Tu marca en mí

16. Tú Corres por mis Venas

Tú empezaste esto, ahora lo terminaremos, mis venas arden con la sangre dentro, mi corazón late hasta que no lo siento, te necesito, de verdad lo hago, pero parece que el mensaje nunca llegara.

—¿ Halo?– dijo mamá desde el living, ama contestar así. – ¿Sí?... Sí, está en la cocina... Sí, ¿Scott?– dijo a lo cuál no respondí. – ¡Scott!

— ¡Ya!...– fui a dónde ella estaba.

— Es para ti...– musitó mientras me lo entregaba. Salió corriendo.

— ¿ Sí?– dije sin entusiasmo.

— ¿ Usted es Scott? ¿N-Novio, del paciente Matt?– dudó demasiado y le costó decir la palabra “novio” , igualmente me asusté.

— S-Sí...– dije conteniendo la ansiedad.

— Verá, se me informó dar a conocer cualquier detalle de cambio del estado de Matt a dos teléfonos, la madre no atendió y bueno... Sería interesante que viniera en cuanto pueda. Matt estuvo balbuceando cosas, es la primera señal de respuesta a estímulos, pero, no fue estimulado... Lo hizo sólo.

— Y-Yo... Voy.–

Éste es el comienzo de cómo todo va a terminar.

Colgué la llamada exaltado, ¿Sería posible que tantas súplicas y sufrimiento hayan servido? Como fuera, salí y mamá me esperaba en el auto, sonreía.

Al llegar al hospital me salté a la secretaria, a la recepcionista, pasé a llevar a algunos enfermeros que se quedaron mirándome, llamé al ascensor, demoraba mucho, subí corriendo por la escalera, en la planta 5 me detuve y respiré hondo. Abrí la puerta y pasé a un mesón donde estaba la señorita que posiblemente me habría avisado. Me miró y yo le corté antes de que empezara.

— Vengo...– suspire por última vez y ella me sonrió, rubia de ojos oscuros– Vengo por el paciente Matt, el está en el box 7 en Cuidados Intensivos, hace poco lo sacaron de Tratamiento Intensivo, ehh..– ¿Debería decir su apellido? ¿O el mío? , me volvió a sonreír.

— Usted debe ser Scott...– antes de mencionar mi apellido salió de la sala una enfermera y se paró a mi lado.– ¿Qué pasa Celeste?

— Bueno, el paciente del box 6 es estable, pero el 7...– antes de terminar la miré directo a los ojos con curiosidad y fulminante, ella miró a su colega.– Bueno es... Algo privado.– la chica del mesón rió y dijo.

— No hay problema él es su novio.– la miré otra vez, incómodo.

— Ay, perdone... Es que la confidencialidad es...– asentí “Cómo sea” – Bueno, la extraña mención de un nombre en particular es lo que hoy nos ha convocado. El paciente Matt del box 7 pronunció entre balbuceos "Scottie"- siguió hablando con naturalidad mientras yo quedaba pálido y la rubia me miraba ante lo obvio, quedé seco, la miré incrédulo y luego ruborizado.

— Es que, lo que Matt dijo luego de balbucear tanto fue su... Fue su nombre.– una oleada de calor recorrió mi corazón. Matt... Mi subconsciente está agotado de tanto pensarlo. La enfermera me miró sorprendida.