia, sin la influencia o la presión de nadie. Acepta a la señorita Eda Yildiz como su compañera de por vida?- me pregunto la ministra a mi que sin siquiera perder de vista a mi hada conteste. 

-Por supuesto que si la acepto- conteste emocionado. 

-Y los testigos, dan su palabra de que esta unión es deseada?- pregunto a Piril y Engin, a quienes habíamos elegido como nuestros testigos. 

-Si- contestaron ambos al unísono. 

-Muy bien, entonces por el poder que me confiere el código civil yo los declaro marido y mujer- dijo la ministra mientras escuchábamos los gritos de Seyfi, Melo y Erdem desde atrás acompañados de mi pequeña y de Kartal con los aplausos del resto de nuestros invitados. Pero aunque los voltee a ver por un momento mis ojos volvieron de inmediato hacia mi esposa. 

-Eda Bolat- le susurre acercándome para acabar con esa distancia que se me hacia demasiado larga en estos momentos, terminando por unir nuestros labios en un beso que pareció acrecentar los gritos de nuestros amigos haciendo reír a Eda. 

Al separarnos, Engin y Piril fueron los primeros en abrazarnos. Después de eso despedimos a la ministra que nos deseo lo mejor y quedamos solo nosotros, la familia. 

-Ay!! al fin lo hicieron no puedo creer que haya pasado de verdad!!- decía mi mamá que se tiro a nuestros brazos apretándonos casi hasta hacer que nos besemos como tantas otras veces lo había hecho. 

-Muchas felicidades chicos, de verdad espero que de ahora en adelante solo sea felicidad... para los tres- nos deseo Kemal, tomando a Eda en una abrazo paternal para después sorprenderse cuando yo también decidí abrazarlo. 

-Muchas gracias señor Kemal-  dijo Eda con su gran sonrisa. 

-Gracias Kemal- le dije sonriendo. 

-Felicidades a ambos, de verdad espero que ahora todo vaya bien- dijo Ayfer abrazándonos a ambos, y se que si Eda no estuviera ya me hubiera amenazado para que ni se me ocurriera lastimarla, o lastimar a mi Azize. 

NOSOTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora