°Laura°
Ya le había dado la trágica noticia a las niñas ahora venía la peor parte, ver el cuerpo de Erick.
Me encontraba camino a la morgue, iba en el asiento del copiloto mientras uno de mis hermanos manejaba, estaba tratando de comunicarme con mi cuñado que había salido primero que nosotros y ya debía estar por llegar, pero me había quedado sin señal al momento de agarrar carretera.
Ninguno de los dos hablaba, se sentía mucha tensión en el camino y solo podía pensar en todos los momentos que pasé junto a Erick y lo rápido que su vida acabó, inclusive tuve hasta una conversación con Dios.
Por eso dejaste que me enterara tan tarde, ¿cierto? Porque sabías que te iba a pedir que por favor lo resucitaras... Para ti no hay nada imposible, abriste el mar en dos, resucitaste a 3 personas según la biblia, por favor ten misericordia de mí y mis hijas, devuelvenos a Erick...
Pero uno a veces no entiende los planes de Dios, y por más que clamé, no era su voluntad que Erick volviera de entre los muertos.
- Ya estamos cerca - dijo mi hermano trayéndome de vuelta a la realidad.
Sólo asentí con la cabeza, realmente no tenía ganas de conversar.
Pasado unos minutos llegamos al lugar, mi cuñado ya se encontraba ahí y se había encargado de reconocer el cadáver, ya lo habían colocado en la urna y sólo se estaba esperando el papeleo para el traslado.
Mi hermano y mi cuñado se saludaron de manos, yo me acerqué a él y me abrazó para darme el pésame.
-¿Puedo verlo? - le pregunté.
- Claro que sí, pero realmente no es algo que te recomiende - me respondió.
-¿Por qué? - le pregunté mientras secaba mis lágrimas.
- Laura, el accidente que tuvo Erick fue bastante aparatoso, tuvo fractura de cráneo, tiene la cara toda golpeada y se ve mal, la funeraria dijo que se encargaría de cubrirle bien los moretones pero realmente está muy herido, igual es tu decisión si quieres verlo.
No le respondí. Me quedé pensando mientras caminaba hacia la morge, cuando estaba apunto de entrar me conseguí al forense en la entrada. Pude saberlo por la bata que tenia junto con su distintivo y nombre.
- Buenas tardes, soy la esposa de Erick Gutiérrez.
Ya no eres su esposa, eres su viuda.
- Buenas tardes señora, mi más sentido pésame. El cuerpo de su esposo ya fue trasladado al ataúd, sin embargo si usted desea verlo yo la puedo llevar.
- No, no quiero verlo, quisiera saber de qué murió.
- Oh, bien. Le explico, su esposo sufrió fractura cráneo-encefálica en la parte superior y baja, es decir, su cráneo se rompió arriba en la coronilla y detrás en el cuello, se fracturó algunas costillas, y se desgarró un pulmón, todo se lo dejé especificado en su acta de defunción, ya se la entrego.
El doctor se fue a buscar el acta mientras yo me quedé ahí paralizada, por qué a Erick le tocó morir de una manera tan horrible, no sabía si había agonizado, si había pedido ayuda, qué fue lo último qué pensó...
Esos y más pensamientos me torturaban en ese momento.
- Tenga, señora... - se quedó pensando mi nombre el cuál aún no le había dicho.
- Laura, mi nombre es Laura. Muchas gracias - le recibí el acta.
- Oh, está bien señora Laura, a su orden.
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Sueño profundo🌹 (En edición)
Tajemnica / Thriller¿Alguna vez has sentido que tienes la vida perfecta? Padre perfecto, madre ejemplar, excelente relación con tus hermanos. Notas excepcionales, una familia unida, amorosa, donde no te falta nada, o... donde aún no te faltaba nada. La vida se va en u...