MI JEFE

CAPÍTULO 75: ¿EMBARAZADA?

Creo que llevo media hora riéndome por la idiot*ez que acaba de decir... ¿cómo piensa que me voy a creer eso? Dudo que pueda tener hijos. Ambos me miraban confundidos y negué despacio tratando de calmarme.

-¿De verdad crees que me voy a tragar semejante estupid*z? Y si en caso de que sea verdad, ¿qué ganarías con eso? —parpadee un poco al sentir un ligero mareo...mi*rda tengo que parar la sangre de mis brazos.

-Por mi parte quiero hacerte sufrir y tu querido papá al igual que Liam lo quieren para presionar a Matt a que firme los papeles, es obvio que dará lo que sea por ti y por su hijo. —reí levemente mordiendo mi labio inferior.

-¿Es en serio? ¿ese es su plan? Jod*r...se les quemó el cerebro con eso...tú me conoces más que esos dos id*otas, ¿crees que me interesa lo que Matt quiera o piense? Si estoy embarazada y me van a golpear hasta que aborte, adelante no meteré las manos. —sonreí mirándolo. —de verdad es el plan más estúp*do que he escuchado, ¿qué parte de que no me gustan los niños no entiendes? —ella arrugó el papel saliendo de la habitación molesta lo que me hizo reír.

-¿Qué te da risa? No voy a permitir que le hagan daño a mi hijo. —miré a Matt levantando una ceja. —si quieren que firme lo haré, no dejaré que te toquen.

-En primera dijiste que era un monstruo así que no te debería de sorprender que piense así, ¿no? Además, no seas tonto, si ellos ven que pueden controlarte con esto te van a acabar...puedes tener hijos con tu noviecita, no necesitas esté. —sí sé que no me gustan los niños...pero en caso de que esto sea verdad no dejaré que lo dañen ni a Matt. —necesito que te calmes y dejes que yo me encargue de esto.

-¿Estás loca? Solo los estás haciendo enojar, no vamos a salir de aquí si sigues haciendo eso. —yo tal vez no...pero él sí saldrá, pase lo que pase él tiene que irse de aquí...lo sé, soy id*ota, pero esos imbécil*s pagarán la muerte de Noah. —¿me estás escuchando?

-La verdad...no, me perdí pensando en que si no cierras la boca te voy a golpear. —lo miré sonriendo y le saqué el dedo del medio, aunque eso me costó un leve corte en mi piel.

-Deja de moverte, te vas a desangrar, no te tomes esto cómo una broma...es algo serio, nuestras vidas están en peligro. —creo que está asustado, bueno también lo estoy, pero si se los demuestro nos irá peor.

-No seas ridículo y cállate... —apreté mi mandíbula al ver a Liam con algunas cosas las cuales dejó en la mesa. —hablando de ridículos, apareció el rey. —se acercó a mí con un cuchillo en sus manos y me sonrió.

-¿Qué estarías dispuesto hacer por ella? —le preguntó a Matt mientras deslizaba la punta del cuchillo por mi cuello hasta bajar a mi blusa.

-Déjala ir...ella no tiene nada que ver con esto. —le gritó Matt, pero Liam solo sonrió. —no se te ocurra ponerle las manos encima, maldito.

-¿Por qué no? No sería el primero que lo hace...ahora resulta que todo mundo la puede tocar menos yo. —me tensé al escucharlo y fruncí mi ceño respirando agitada. —oh...ya veo, no le has contado nada, bueno le contaré una pequeña historia sobre una chica llamada Anahí.

-Cállate...a él es al que menos le interesa tu estúp*da historia, ahora o me vas a hacer algo o ya lárgate que no soporto verte. —miré de reojo a Matt, el cual nos miraba confundido.

-No, el que da las órdenes aquí soy yo, cómo decía, esa chica se metió con tantos hombres en su vida cuando era una chiquilla, hasta su papá la usó para ganar dinero, por lo menos hasta que ella se escapó con un id*ota... ¿cómo es que se llama? —me mir* mientras se cruzaba de brazos y sonrió burlón. —tiene un apodo muy curioso...Tato, cuando ellos dos se fueron, esa chica empezó a juntarse con personas malas, obviamente también se metió con ellos, ¿por qué yo no puedo meterme con ella también?

-Eres un maldito mentiroso...sabes perfectamente lo que pasó. —desvié mi mirada al sentir mis lágrimas resbalar por mis mejillas. —ya cállate y lárgate de aquí.

-No miento, te vi en varias ocasiones cuando besabas a tu otro amigo...Matt podre ser una mala persona, pero soy honesta. —se acercó enterrando el cuchillo en mi hombro y mordí mi labio con fuerza evitando gritar, no le daré la satisfacción de verme gritar. —si no me dejarás hacerte gritar de placer mínimo te haré gritar de dolor.

-P-púdrete...eres igual de poco hombre que todos ellos, ¿no se suponía que me ibas a acabar con la basura? Deberías empezar contigo porque eres una mi*rda igual que ellos. —apreté mis ojos al sentir cómo enterró más el cuchillo y me removí un poco.

-Te voy a enseñar a cerrar esa maldita boca, no entiendes que te tengo. —cuando sacó el cuchillo me mordí la mejilla interna y volvió a enterrarlo en mi hombro aún más. —será mejor que empiece el juego antes de que llegue tu papi y arruine el momento. —se acercó a la mesa tomando un bastón eléctrico y se acercó a mí. — ¿recuerdas lo que le hicimos al ruso para que nos dijera en dónde tenía los explosivos? Ese tipo era enorme y con tan solo unas cuantas descargas habló, veamos si tú puedes aguantar un poco más, aunque lo dudo. —respiré hondo apretando mi mandíbula al ver que lo colocó en la herida de mi hombro, me retorcí al sentir la corriente por todo mi cuerpo. —wow me sorprende que no grites.

-¡PARA! Firmare...lo haré, solo déjala en paz. —se alejó al escuchar a Matt y caminó hacia él. —deja que se vaya y firmaré lo que quieras.

-Qué lindo, romeo quiere salvar a su Julieta, pero ¿qué crees?... Julieta es mía y puedo hacer lo que quiera con ella y si o si vas a firmar esos papeles o te mataré. —cerré mis ojos al ver que comenzó a golpearlo hasta dejarlo inconsciente. —jamás había visto a una persona que se desmayará tan rápido...los dejaré descansar solo porque iré a comer. —me dio un beso en la frente antes de salir y miré a Matt.

-Ya se fue...ahora colúmpiate y golpea ese palo con tus pies para que así me desates. —ni hacerse el desmayado sabe...estoy irritada y adolorida.

-¿Cómo sabías que no estaba inconsciente? —rodé mis ojos negando despacio y suspiré. — ¿te encuentras bien?

-Tucuerpo estaba tenso y tus manos en puño, además abriste un ojo cuando él seacercó a besarme. —él no dijo nada y comenzó a moverse...uhm...si lo sigue haciendomuy fuerte le va a doler. —Matt...así no, te vas a... —mordí mi labio y fruncí miceño al verlo azotar en el suelo. —lastimar...