MI JEFE

CAPÍTULO 67: ¿ACCIDENTE?

Respiré hondo caminando hasta encontrar a Alexa sentada en el área de urgencia y en cuanto me vio me abrazó sollozando, lo único que hice fue acariciar su cabello antes de separarme haciendo que se sentara de nuevo.

-Alexa, necesito que te calmas y me expliques lo que le pasó... ¿sí? ¿cómo está él? —sujeté sus manos al ver que estaba temblando y colocándome de cuclillas frente a ella.

-No lo sé, no me han dicho nada, solo sé que fue un accidente de auto cuando salía de la oficina, el doctor aun no sale a decirme nada. —fruncí mi ceño levantándome y saqué mi celular.

-Espera aquí, haré una llamada. —me alejé lo más posible de ella y llamé mi papá. —hola, papá, necesito un favor. —murmuré al escuchar su voz.

-¿Hija por qué te fuiste así, ¿pasó algo? —me recargué en uno de los muros y mordí mi labio mirando el suelo. —pensamos que te había pasado algo, ¿estás bien?

-Matt tuvo un accidente de auto, necesito que revisen las cámaras...algo me dice que no fue un accidente, por favor dile a Jasón que venga al hospital, te mandaré la dirección, que solo venga él, no quiero agobiar a Alexa con todos ustedes aquí, llámame en cuanto sepas algo. —al colgar regresé con Alexa la cual estaba hablando con el doctor, aunque se fue en cuanto me acerqué.

-El doctor dijo que por ahora está dormido por los sedantes, no fue tan grave, pero tiene que estar en reposo por el golpe en la cabeza, tiene lastimadas las costillas, unos cuantos moretones, cortadas y le pusieron un yeso en el brazo izquierdo. —la escuché con atención, sin embargo, cada palabra me hacía sentir angustiada.

-Menos mal no pasó a más... ¿ya avisaste a tus padres? ¿quieres que te traiga algo para tomar? —suspiré al sentir que me abraza de nuevo y no me queda otra que corresponder el abrazo. —estará bien, él es fuerte.

-Sí, les avisé de inmediato, no tardan en llegar y no te preocupes estoy bien, el doctor dijo que puede pasar solo una persona, así que si tú quieres entra primero. —lo dude un poco, pero creo que está bien que lo vea, aunque sea solo unos minutos.

-De acuerdo, pero me iré antes de que despierte y de preferencia no le digan que estuve aquí por favor. —me miró confundida, pero aun así asintió.

-Si eso quieres, lo respetaré, me gustaría saber que pasó, pero... ¡mamá! —se separó de mí y corrió a abrazar a su mamá...uhm...qué incómodo.

-Hola cariño, ¿cómo estás? ¿cómo está Matt? —me preguntó la señora Ana abrazándome y después me abrazó el señor Stephen...dios que tiene esta familia con abrazar.

-Él está bien...algo golpeado, pero se recuperará pronto. —me separé unos cuentos pasos de ellos y me removí un poco al sentir la mirada de la señora Ana examinarme.

-¿Crees que podamos hablar en privado? —fruncí mi ceño confundida asintiendo despacio y la sigo hasta sentarnos en las sillas más apartadas. —dime una cosa... ¿tú y Matt se han cuidado? Digo...ya hace un poco más de una semana fue su luna de miel...y ya sabes. —ella me tomó de las manos...está señora está loca.

-Sí, tome la pastilla, así que lo que sea que esté pensando no puede ser. —no quise sonar tan brusca, pero es que cómo se le ocurre eso. —perdón, no quise sonar tan grosera.

-Cariño...no me mientas puedes confiar en mí, si te lo digo es porque para una madre es muy fácil darse cuenta de algo así y aunque la hayas tomado cabe la posibilidad de que fallara...sé que estás embarazada. —subió su mano a mi mejilla acariciándola, pero la quité lentamente mientras me ponía de piel.

-Señora...lo siento, pero no es así, entiendo que tenga la ilusión de tener un nieto, pero no estoy embarazada...no se lo quería decir en un momento así, pero Matt y yo... —no terminé de hablar porque se levantó tomándome de los hombros.

-Lo estás, solo mira tus ojos, tiene ese brillo y ojeras sé que no me equivoco, podemos ahora mismo sacarnos de dudas e ir a que te hagan una prueba de embarazo. —wow...en serio es igualita a Matt, le importa poco lo que le digo.

-De verdad que no, no lo estoy, no necesito sacarme de dudas porque yo sé que no es así, tengo ojeras porque no he dormido bien y para que se entere de una buena vez...su hijo y yo ya no estamos juntos, le pediré el divorcio. —la señora me miró incrédula frunciendo su ceño. —no voy a entrar en detalles si Matt quiere contarle cuando se sienta mejor pues allá él, con su permiso, me tengo que ir, espero que él mejore pronto. —me despedí de Alexa y su padre para después salir del hospital subiendo al auto.

-¡Pero qué señora tan loca! —grité en el auto comenzando a conducir cuando recibí la llamada de mi papá conteste. — ¿qué pasó papá? ¿averiguaste algo? —pregunté ansiosa.

-Sí, no fue un accidente, conseguí las grabaciones de las cámaras de tránsito y se ve claramente que en cuanto salió el auto de Matt una camioneta aceleró para embestirlo. —hija...la camioneta es la misma en la que huyó Joel.

-Jod*r...papá tenemos que atraparlo ya...no pienso esperar a que le hagan algo peor...iré a la bodega, nos vemos allá y por favor no le digan nada a Jane. —colgué dirigiéndome hacia la bodega, ese tipo va a hablar quiera o no.

Después de media hora llegué a la bodega, mi*rda...olvidé que hoy había una carrera. Pasé entre la gente hasta llegar al área de camerino, cerré la puerta tras de mi al entrar en el que estaba el tipo, esté se encontraba atado de manos aún colgado de las vigas y bastante golpeado, pero eso no será nada comparado a lo que le haré sino abre su maldita boca.

-Ahora tú vas a abrir esa asquerosa boca y decirme todo lo que sabes...ya tu jefe hizo una estupid*z que tú vas a pagar, hizo muy mal en lastimarlo... —murmuré acercándome a la mesa y tomando unas pinzas para luego quedar frente a frente, esta vez voy a proteger a quien amo sin importar las consecuencias. —habla o arrancaré cada parte de tu cuerpo poco a poco...no voy a tener piedad de ti hasta que te vea hecho mi*rda y me supliques que te mate para acabar con tu sufrimiento.