«Sólo quien se fija en los pequeños detalles, puede entender los grandes.»
- José Saramago.Por Scott
A penas te conocí supe que no mirabas atrás, supe, que si sólo esperaba a que dieras la espalda podría caer al piso y me hundiría. Así no verías mi lamentable estado. Tal vez por eso, y 'No es por ser pesimista', cariño, créeme, lo supe. Por eso esperé.
Hasta hace unos años que no me sentía tan... extraño, ahora él llenándome de preguntas otra vez, aunque hipotéticamente no lo és (porque no me recuerda), ahora es hetero y me duele un poco, mucho, harto, no lo puedo superar y lo admito, ¿Cómo cerrar un capítulo si nunca hubo despedida?... sonó el móvil que había dejado en la encimera de la cocina, cosa que no habría escuchado si no hubiera estado ahí, la música estaba alta desde el equipo del living y ya se me hacía molesta, atendí "Jason♡" y fuí a bajar la música.
-¿Scott? ¿Dónde estás?
- Tranquilo, estoy en casa con la música alta... ¿Qué pasó?
- Nada, sólo quería oírte...Por Matt
Por la noche Scott me mandó un audio de 1:33 dónde contestaba algunas de las preguntas básicas, luego de ése audio se desconectó durante toda la noche.
-¿Desde cuándo te conocía?
Sí, eso fue hace bastante tiempo... Harán unos cinco años, aunque técnicamente sólo tres lo supiste.-¿Cómo nos conocimos?
¿Por qué tanto interés? Mira, tengo que decirte una cosa...*gato maullando* Ahora no, vale con que llegaste en el peor momento de mi vida...Le escribí: Me gustan más los perros.
Luego otra vez: ¿Te puedo agregar a Facebook?Lo agregué. Entré a su perfil.
♥En una relación con Jason...
Es gay. ¿Y no me lo ha dicho? Pero sí a sus 1.324 amigos. Sólo llevan cuatro meses.
Esa noche no dormí, me pasaba entre sueños, dormía y despertaba, y en cuanto a ella, estaba en la pieza matrimonial, habíamos discutido así que yo estaba en lo que supongo fué mi habitación. Estaba recordando... Me dolía la cabeza como un demonio, pero cada vez sentía que todo calzaba más y más.
En mi closet había mucha ropa, ropa que ahora no era mi estilo, cosas que no son nada para mí, hasta el perfume es distinto... Me siento como un desconocido hurgando en un closet ajeno, la puerta por dentro tenía un mensaje bastante claro, y sí, escrito por mi puño.
"Sal del éste maldito armario."
Sólo quedé mirándolo fijamente, consternado, tratando de... Pero sí lo entendía, no podría estar más claro, la pobre puerta del closet blanco, debí haber usado unas tijeras o algo así, y luego para estar seguro las ennegrecí. Empecé a mirar la ropa y sonó un golpe al mover un colgador, unas cajas de zapatos, los saqué con pereza empujando con el pie, una no pesaba casi nada, pero debía haber algo... Para estar escondida...
La primera era una caja con deportivas, había sido un regalo, eran muy lindas la verdad, decía "Espero que te gusten, XOXO."
Iba a abrir la caja misteriosa, pero el dolor de cabeza ya era demasiado, me palpitaba, me dolían los ojos, aún así, guardé las zapatillas en la caja y en el armario, la otra... la subí a la cama y me semi acosté colocando una pila de almohadas, inhale hondo y abrí la caja.
Desde ése momento el dolor ya no lo sentí, empecé a ver miles de imágenes que cómo una descarga se hacían parte de mí otra vez, como algo perdido que siempre fue mío.
Fotos.
Cartas.
Pequeñas notas.
Más fotos.
Una agenda escrita por él.
Un perfume.Un dibujo.
Un nombre.
Scott.Por Normal.
Empezó a leer las fechas, al parecer el también le escribía, ahora era nulo en la escritura, lo recordaba, las lágrimas insostenibles por más tiempo caían de manera silenciosa, guardó todo en el mismo sitio.
Empezó a registrar su cómoda, hasta llegar al velador, ahí encontró una carta sellada, era la única en un sobre formal.
No la iba a abrir. Cada línea escrita en esas cartas por la misma persona, no había nada, en él que estuviera peor...
- ¿Matt? Yo... lo siento.- dijo ella del otro lado de la puerta. Él por otra parte estaba enfurecido, pero la quería... No eres tú, no la quieres a ella... LA QUIERO. Debo hacerlo, la estoy queriendo, sé que la quieres... pero no de esa forma. Nunca sería de esa forma...
Claro; es fácil pensar y decir que cualquiera hubiera reaccionado y habría corrido a su ser amado, sí, amado, no lo quería, ya le había gustado, por meses, aunque al ver a una persona sólo tome cuatro segundos que te guste de esa manera mirando sus ojos, ¿Instinto? Sí, completamente, tanto sus ojos como su perfume. Y al platicar con esa persona cinco minutos ya tenemos un vínculo, eso ya es suficiente, ya estás enamorándote el resto del tiempo... De sus defectos, sus costumbres, aprendes... ¿No? Todo es silencioso, es dolorosamente silencioso, es hermoso en silencio, es único entre uno y es independiente, no quieres decir nada porque sabes que no importa lo que diga esa persona, te seguirás enamorando, inevitable y bueno...
Después le dices pensando que no sea un crimen. "Me gustas"
Después estamos en el limbo entre el suspiro y la sonrisa, hasta que responde...
"Y tú a mí"Luego de esto todo lo que sigue es una historia, pero en concreto recuperando el hilo de esto, Matt había vuelto, sí, el olvidado Matt, pero quería intentar... que necesitaba ayuda, no sabía que hacer... Todo se le había ido de las manos...
- Cariño, abre la puerta... ¿Quieres ir con ése chico a alguna parte? ¡Vale! Salgamos juntos... ¿Puedes...?- abrió la puerta y la abrazó, más que nada porque no sabía qué responder, si a penas tenía ánimos, luego la soltó y la chica lo miraba, en su mirada se podía ver la preocupación.
- Solo quiero estar sólo... No tienes que hacer nada que no quieras cariño, solo, quiero...
- Tu espacio, lo entiendo, yo... me preocupaste.- dijo ella cuando en realidad quería decir "¿Qué és eso que tanto debes meditar?¿Desiciones? Obvio, ¿Sobre qué?..." Sí, porque cualquier ser humano que quiere espacio, que necesita pensar, es así, no es algo aleatorio, no es espontáneo.- ¿Lo llamas tú? Lo haría yo pero...
- ¡Sí! Digo, si eso quieres, si el plan iba de verdad...
- Bien, ¿Salimos o aquí?
- Tú dime, hace frío, por lo que a mí no me acompleja... Eso lo decides tú amor.- la tomó de la cintura y la acercó besando su mejilla. No sintió nada más que su contacto y el calor de ella, su sonrisa, era hermosa y era como "redescubrir" cada aspecto de ella cómo uno nuevo.
- Está bien...- contestó ella pasando su mano temerosa por su mejilla, él sonreía, sin razón.- ¿Qué día?
- Sábado... en la tarde.- Esto se siente bien, creo que lo dejaré pasar, dijo su corazón sin oposición, sin advertencia.
- Que bien que te acordaste de mis clases.
- Sí, obvio... Entonces, ¿Lo llamo?- ella se fue alejando hasta llegar a la cocina. Sonrió. ¿Cuántas veces lo podía hacer al día?
- No, cariño, ¡¿Para qué?! Si puedo mandar una lechuza, es más efectivo...- desapareció en la cocina y él mirando la nada fue a buscar su celular y escondió la caja. Marcó su número.Escuchó su voz de nuevo, y como si fuera la primera vez en mucho tiempo, sintió la ansiedad y los nervios que habían sido dejados de lado por un plástico que los cubría, temporalmente, obvio, él rió, Matt decía que sí a todo lo que él decía sin poner atención fija a sus palabras... Había dicho que sí, desde el primer momento había accedido, ¿Hasta que "sí" podrían llegar? Matt volvió a sonreír, pero no lo notaba.
Ya está. Tenían plan para el Sábado.
No resultaría difícil quedar a solas con el...
Sin embargo no quería ser infiel, ¿Cómo lo haría?
¿Ya pensaba en la infidelidad?
¿Cómo había llegado a eso?
No.
No.
No.
Solo es un plan de Sábado, It's not a big deal...
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Tu marca en mí
Novela JuvenilTal vez esto no sea lo que quieras leer. Hay muchas cosas que creo que no te van a gustar, porque serán utilizados algunos clichés, porque creerás que algunas cosas no deberían pasar, porque lo sentimental que esto se vuelva te será molesto, pero aq...