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No podía dejar de mirar a la puerta, me estaba dando tortícolis pero hace más de dos horas que mi hija no aparecía por la oficina, y ni siquiera la veía.

Ya había querido ir a buscarla pero Eda me decía que la dejara tranquila al fin había encontrado un amigo de su edad no tenía que traerla aquí con nosotros.
Le pregunte varias veces si no quería un café o algo con tal de salir de la oficina pero Eda se negaba a propósito diciendo que teníamos mucho trabajo.

-Eda- le llame.

-Que Serkan- me dijo cansada.

-Ve a buscarla Eda, de verdad hace mucho que no viene. Ese niño me esta robando toda la atención de nuestra hija- le dije enojado otra vez.

-Sabes que... creo que ya es hora de almorzar- me dijo cerrando los ojos un momento.

-Eso que quiere decir??- le pregunte esperanzado.

-Que vayas a buscar a Azize, y vamos a almorzar por ahi porque ya no te aguanto Serkan Bolat- me dijo irritada pero haciéndome sonreír a mi.

-Perfecto, vamos- dije tomando su bolso y su mano del otro lado, arrastrandola afuera de la oficina como Kartal hizo con mi hija hace unas horas.

Fui rápido hacia la cafetería llevando a Eda conmigo, y cuando llegamos Erdem estaba con mi hija y Kartal. Los cuales estaban sentados uno al lado del otro.

-Erdem- saludo Eda

-Ah Eda, señor Serkan- dijo saludando.

-Azize, bebita vamos a almorzar?- le dije llamando su atención.

-Claro, puede ir Kartal con nosotros- pregunto tocando la mano de ese... hijo de Engin.

-Mi amor, estoy segura de que Piril y Engin quieren comer con su hijo- dijo Eda a mi lado mientras apretaba nuestro agarre, haciéndome dar cuenta de que nunca la había soltado.

-Esta bien mami, nos vemos otro día Kartal?- le pregunto al niño.

-Claro Azize, le diré a mi papá que me traiga más seguido. Me aburro en la casa- dijo el sonriendole a mi hadita.

-Bien! Nos vemos Erdem- saludo mi pequeña mientras esté le sonreía.

-Nos vemos pequeña Azize- le dijo saludando con la mano.

-Ahhh señor Serkan que suerte que la niña saliera igual a Eda, se imagina si salía igual a usted uuhh- empecé a decir tocandose la frente.

-Erdem, no tienes trabajo que hacer- le digo serio viendo como pasa saliva.

-De hecho, si tengo mucho y no es aqui- dijo escapando llevándose a Kartal con él.

-Vamos a un restaurante o vamos a comer en tu nuestro apartamento- me pregunto Eda.

-Vamos a un restaurante pero quiero que vayamos en mi auto, los tres- le dije. La vi pensando un momento para asentir despacio después.

Los tres nos subimos a mi auto para después ir al restaurante donde lleve a Eda la primera vez, cuando aún no sabia el gran amor que le tendría. 
En el camino escuchamos música, Eda y Azize cantaban y bailaban haciéndome reír y recordar viejos tiempos donde Eda bailaba con el pelo al viento sin importarle nada más.

Cuando llegamos Eda al momento reconoció el lugar, Azize iba tomada de cada una de nuestras manos.

-Que bonito lugar papi- me dijo emocionada.

-Asi es mi hadita-  le dije.

Llegamos a la entrada y el mesero nos guió hasta la mesa que alguna vez ocupamos solo Eda y yo.

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